De pronto las telas fueron desgarradas, solo dos telas, solo dos entradas, algo que no se les complicaría. Un hombre intento entrar por el lado se Kayn pero tan solo apareciendo, su cabeza ya estaba en el suelo rodando mientras que de lado de Taliyah con una piedras había atrapado a alguien dejando en descubierto su cabeza, solo se acerco a amenazarlo con la daga para que hablara.
— Era extraño que este lugar fuera tan barato pero no los culpo, es lindo... Lastima que ahora pensamos en destruirlo.— Sonrió ella aunque no servía de nada pues estaba completamente oscuro, la única luz que se escapaba era la de aquel Darkin.
— Suelteme señorita, esto no le incumbe.— Dijo aquel bandido con seriedad y sin titubear.
— ¿Vienen por el arma milenaria? Lástima, su portador no piensa en entregarla.— Se burlo ella.
— Tu no sabes, ustedes no saben de que hablan, esa arma debe ser capturada o destruida, solo habrá desgracias si la siguen usan-.— El hombre ya no tenia mandíbula, Kayn lo había hecho callar, le había hartado.
— Odio cuando no se pueden callar y decir una y otra vez advertencias absurdas de un arma de granja.— Comento enojado y cansado.
La morena por su parte quería hablar con el pero sabia que no era el momento ni el lugar adecuado, solo quería hacerlo pero debía terminar lo que estaba pasando. Con un suspiro alrededor de la tienda atrapo a los hombres con las piedras, no sabia si los había atrapado a todos pero al menos debía intentarlo.
— Shieda, salgamos.— Menciono ella con tranquilidad caminando hacia la puerta pero aquel Joniano la abrazo y la alejo.
— Aun no.— Respondió para de un movimiento romper la puerta de tela y lastimar a un hombre que estaba en ella.
Taliyah tan solo se molesto consigo misma por no pensar en la posibilidad de la puerta pues no había usado su poder ahí, se sentía peor que antes. Ella solo se soltó de aquel abrazo y continuo, uso su poder alrededor sin importar que necesitara salir.
Al llegar afuera podía notar que no eran tantos hombres, bueno, a su parecer y por las pisadas como intentos de salir de aquellos muros de piedra.
— Shieda. ¿Podrias solo acabar con esto?— Comento ella aplastando aquellas murallas de piedra lentamente.
El Joniano solo sonrió y en las sombras atravesó los muros asesinando sin piedad a los hombres, disfrutando del placer de asesinar con libertad absoluta, lo había extrañado. El al salir la busco con la mirada pero no la encontró, ahora que había luz por la luna no podía encontrarla, pensaba en decir una broma de mal gusto pero no quería mas problemas con ella.
— Estoy detrás de ti.— Dijo Taliyah sorprendiéndolo.
— ¿Quien te enseño a ser silenciosa?— Preguntó en burla.
— Nadie, simplemente ellos hicieron mucho ruido para ti y no percibes de la misma forma a tu alrededor.— Sonrió, ella estaba cargando las mochilas de los dos.
— Hey, vuelve a la tienda, por algo la pedimos.— Kayn solo escucho como ella suspiraba.
— Si, con olor a sangre y cuerpos recién desmembrados, vamos Kayn, no somos así. — Mencionó ella incómoda.

ESTÁS LEYENDO
El Verdadero Sentimiento.
Fiksi PenggemarTaliyah quien fue encargada de recuperar a lo que se llaman "Darkins" decide comenzar a buscar en Jonia para poder ayudarlos y así terminar con una deuda en su nación. Pero ella no pensaría que aquella misión podría darle más problemas de lo que cre...