El Verdadero Sentimiento.

48-"¿Qué harías si yo muriera?"

El Joniano se dispuso a llegar a rematar a las bestias para así investigarlas, tenían que hacerlo por su misión y por el conocimiento que adquirirían por sus acciones.

Taliyah por su parte poco a poco perdía el control pero al tiempo se dio cuenta de que ya no debía usar tanto pues su pareja los estaba debilitando con el sangrado y las heridas que le dejaba haciendo que se relajara un poco.

Aquel ninja estaba a punto de rematar a la bestia de color peculiar y morado pero esta rugió escapando de la trampa, se veía mas enojado pero mas que nada se veía con hambre, seguía a Kayn mientras la morena intentaba detenerlo con rocas y trampas pero aquel monstruo las destruía sin más, algo que la preocupaba demasiado.

Aquel Joniano miraba a la bestia, parecía que su única debilidad eran sus ojos y los habría solo en unos instantes, sabia que le seria una tarea sencilla, se acerco a la bestia teniendo cuidado de que no lo aplastara o lo lanzara, al estar lo suficientemente cerca de un movimiento rápido y preciso, con el filo de su guadaña desde el hijo dejo que cortara a la bestia en una linea hasta casi llegar al final de la cola haciendo que un liquido espeso, verde y morado saliera de aquel monstruo.

El Joniano solo sonrió de su victoria pero rápidamente se preocupo por su pareja comenzando a correr. Taliyah por su parte solo sonrió estaba muy feliz por lo que había pasado, aunque se lastimo un poco con algunas rocas que se devolvieron por la bestia seguía en pie aunque no por mucho tiempo. Ella solo cayó de rodillas al suelo pero fue sostenida por su pareja antes de que cayera al suelo, habian completado su mision y no había sido sencillo.

— Parece que te divertiste.— Comentó la morena tratando de recuperar el aliento

— Siempre me divierto, solo que ahora alguien tuvo que lastimarse cuando dijo que no lo haría.— Menciono algo enojado acariciando algunas heridas con sangre de ella haciéndola gemir de dolor.— Sabes, me gusta verte de esta manera.— Se burlo de ella.

— Solo... No lo digas de nuevo...— Comento Taliyah avergonzada.

Kayn por su parte seguía divirtiéndose, besando las partes en las que ella estaba sangrada y lastimada pero la morena comenzaba a molestarse por perder el tiempo después de todo lo que hicieron.

— Shieda... Amo lo que haces pero... No ahora...— Comento ella avergonzada mirando las bestias.

— Oh vamos, quiero mi recompensa después de mi buen trabajo, ¿No?— Pregunto con una sonrisa.

— Vamos Shieda... Dejame descansar a mi también... Llevame a investigar, solo estamos perdiendo el tiempo...— Sonrió.

El nombrado solo suspiro rendido, se levanto y ella la llevo en su espalda cargada hasta las bestias, ahora que los veían mas cercas podían ver la diferencia un poco de tamaños como de colores, era algo extraño y el olor también lo era, investigaban todo lo que podían de aquellos cuerpos ya que estaban seguros de que llegaría algún otro monstruo para comer aquel festín que los dos dejaron para el mismo.

Kayn seguía caminando con su pareja en la espalda y su arma en mano.— Parecía... Estar ya muerto...— Comento la morena pensativa.

— Tal vez ya lo estaba, tampoco es que emitiera algún aura tan pura o buena, parecía que hay algo mas que lo consumía pero... ¿Que podría ser?— Pregunto Kayn mirando a su alrededor, el calor del desierto le estaba comenzando a molestar.

— ¿Te sientes cansado?— La morena lo había notado.

— Oh vamos, nada de esto va a detenerme, cansado es lo menos que estoy.— Y no mentía, simplemente le molestaba el calor.