Capítulo 19: Una mala cena y... ¿El primer beso?

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Capítulo Reescrito

-Estaban conversando de lo más bien, cuando de repente escuchaste unos ruidos extraños que provenían desde afuera.

—¿Oyes eso? ­—Le preguntaste a Michael.

—Sí... ¿qué podrá ser... —Llamo al camarero, para que fuera a ver qué pasaba.

5 minutos después

—¿Qué pasa? —Le pregunto al camarero.

—Lo que pasa señor es que... es que afuera hay muchos paparazis.

—¡¿Qué?! ¿Pero cómo puede ser eso?

—No sé cómo se enteraron, pero saben que usted está aquí...

—No puedo creerlo. —Dijo molesto.

—¿Y ahora qué?

­—Pues tendremos que irnos... no quiero que nos vean. Lo siento (tn). —Dijo desanimado.

—No te preocupes Michael... vayámonos.

-Los dos se dirigieron a la puerta trasera del restaurant, que daba justo con un callejón muy oscuro, y bastante sucio-

-Observabas a tu alrededor algo atemorizada, así que decidiste tomar su mano.

—John nos está esperando, esta como a 3 cuadras de aquí... así que vamos.

-Salieron de ese callejón y pudieron ver a todos los paparazis que estaban a las afueras del restaurante-

—Vamos, antes de que nos vean... —Sujeto tu mano con más fuerza y comenzaron a correr.

-Ibas un poco preocupada, pero no por los paparazis, si no por tus zapatos, y es nunca habías corrido usando zapatos con taco tan alto y temías caerte o torcerte el tobillo.

Estaban a punto de llegar al auto... solo les faltaba una cuadra... pero como lo habías previsto, producto de que la acera no estaba en tan buen estado, diste un paso en falso y te torciste el tobillo izquierdo. A pesar de eso no te detuviste y seguiste caminando con un poco de dificultad-

Michael por supuesto que lo noto, así que se detuvo y te pregunto. —¿Qué paso? ¿Estas... estas cojeando?

Lo miraste avergonzada, mientras que dudabas en sí decirle o no. ­—No, no es nada. Solo me torcí, pero estoy bien. Sigamos. —Trataste de caminar normal hasta llegar al auto.

-Él no dijo nada y se mantuvo así durante el trayecto devuelta al hotel.

Lo miraste. ­—Michael... No se sientas mal. No me gusta verte así.

­—Es que, todo salió mal. Yo jamás pensé que esto pasaría.

-Tomaste su mano, pero él prefirió guardar silencio el resto del camino.

Llegaron al hotel, y subieron hasta el piso en donde estaban sus habitaciones.

Estaban afuera de la puerta de la habitación de él-

—(Tn) realmente siento que esto no haya salido como yo esperaba.

Me siento tan enojado... no puedo creer que nos hayan encontrado. Todo se arruino por su culpa. —Comentaba molesto hacia los paparazis.

—Michael...

—Y como sí no fuera lo suficientemente malo, también por mi culpa te torciste el tobillo y...

Lo interrumpes. —Oh eso no importa. —Le sonreíste­— En serio, estoy bien.

—Pero a mí sí me importa...

Narras tú: Michael seguía hablando y hablando... y la verdad es que lo único que quería por alguna extraña razón era besarlo, en vez de escuchar lo que me decía, lo único que hacia yo era ver sus perfectos labios.

Así que me fui acercando a él lentamente y sin pensarlo dos veces lo besé.

-Tus labios se quedaron sobre los de él por unos segundos, esperando a ver si Michael reaccionaba, pero no hizo nada, así que te separaste de él muy avergonzada -

-Tu accionar lo había tomado por sorpresa, la verdad es que nunca se lo espero. Por lo mismo se sonrojo y no supo que decir.

Tú esperaste a que dijera o hiciera algo, pero al ver que no reaccionaba, te sonrojaste sintiéndote muy avergonzada.

La situación ya era bastante incomoda, pero como no era suficiente, Matt apareció-

—Ya llegaron, y temprano. —Los miro­—. Sí sabían que lo que les dije sobre llegar temprano era solo una broma, no me digan que me hicieron caso ­—sonrió divertido—. Díganme, ¿cómo les fue?

No tenías deseos de responderle así que simplemente le dijiste. ­—Estoy cansada, buenas noches. ­—Antes de entrar a tu cuarto, miraste a Michael y le dijiste—. Lo lamento.

-Él simplemente te observo en silencio.

—¿Paso algo malo? —Matt le pregunto a Michael, sin entender nada.

­­—No, buenas noches Matt. —Dicho esto entro a su cuarto sin darle la oportunidad a Matthew de preguntarle algo más.

Narras tu: Dios, ¿Qué acabo de hacer? ¿Cómo se me ocurre besar a Michael... ¿En que estaba pensando? De seguro él no siente nada por mí y lo único que hice fue que se pusiera incómodo.

Esta primera cita no pudo haber salido peor...

Viviendo con Michael Jackson (Novela de Michael y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora