El encuentro (Asa Butterfield Fanfic)

Capítulo 41

Caminamos de regreso a mi casa. Se acerca para besarme, pero lo evito.

- ¿Que sucede?

-Nada...

-Estas evitando que te bese, pero acabas de decirme que me quede.

-Dije que te quedaras, no que todo volvería a ser como antes.

-Pero...

- La confianza no vuelve de la nada, la confianza se gana, te perdoné, pero esto es demasiado.

- ¿Me darías otra oportunidad?

-Ocupo pensarlo.

-¿Tendrías una cita conmigo?

-Está bien, pero...

-Prometo no intentar nada.

- Bueno.

-¿A las siete está bien?

-Si, por supuesto.

Sonrió y cuando me doy cuenta, estamos en la puerta de mi casa, me besa la mejilla y se despide. Entro y me apoyo contra la puerta, me dejo caer al suelo. Mi corazón palpita como antes o tal vez más. Pero esta vez no seré tan ingenua. No puedo enamorarme y que pase lo mismo, esto es horrible. Asa no me dijo a donde íbamos, por lo cual me puse un vestido negro ajustado, con unos botines de tacón y un collar de perlas. Pasó a las siete por mi, siendo completamente amable, no intentó besarme en ningún momento, estar con él es genial, me hace sentir viva, con mariposas en el estómago. Me llevó a cenar a un jardín ubicado en la azotea de un edificio, el lugar era hermoso, al parecer lo alquiló solo para nosotros, estaba iluminado por candelas y algunas de ellas flotaban en un pequeño lago artificial que había alrededor de nosotros, si, alrededor, la mesa estaba en medio de un lago artificial lleno de nenúfares y candelas. Hace mucho no sentía esa paz que se siente cuando se está enamorado. Pero tuve que recordarme que "solo seriamos amigos" miles de veces esa noche. Le conté lo que Marie me había dicho, se puso pálido y me arrepenti inmediatamente de haberlo hecho, realmente se había alterado, pero me dijo que él no podría volver nunca con Marie, él no la amaba y por eso todo había sido de la forma que fue, me sentí triste porque sabía que ella había estado perdidamente enamorada de él, pero no podía engañarme a mi misma si decía que no me alegraba saber que no la amaba, no porque ella no fuera una buena persona, realmente me caía bien, pero no podía negar mis sentimientos por Asa. La noche terminó entre risas, lágrimas, canciones, baile, vino y no la cambiaría por nada. Llegamos a mi casa a las 12 y luego de eso él se quedó viendo los vestuarios, los bocetos y todo lo demás, hace mucho no me sentía así. Se fue a las tres de la mañana, pero no estaba cansada, me sentía feliz. A pesar de eso cuando se fue, me dormí y dormí como hace mucho no lo hacía.

Al día siguiente lo primero que hice fue llamar a Loxie.

- Hola Loxie

- Alice!!! ¿Pasa algo malo?

- No, solo quería llamar.

- Ajá y yo tengo 5 años y te creo.

- Llamaba para contarte que trabajaré en el área de vestuarios en la nueva película en la que actuará tu hermano.

- No puede ser!!!!!!!!! Aceptaste!

- Si, era un proyecto hermoso y..

- Y tendrá un hermoso protagonista, apuesto a que también aceptaste por eso- ¿Asa les había contado que hablamos vuelto a hablar?

- Emmm

- ¿Han hablado?

- Si - una sonrisa recorrió mi rostro.

- ¿Ha pasado algo?

- Pero que dices, no ha pasado y no pasará.

- ¿Entonces dime por qué hablas como si estuvieras sonriendo?

- Eres bruja, ¿como lo sabias?

- Te conozco, no puedes mentirme. Además eres demasiado obvia.

- Agh tienes razón.

- Soy toda oídos, lo unico que no quiero oír son detalles sucios.

- Loxie! No digas eso!! Lo único que contaré es que fuimos a cenar y eso es todo.

- ¿Aún lo quieres?

- Si.

- Apuesto a que no se lo dirás.

- Me volverá a romper el corazón!

- El ha cambiado.

- Pero tengo miedo.

- ¿Prometes que si te enseño algo no le contarás a mamá?

- Bueno, pero...

- Te enviaré un email, adiós -dijo alegremente.

- Loxie... - pero ya había colgado.

¿Que manera es esa de terminar una conversación? Diez minutos después ya había recibido su email.

Te suplico no le cuentes a mamá, esto estaba en su mail, pero si se da cuenta de que tengo su contraseña va a matarme. Espero que esto te haga feliz o te haga tomar una buena decisión.

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Buenos días mamá, espero que ustedes estén bien. Habrán notado que hace unos días me fui de Londres, fui a buscar a Alice. Podría ser una decisión estúpida o podría cambiarme la vida por completo.

La amo, mamá. No me la puedo sacar de la cabeza, intento no hablarle, pero no puedo. Ella no me quiere, la comprendo, fui un idiota, por eso vine a buscarla. El problema es que ella me está evitando, solo quiere ser mi amiga y duele. Me siento como si me fuera a derrumbar si ella se va. No importa si ella no me ama y solo podemos ser amigos, no quiero que se vuelva a ir de mi vida. Nunca volveré a amar a nadie de esta forma. Me está matando saber que ella se pudo haber sentido así cuando terminamos.

¿Que debería de hacer?

Las amo, cuidense.

Termino de leerlo y noto que mi cara está llena de lágrimas, ¿me ama? ¿Esta vez no romperá mi corazón?

Alguien toca el timbre, limpio mi rostro pero aún se nota que he llorado. Abro la puerta y lo veo a él. Me mira asustado, pero yo solo me lanzo a sus brazos. Con él me siento bien.

- Te amo -susurro en su oído.

- Pensé que nunca te oiría decime eso de nuevo. Pero olvidas algo.

- ¿Qué? - digo confundida.

- Que yo te amo mucho más

Gracias por esperarme son los mejores, ya se cumplió un año de haber empezado con esta historia. Gracias por leerme siempre!