El martes y el miércoles pasaron rápido, mis dos últimos días se han basado en exámenes, estudiar y más exámenes. Al final pude concentrarme, no he vuelto a ver a Christian en estos dos días y la verdad, se lo agradezco, la universidad es muy importante para mi y estos exámenes finales sobre todo. Si llega a aparecer por casa me hubiera desconcertado y eso me hubiera pasado factura. Hoy nos dicen las notas finales y la nota final general, estoy muy nerviosa.
- Barbara cariño, termina el plato de fruta que te ha servido la Nana, tienes q comer o llegaras tarde a la universidad -papa me sacó de mis pensamientos y me devolvió a la realidad.
-Es que no tengo hambre papá, estoy tan nerviosa por si he suspendido alguna que no tengo ni hambre.
-Oh, vamos cariño, has sido la mejor estudiante de la universidad, notas excelentes todos los años, ¿ahora te entran las dudas? Mi niña, no te preocupes, todo va a estar bien.
-Vale...
No dije nada más y miré el plato de fruta que tenía delante, cogí un cacho y me lo comí, eso me abrió el apetito así que al final me lo terminé.
Subo a mi habitación a buscar mi bolso y lo que necesitaba para el día de hoy. Me visto con un pantalón y un jersey. Me lavo los dientes y ya estoy.Bajo las escaleras y veo a papá hablando por teléfono. No escucho lo que dice y tampoco me esfuerzo en hacerlo, seguro que es algo de la empresa o parecido.
-Víctor - llamó a mi chófer para que venga. - Me llevas hoy a la universidad, no me apetece conducir.
-Si, señorita Barbara, ahora mismo voy a por el coche, le avisaré para que salga.
Salió por la puerta y en dos minutos ya estaba aquí, que bien me cae este hombre.
20 minutos más tarde ya estaba en la universidad, me despedí de Victor y baje del coche.
-Te llamaré para que vengas a buscarme, será un poco más tarde, voy con Lucía a hacer un café, aquí en la cafetería - le dije a Víctor.
- Esta bien señorita, cualquier cosa me llama.
Asentí y me fui hacia la puerta.La mañana paso muy lenta para mi gusto, las notas no podían haber ido mejor ya que en todo saqué sobre saliente, cosa que me sorprendió, los últimos exámenes no habían salido bien o eso creía yo. Estaba tan contenta que ahora mismo nada ni nadie podía borrar mi sonrisa de la cara. Quedé con ir a la cafetería con Lucía y luego al centro comercial, esta noche queríamos salir para celebrar que las dos habíamos aprobado con buenas notas. Mañana no teníamos que venir a la universidad hasta las 12 del medio día, así que podíamos salir un rato perfectamente, avisaríamos a los chicos.
Fuimos al centro comercial y pasemos la tarde allí, comimos algo, compremos cuatro cosas y ahora nos íbamos a casa a descansar un poco y arreglarnos para salir.
Hoy tenía ganas de pasarlo bien, había terminado la universidad, mañana era la despedida con los profesores y el domingo la graduación. Ya tenía ganas de ponerme la ropa que había comprado para ese día tan especial.
Llegue a casa y grite emocionada.
-¡PAPAAAA! Ya he llegado y traigo buenísimas noticias -no me respondió nadie, me sentí idiota por unos momentos, papá tenía que estar aquí, esta su coche.
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El socio de papá.
Ficção AdolescenteBarbara 20 años. Christian 34 años. ¿Para el amor hay edad o simplemente es un número mas?