Me despierto y noto que Dan está apretándome contra su pecho cosa que me parece adorable pero al recordar el estado en que llego ayer hizo que mi humor cambiara un poco. Dan comienza a removerse y a quejarse.
-Taylor: Buenos días guapo- él se queja más fuerte-.
-Dan: No me molestes que no estoy de humor- sentí como mi corazón se volvía muy pequeño- de pronto abre sus ojos y al notar que soy yo esboza una gran sonrisa- Buenos días cariño-
-Taylor: Acabas de decirme que no te moleste- su cara se transforma y transmite pánico-.
-Dan: Lo siento tanto Tay, no quise decirte algo así.
-Taylor: Por que llegaste en ese estado ayer Dan- el solo baja la mirada pero yo lo tomo del mentón hasta que vuelve a elevar su mirada- dímelo por favor.
-Dan: He tenido problemas familiares Tay- algo no encajaba pero deje que continuara- por favor no me juzgues ni hagas preguntas-.
-Taylor: Puedo ayudarte en lo que necesites, ¿lo sabes no?- digo acariciando suavemente su mejilla y Dan solo cierra los ojos con mi contacto-.
-Dan: Gracias preciosa, lo sé- me acerca aún más a su pecho y nos quedamos así por un buen rato-.
-Taylor: Iré a cocinar algo para desayunar, ¿se te antoja algo en especial?
-Dan: Lo que prepares para mi estará perfecto cariño.
Me levanto de la cama y voy al armario así me pongo algo cómodo para cocinar. Decido preparar unos pancakes con frutas y una café oscuro.
Al entrar a mi cuarto me encuentro con un Dan sumido en su teléfono pero al verme lo deja a un lado y me sonríe.
-Dan: Huele delicioso cariño- le sonrío de lado que parece más una mueca que una sonrisa-.
-Taylor: Espero te guste- le paso su plato y me siento en la cama junto a el-.
No decimos nada más, nos dedicamos a degustar el desayuno pero por los gemidos de Dan parece que le gusta realmente.
-Dan: Taylor esto está realmente delicioso, si me recibes cada mañana con este plato juro que jamás te dejare- río por su comentario pero no digo nada-.
Pasamos el resto del día en casa, hasta que a Dan se le ocurrió la brillante idea de ir por unos helados, tomamos una ducha juntos, me puse un atuendo un poco cómodo pero no demasiado para parecer un vagabundo.
Escogemos nuestros helados, esta vez pague yo y luego nos sentamos en una mesa apartada del resto. Note a Dan un poco nervioso pero decidí disfrutar de mi helado y no hacer más preguntas. Terminamos nuestros helados y cuando me dispongo a levantarme Dan me toma de la mano.
-Dan: Quedémonos un poco más cariño- mira hacia los lados con nerviosismo-.
-Taylor: ¿Sucede algo Dan?
-Dan: No cariño, todo está bien.
Preferí no preguntar nada más pues estaba cansada de que todos me trataran como una inútil y pensaran que yo me creía cada vez que decidían ocultarme la verdad. Pasamos varias horas más hasta que mi paciencia se agotó y me levante de mi asiento.
-Taylor: Estoy cansada de esperar, me voy.
-Dan: Ya es seguro irnos cariño, vamos.- lo mire aún más confusa-.
-Taylor: ¿Seguro? O me dices que está pasando o juro que no volverás a verme.
-Dan: Taylor, cariño vamos a un lugar más seguro.
Subimos al coche de Dan con su equipo de seguridad a nuestras espaldas, tomamos un camino bastante inusual para mí, las casas eran enormes y cubrían hasta una manzana completa, aquí vivía gente importante sin duda, damos vuelta en una esquina hasta que nos detenemos frente a un inmenso portón negro, el chofer baja el vidrio e introduce una contraseña en una pantalla ubicada a un costado de la calle e instantáneamente los portones se abren dejando al descubierto un inmenso jardín y de fondo una casa que parecía del tamaño de un campo de futbol. Nos detenemos frente a la majestuosa casa y estaba completamente perpleja por tan hermosa estructura, cada acabado y fachada eran perfectos. Si me había fijado en eso pues mi sueño era ser una de las mejores arquitectas del país.
-Dan: ¿Tay?- lo miro- ¿me acompañas? Quiero mostrarte mi casa- me tiende su mano para bajar y la tomo.
-Taylor: ¿Tú vives aquí?- miraba a todos lados, la inmensidad de esta casa era asombrosa-.
-Dan: Si, aquí vivo cariño, ¿Qué te parece?
-Taylor: Dios limpiar cada parte de esta casa debe tardar por lo menos un mes, esto es inmenso Dan.
-Dan: Bueno para eso está el personal de limpieza cariño.
-Taylor: Si debí imaginarlo, debes tener más de dos mil empleados trabajando aquí- Dan ríe sonoramente-.
-Dan: No son tantos cariño, solo son 50 más los empleados de la cocina y los de seguridad que no superan los 150.
-Taylor: Y me dices que no son tantos, como no- Dan vuelve a reír-.
-Dan: Ven- me tiende su mano y la tomo sin pensarlo- quiero mostrarte el resto de la casa-.
Dan me muestra diferentes lugares de su casa, que realmente parece un museo pues hay demasiadas pinturas de artistas reconocidos y esculturas, mis ojos no saben que mirar, juro que podría perderme todos los días intentando encontrar alguna habitación.
Luego de un grandioso tour Dan se detiene en una habitación en particular y al abrirla mis ojos brillan por completo y sin pensarlo entro, era grandiosa, llena de todo tipo de libros, otra de mis grandes pasiones era leer, por otro lado un gran televisor con todo tipo de juegos de consola, detrás de esto un gran ventanal que dejaba al descubierto un gimnasio y más allá una piscina que al lado de una olímpica se quedaba corta de lo grande que esta era, en definitiva este sería uno de mis lugares favoritos de la casa de Dan.
-Dan: ¿Qué te parece cariño?- me volteo a verlo-.
-Taylor: Esto es realmente hermoso Dan, este sería mi lugar favorito de toda tu casa- Dan ríe- no quise decir que el resto no me gustase pero esto es increíble, pasarías horas aquí encerrada.
-Dan: Aun falta un lugar que, a mi parecer, también te encantará.- lo miro curiosa-.
-Taylor: De qué lugar hablas.
-Dan: Ven sígueme- Dan me lleva escaleras abajo y cruzamos casi toda la casa hasta que él se detiene-.
Entro sin pensarlo y me encuentro con una cocina de en sueños, tenía cada artefacto eléctrico que existía, un refrigerador que sin mentirles parecía del tamaño de mi cama, seguía caminando con Dan detrás de mi sin decir nada, yo seguía impresionada por todo lo que había en este lugar.
-Dan: ¿Entonces? Te gusto esta parte- dijo con su sonrisa que me hacía olvidar todo-.
-Taylor: Tienes una casa realmente hermosa Dan.
-Dan: Puedes venir cuando quieras cariño, quedarte si quieres incluso.
-Taylor: Podría venir en alguna ocasión- dije con una media sonrisa-.
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Vuelvo a caer
RomanceTaylor es una chica acostumbrada a estar tranquila, llena de trabajo y responsabilidad a pesar de su corta edad, hasta que conoce a Dan, el chico de sus sueños, o eso era lo que ella pensaba. Al principio todo era amor, risas y juegos pero luego Ta...