A pesar de todo

Capítulo 17:

Ya era jueves y la semana había sido bastante movida con demasiados exámenes. Por suerte ya faltaba poco para el viernes. Lo cual me alegraba.

- Bien chicos- dijo la profesora de Lengua- pónganse de a dos para un trabajo.

Con Feli nos miramos y asentimos. Una de esas miradas que te tiras con tus mejores amigos que significan "estamos juntos". Claro que podría haber estado con Sofi. Pero ella no había llegado aún a clase. Lo de llegar tarde y desaparecer cada dos minutos ya se estaba haciendo una mala costumbre en Sofi y ya me estaba preocupando.

- Sofi va a llegar tarde nuevo.- me dijo Feli moviendo su banco al lado del mío.

- Si, no se que le pasa últimamente. Esta extraña.- le dije.

- Si, debe estar en su período.- me dijo.

- Claro. Por... nose... dos semanas? Vamos, le pasa algo más para mi.- le dije.

- Si...- Feli se interrumpió cuando Sofi entro al salón.- mira, ahí llego.

- Me puede decir a que se debe su retraso señorita Sofía?- preguntó la profesora.

- Si, yo estaba arreglando un tema con la profesora de matemática.- dijo ella con cara de niña buena.

- Esta bien, póngase en un grupo.- le contestó.

Sofi se unió a nuestro grupo y nos sonrío. Feli y yo la miramos esperando respuestas.

- Y? Por qué llegaste tan tarde?- preguntó Feli.

- Yo... la profesora de...- la interrumpí.

- No no no. Con nosotras ni lo intentes. Que la profesora de lengua sea imbécil y te crea eso es una cosa. Pero nosotras no.

- No, de verdad, no hay una razón.- dijo Sofi.

- Lo prometes?- la presioné.

- Lo prometo.- dijo mirándome a los ojos.

- No tanta charla y comiencen el trabajo que es para entregar!!- dijo la profesora.

- Bueno, los conectores...- empezó Feli.

Pero yo tenía mi cabeza en otro lado. Qué la pasaba a Sofi? Se que me había prometido que no le pasaba nada, pero una parte de mi no le creía.

Terminamos el trabajo rápidamente y nos pusimos a hablar.

- Quieren venir mañana a casa?- propuse.

- Dale.- dijo Feli.

- Yo no puedo.- dijo Sofi.

- Por? Dale vení!- le insistió Feli.

- Tengo cosas que hacer.

- Cosas? Qué cosas?- pregunté.

- Yo... no puedo decírselos.- dijo apresurada.

Feli río irónica.

- Cómo que no? Somos tus mejores amigas Sofi! Nos podes decir cualquier cosa.- le dijo.

El timbre sonó y Sofi guardo sus cosas rápidamente.

- Perdón, yo... tengo que irme.- dijo y salió del salón.