A pesar de todo

Capítulo 12:

- Y Sofi?- me pregunto Feli mientras caminábamos hacia la cafetería.

- No lo sé, tampoco veo a Simon.- le dije mirando entre la multitud de personas que caminaban hambrientas en la misma dirección que nosotras.

- Es verdad, que extraño.- dijo encogiéndose de hombros.

Extraño. Esa era la palabra que definía los últimos días. Casi no veía a Sofi ni a Simon. No sabia donde estaba cada uno de ellos. Y cuando aparecía Sofi ella solo decía que había ido a buscar un libro o a estudiar. Pero la verdad, yo no le creía. Para mi estaba saliendo con alguien. Eso me ponía feliz. Bien por ella.

Hoy ya era viernes. Bendito viernes! Todos los días deberían ser como estos.

Y lo mejor, solo quedaba una hora y luego nos iríamos.

Busque mi almuerzo que hoy consistía de pizza con una botella de agua y una manzana y me senté en una mesa co. Feli.

- Esta pizza tiene gusto a cartón.- se quejó.

-Hey, no insultes! El cartón no tiene la culpa.- le dije- además, un pedazo de cartón tiene mas gusto.

Feli río.

Me concentre en intentar entender algo de mi apunte de biología ya que tendría un examen luego de almorzar. Alguien se dejó caer en la silla que estaba a mi lado. Levante la vista.

Felipe.

Lo mire de mala forma.

- Bueno, tampoco para mirarme así, ya se que soy irresistible pero...- dijo arrogante- además la apuesta terminó. Ya puedo hablarte.

- Ojalá hubiese apostado más días.- lamenté.

- Venís mañana, cierto?- preguntó.

- Claro que va!- dijo Feli metiendose en la conversación.

- Lo pensé mejor, no iré.- le dije.

- Pero si me dijiste hoy que..- empezó Feli.

La intente silenciar con una patada en sus piernas.

- Ya sabias que te pondrías y..- siguió.

Por que mierda no se callaba!? La volví a patear mas fuerte.

- Auch! Por que mierda me estas pateando!?- se quejó Felipe.

Ups. Pierna equivocada. Al menos Feli se había callado.

- Así que... Ya sabes que te pondrás?- dijo divertido Felipe.

- Agh. Que estúpido que sos.- dije parándome.

Felipe río entre dientes.

- Me voy al salón. Te veo allá Feli.- dije parándome. No quería que Felipe me molestara.

- Bien.- dijo ella.

Felipe se paro de golpe y me siguió.

- Qué haces?- preguntó.

- Ya lo dije. Voy al salón.- repetí.

- Si ya se.. pero por qué? Sabes? La mayoría de los chicos de nuestra edad no va al salón antes de que suene el timbre. Si, ya se, sos rara pero..

- Tengo que estudiar, si? Agh- gruñe frustrada- Sos muy molesto! No pudes dejarme tranquila si quiera un segundo!?

-....me gustas igual.- termino el.

Negué con la cabeza y seguí caminando.

- Que estudias?- preguntó el.

- Biología, por si no lo sabias hoy teníamos un examen.

- Ah si.- dijo tranquilo.

- No lo sabias no? Claro, después te aprovechas de alguien y le copias. Igual que todos.- dije entrando al salón de biología.

- Magui, yo si se Biologia. Quiero ser médico. Y si estudié, no le voy a copiar a alguien.

Alce las cejas en señal de sorpresa.

Me senté en mi banco y me puse a leer. Mierda, esto si que era difícil! No entiendo nada!

- No entiendes?- preguntó.

- No! Te podes callar. Intento leer!

- Te explico?

Me reí. Seguía sin creerle.

- Que no entendes?- preguntó acercándose a mi lado.

- Nada.

- Bueno, presta atención acá va una explicación resumida de todo lo que dice eso.- dijo señalando el apunte.- pero...

- Por qué siempre tiene que haber un pero?- mascullé por lo bajo.

- Prométeme que iras a mi fiesta de nuevo.- dijo.

- Ya te dije que iría.- le dije.

- Si, pero lo quiero escuchar de nuevo.

- Agh.- luego sonreí falsa- si iré a tu fiesta.

- Y eres lo mejor del mundo.
- Y eres el peor del mundo.- repetí.
- No no no. El mejor.- dijo alzando sus cejas.
- Y eres el mejor del mundo.- dije casi escupiendo las palabras.
- Ya lo se, gracias igual.- dijo arrogante.

Mejor algo que nada, me propuse escucharlo.

Eso no se parecía en absoluto a un resumen. Sus palabras empezaron a salir de sus labios rápidamente. Pero por alguna razón.. le entendía. Esto era raro. Muy raro.