Semi-Corazonada | Fred Weasley

Capítulo 4

¿Por qué estaban ellos aquí? ¿Qué narices hacían esos en mi habitación mientras que yo dormía? Cosas como esas rondaban mi cabeza haciendo que riera interiormente.

- Vamos, Em. - Escuché decir al que reconocí como uno de los gemelos, si no le veía supuestamente no sabía si era Fred o George, pero al escuchar mi nombre hubo algo que se removió dentro de mi haciéndome saber que ese era Fred, mientras que me hacia una pequeña caricia en el brazo haciendo que por mi columna pasara una corriente eléctrica.

- Por Merlín, Emma.- Decía Héctor con clara desesperación en la voz mientras que me movía levemente el hombro.

- Mmm, ¿qué pasa? - Me digne a contestar aún que me había divertido mucho escuchando como se desesperaban los cuatro personajes que tenía alrededor.

- ¡Viva! - Escuche a George

- ¡La bella durmiente despertó por fin! - Supe que ese era Javi porque era él el que se había criado en el mundo muggle.

- Venga, ahora solo falta que se levante - Empezó a decir Héctor.

- Eso está hecho - Dijo Fred - ¡Venga arriba, pequeño bonsái! - Y sin más me cargó en su hombro como si fuera un saco de patatas, dejé el libro en la mesa justo antes de que me levantara y empecé a patear haciendo que todos los presentes se rieran. Había más gente de la que esperaba, estaban Paula, Amaya, Adelina, Alma, Sofía, Héctor, Javier, George y Fred.

- Vale, vale, bájame ahora que ya estoy más que despierta. - La verdad es que me hubiera quedado en esa posición toda la mañana, pero no quería que nadie supiera lo que me pasaba cada vez que él estaba cerca así que prefería estar en tierra firme, en todos los sentidos.

- ¡Si, mi señor! - Al decirlo Fred, provocó la risa de los chicos y mis compañeras de habitación

- Mi señorA -Le corregí acentuando la A- hay que hablar apropiadamente, señorito.

Tras una mueca por su parte me metí en el baño para cambiarme y hacer mis necesidades mientras que los chicos se bajaron a la sala común y las chicas charlaban animadamente en mi habitación, la verdad es que las chicas se llevaban muy bien con Amaya y Adelina y cada vez venían más con nosotras así que era cuestión de tiempo que se unieran al grupo. Mientras que escuchaba su conversación sobre los amoríos de unas y de otras me di una ducha rápida para después salir.

Al llegar al Gran Comedor nos sentamos todos juntos y a nuestro grupo se unieron el Trío de Oro (Hermione, Harry y Ron) y algún que otro tío intentado ligar con Alma y Adelina, obviamente ellas les dijeron que no era el momento. Y una divertida conversación dio comienzo.

- Por cierto, no es por ser maleducada porque me ha encantado que queráis venir a despertarme, obviando algunos detalles... - Dije mirando a Fred, que se había sentado a mi lado derecho y Héctor a mi lado izquierdo, el que me devolvió una mueca sacando la lengua - pero, ¿por qué habéis venido y por qué estamos todos desayunando juntos?

- ¿¡Perdón?! - Contestaron todos a la vez haciendo que bastante gente se girara para ver si pasaba algo.

- Emma, hoy son las pruebas de Quidditch y todos los de aquí sabemos lo que te importan - Empezó a explicar Hermione al ver mi cara de confusión.

- Bueno, pero todavía tenemos tiempo, me habéis despertado demasiado pronto entonces - Y comencé a tomar mi vaso de leche tranquilamente, estaba nerviosa así que empecé a repasar mentalmente las estrategias cuando vi que todos se miraban entre ellos con caras de preocupación.

- ¿Se puede saber qué os pasa a todos hoy?

- Bueno... haber... que si quieres llamar tener tiempo a... - Dijo Sofía haciendo una pequeña pausa para mirar el gran reloj de pared- 38 minutos exactos, sí tienes tiempo.