Capitulo 20

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Seguía impresionada con la maravilla de casa que Dan tenía.

-Dan: ¿Quieres ir un rato a la piscina cariño?

-Taylor: Dan no sé si te has fijado que vengo en vaqueros y una sudadera.

-Dan: Por eso no habrá problema, ven sígueme.- Hago lo que me pide-.

Llegamos a la parte exterior de la casa y nos metemos en una casa estilo cabaña que se encontraba muy cerca de la piscina, parecía una tienda al entrar, había ropa de baño de todos los tamaños, colores, y con las decoraciones que quisieras, me volteo para ver a Dan quien solo se encoje de hombros.

-Dan: Suelen organizar fiestas aquí muy seguido mi familia y para evitar que alguien se quede sin usar la piscina mi madre hizo este lugar.

-Taylor: ¿Vive tu familia contigo?

-Dan: No ellos tienen su casa cariño- mi mandíbula se desencaja.-

-Taylor: Espera, ¿toda esta mansión es solo para ti?

-Dan: Bueno si, lo es- yo solo me limito a asentir con mi cabeza- toma el que quieras cariño, y si te gusta más de uno puedes llevártelo, no hay problema-.

-Taylor: Muchas gracias Dan- decido echar un vistazo y me gustan varios pero decido tomar solo uno, voy hacia una clase de vestidor en la parte de atrás y me lo coloco-.

Cuando salgo observo que Dan ya lleva puesto sus pantalones de baño con los cuales se ve realmente sexy, su cuerpo marcado hace que mi conciencia se pierda en segundos. Dan se percata de mi presencia y ahora es él quien casi deja que su mandíbula llegue al suelo.

-Dan: !Oh Dios! Eso te queda realmente sexy Tay- sus ojos brillaban de deseo-.

-Taylor: Tu no estas nada mal guapo- digo subiendo y bajando mis cejas haciendo que Dan se carcajee-.

-Dan: Ven cariño, vamos a la piscina.

Nos metimos y el agua estaba realmente agradable, luego de ver casi una clase completa de natación con Dan nos dispusimos a solo relajarnos en una esquina, hasta que siento el cuerpo trabajado de Dan en mi espalda, abrazándome empieza a dejar besos por mi cuello cosa que hace que mi vello se erice por completo.

Inclino mi cabeza para darle mejor acceso a mi cuello cosa que Dan me agradece en un susurro, sus manos viajan de arriba abajo por mi abdomen hasta que se elevan a mis pechos y los aprieta con fuerza, cosa que hace que suelte un pequeño gemido, mientras Dan masajea suavemente mis pezones por encima de la ropa de baño su boca viaja hasta mi oreja y juro que voy a enloquecer. Sus manos viajan hasta mi espalda hasta que suelta la parte superior de mi ropa de baño haciendo que mis pechos queden expuestos y nuevamente comienza a masajearlos y su boca esta vez baja hacia mi espalda. Puedo sentir la dureza de Dan en mi trasero cosa que hace que me excite aún más y recueste mi cabeza sobre el hombre de Dan. Baja su ropa de baño hasta quitársela y hace lo mismo con la mía, me volteo para quedar frente a él y comienzo a besarlo mientras él me penetra con suavidad, mis piernas se enrollan en su cadera y Dan hace movimientos lentos de entrada y salida de mi cuerpo mientras sus manos juegan con cada uno de mis pezones.

Pasados unos segundos Dan aumenta los movimientos haciéndome gemir con fuerza y mis manos viajan a su cabello tirando de él con fuerza logrando que dan gruña de excitación y que aumente más sus movimientos, mi cuerpo casi pegado a de él mientras sus movimientos eran cada vez más fuertes, faltaba poco para que mi cuerpo se rindiera por completo y pasados unos segundos así fue, estalle y Dan hizo lo mismo pero esta vez vertiendo todo su contenido dentro de mí.

Nos quedamos así por un buen rato, nuestros cuerpos estaban totalmente relajados, Dan con su cabeza apoyada en mi hombro y yo con la mía apoyada en el borde de la piscina hasta que siento cuando Dan quita la cabeza de mi hombro. Al levantarme me está mirando con su gran sonrisa.

-Dan: Me encantas por completo cariño- besa la punta de mi nariz y toma su ropa de baño y se la coloca-.

-Taylor: Y a mí me encanta todo de ti Dan.

Tomo mi ropa de baño y luego recuerdo que alguien pudo habernos visto y mi corazón se acelera.

-Taylor: Dime que ninguno de tus miles de empleados presencio esto- Dan ríe y niega con la cabeza-.

-Dan: No te preocupes cariño, di expresas ordenes de que no quería a nadie cerca de la piscina o en sus alrededores- mi cuerpo se relaja un poco pero no del todo-.

Le pregunto a Dan si puedo tomar un baño en algún lugar para sacar todo de mi cuerpo y relajarlo por completo, el me lleva dentro de la gran mansión y me muestra uno de los tantos baños que debe tener la casa. Tomo una ducha más larga de lo pensado, noto que hay un secador de cabello y lo uso para que mi cabello no me haga parecer hermana del rey león, tomo mi ropa y me la coloco y salgo de allí. Me quedo estática al no saber por dónde, decido ir a donde pienso que es la cocina, camino un largo camino pero me encuentro con una gran puerta, no recuerdo haberla visto en el recorrido que Dan me había dado hace unas horas atrás y dudo en si entrar o no.

Decido entrar, quizás por allí podría encontrar un atajo para llegar a la cocina, cuando tomo la manilla y abro un poco la puerta alguien detrás de mi grita e inmediatamente sé que se trata de Dan.

-Dan: ¿QUE SE SUPONE QUE ESTAS HACIENDO?- su cara estaba echa una furia y su mirada oscurecida-.

-Taylor: Yo... lo siento, intentaba encontrar el camino a la cocina.

-Dan: No vuelvas a intentar entrar a esta habitación, queda prohibido para ti ¿me entiendes?- aun su furia no descendía y yo estaba empezando a sentirme como un niño pequeño-.

-Taylor: Oye ya dije que lo sentía, no soy un niño pequeño para que me grites-. Dan toma mi mano y me lleva a rastras por todos los pasillos-.

Llegamos a la parte principal de la casa, por donde habíamos entrado y Dan seguía tomando mi mano y realmente ya dolía, intente soltarme de su agarre, Dan me mira y de repente todo cambio, miro su agarre y me soltó como si mano quemara cosa que agradecí pues mis dedos ya empezaban un proceso de cianosis, las marcas de su agarre estaban en mí, cosa que me enfureció aún más.

-Dan: Tay, cariño, lo siento tanto- intento acercarse de nuevo pero yo me hice hacia atrás-.

-Taylor: Por favor Dan déjame ir, necesito ir a casa- dije casi en un hilo de voz-.

-Dan: Por favor Tay, perdóname.

-Taylor: Quiero salir de este lugar Dan por favor- mis ojos estaban cristalizados, o salía pronto o rompería en llanto frente a él-.

-Dan: Déjame llevarte por favor.

-Taylor: No, puedo caminar, tomar un taxi o lo que sea, solo déjame por favor.

Dan no insiste más, solo abre la puerta y seguidamente teclea en su teléfono hasta que el portón se abre, no dije nada solo camine con la cabeza baja y al pisar por fin la calle mis lágrimas salían a mares de mis ojos, camino varias calles hasta que me agoto y ni siquiera sé dónde me encuentro. Decido parar un taxi y le doy mi dirección aun con lágrimas en los ojos.

-Taxi: ¿Señorita se encuentra bien?- lo miro y le dedico una media sonrisa y seco mis lágrimas.

-Taylor: Todo bien.

El taxista solo asiente y continúa su camino. Al llegar a casa pago y le agradezco al señor, seguidamente bajo del auto. Subo a mi departamento y me tumbo en la cama y sollozo con fuerza hasta quedarme dormida.

Vuelvo a caerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora