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Taehyung

Me tienen que estar jodiendo, de verdad que sí. Mi pecho está oprimido, mi corazón duele y tengo ganas de llorar.

La primera lágrima cae y quiero esconderme. No sé cuánto tiempo ha pasado, la última vez que lo vi fue a mitad de la noche, recuerdo que tenía 18 cuando se fue. Han pasado dos años.

Aún sostengo la puerta y mi mano hace una gran presión sobre la madera, no le tomo importancia al dolor, solo mantengo mi vista clavada en esos ojos grises iguales a los míos. Su cabello ahora es rojo y se ve mucho más brillante que antes.

Su cara es un poema y supongo que la mía tal vez es igual. El aire se corta y ya no puedo ver bien por la cantidad de lágrimas que salen de mis ojos.

Quisiera estar feliz, pero no sé qué siento. Es un remolino de emociones, son tantas que incluso siento ganas de vomitar.

El trata de acercarse pero yo retrocedo. Soñé tantas veces con volver a verlo y oler ese delicioso olor a Jazmines que actuaban como mi tranquilizador personal. No era el olor de mi madre el que lo hacía, solo Jimin podía hacerlo. Ahora, estoy perdido y solo quiero que el olor a ámbar me calme.

—TaeTae... Yo...—Intentó hablar, pero rápidamente se calló.

—Tae bebé ¿quién es?—Hyung salió de la cocina y se quedó mirando extrañado todo.—¿Ocurre algo?—El aroma a tristeza que ambos emanabamos fue suficiente para que hyung se preocupara.

—Disculpen un momento—No lo pensé dos veces y salí de la casa. No conozco el lugar pero de todas formas quiero estar solo. Aún hay cosas que pensar y procesar.

El llamado desesperado de Jin hyung me hizo sentir mal, sin embargo no paré, por muy lento que camine, no voy a parar.

No sé qué pensar, ha pasado tanto que alguna vez imaginé que nuestro reencuentro sería de lo más sentimental. Ahora me doy cuenta que me siento triste y frustrado.

Camino por la calles de la plaza. Hay un fuente y no puedo evitar pensar en que quiero que Hoseok esté conmigo y me diga lo que ha hecho con Minseok, quiero un abrazo y quiero que Jungkook esté conmigo.

Las miradas de confusión por parte de los lobos me importan poco en estos momentos. Supongo que ver a alguien llorando a mitad de camino, no es algo que veas todos los días.

Quisiera ir hacia el campo de flores, pero está muy lejos. Incluso quisiera ir al lago, pero estoy seguro de que voy a terminar perdiéndome.

Encuentro un pequeño matorral entre los arbustos y me quedo ahí, llorando y pensando, tratando de calmar el dolor en mi pecho y todos los pensamientos que me atosigan en el momento. Porque, lo primero que quisiera decirle a mi hermano es lo mucho que lo he extrañado y lo infeliz que he sido desde su partida.

Jungkook

Mi estómago ruge en señal de hambre, desde que dejé a Taehyung en casa de Jin, no he parado de pensar en lo que me habrá preparado. Mi boca se hace agua con tan solo el pensamiento, porque Taehyung cocina delicioso y si soy sincero, me he vuelto dependiente de su comida.

Con entusiasmo fuí hacia la casa del alfa, aún tengo algunas cosas que terminar de realizar y las dejé pendientes con mi partida.

Toqué la puerta y esperé un momento hasta que el imponente hombre salió de la casa. El olor a tierra mojada y menta invadieron mis sentidos.

—Nam... Cuanto tiempo.

—¿Jungkook? Viejo pensé que no volvería a verte.

—Bueno... Yo tampoco.

🍃Solitario 🍃 OMEGAVERSE [KOOKV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora