Diego y el vagabundo (Completa)

capítulo 12

Vicente que siendo mi mejor amigo es el que mejor me conoce, me recomendó que no actuara como siempre siendo demasiado posesivo con Álvaro e intentase no agobiarlo. Sus palabras me hicieron pensar por lo que decidí invitarle a comer sobretodo para que Álvaro interactuase con más personas que solo conmigo, aunque a mi eso me agradaba un montón él podría sentirse preso en mi casa.

Sorpresa nos llevamos ambos cuando al entrar Álvaro salta a mis brazos, de manera literal, y me otorga un apasionado beso colgado de mi cuello.

-¿Me voy?-cuestionó Vicente confuso al ver esta escena, al escuchar la voz de este Álvaro separó sus labios de los míos asustado, le agarré mejor ya con una sonrisa tras mi sorpresa y mirando a mi amigo contesté:

-Sinceramente no se que responderte, Vicente.

-No esperaba visita.-comentó Álvaro avergonzado sin levantar la cabeza del suelo.

-Ya me imagino.-respondí alegre.-Espera que te ayudo.-Indiqué soltándolo en el suelo y acercándole una muleta que había dejado apoyadas en la pared.-Le he invitado a comer.

-Es tu casa.-respondió seco desplazándose hacia la mesa donde tenía un libro y me quedó confuso.

-Venga que te ayudo hacer la comida.-indicó Vicente caminando hacia la cocina, miró a Álvaro con una sonrisa en su camino pero este le miró como si le intentase matar con ella, al ponernos a ello y llevar un rato en la cocina,comentó jocoso en bajo intentando que él no nos escuchase:-Me da que no le gusta mi presencia.-Me encogí de hombros pero sin querer con una enorme sonrisa pues estaba encantado con la situación, con el mismo tono recomendó:-Si ves que es celoso no le empieces a probar para ver hasta que nivel lo es, no tires demasiado de la cuerda, solo tiene 18 años y los jóvenes suelen aguantar poco.

-Lo sé,lo sé.-Le miré de reojo y susurrando pregunté:-¿Si no quieres que tire de la cuerda por qué te has quedado?

-Porque también hay que poner límites, tú puedes tener amigos y eso espero que le quede claro.

-Gracias.-agradecí sobretodo por que lo vi como una petición "Aunque tengas novio no dejes a tus amigos" y en ese momento fue muy reconfortante descubrir que tenía un amigo de verdad.

Álvaro no se movió de la mesa y lo único que hizo fue mirarnos de vez en cuanto serio y cuando susurráramos con gesto de sospecha, la mesa sobretodo la puso Vicente y nos sentamos los tres a comer, como siempre comenzamos un rato en silencio, al final lo rompió Álvaro con una pregunta:

-Vicente...¿Tú tienes pareja?-Mi amigo alzó una ceja mientras me miraba de reojo y contestó mirando hacia él con una sonrisa amable:

-Sí,estoy casado y además tengo dos niñas: una de 7 años y otra de 3.

-¿Entonces por qué comes nosotros?-Su pregunta nos dejó rotos, estaba tan absorto que dejé caer mi cuchara sobre el plato.-Me refiero que si yo tuviera una pareja no me gustaría que comiese por ahí.

-Es solo un día.-respondió volviendo a mostrar una sonrisa tras su sorpresa.-La he escrito diciendo que hoy comería con dos amigos.-dijo intentando que Álvaro dejara de mirarlo como si fuese un enemigo.-Con que regrese pronto no la importa.-Álvaro apretó el gesto mostrando su descontento, yo no podía evitar que me apareciese una sonrisa tonta,Vicente nos miró a ambos y luego preguntó mirando plato:-Álvaro ¿Te hubieras molestado si Diego hoy no hubiera comido en casa?-Vicente observó el gesto de extrañeza de Álvaro y explicó con una mentira que me hizo mirarlo confuso mientra la decía:- Es lo estuvimos hablando, dudamos en que el viniera a mi casa a comer con mi familia o comer los dos aquí contigo.-Álvaro miró a otra parte y contestó en un hilo de voz: