LUNA UNIVERSITARIA (BENJAMIN)

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 Pasaban los días y ya me estaba acostumbrando a convivir con mi nuevo compañero Simon, la verdad era bastante genial, no solo por las cenas y desayunos prácticamente gratuitos, sino también porque ya tenia compañía. Era un poco extraño porque Simon aseguraba que los de mi especie existían, de hecho era un gran fan de películas de hombres lobo <<Si tan solo supiera que si existimos>> no me animaba a decirle por su propia seguridad, o por simple miedo de que no me creyera, pero era mejor así... Solo charlar de temas comunes, la universidad por ejemplo, u otra de sus grandes pasiones, la astronomía, nunca había visto a alguien que amase tanto las estrellas y esas cosas, y la verdad es que su entusiasmo contagia...


   —Oye viejo, te veo un poco distraído ¿está todo bien? —La voz de Simon me sacó de mis pensamientos.

   —Si... Es solo...

   No pude terminar mi frase, por la puerta de la cafetería estaba entrando Jasmine, con su hermosa sonrisa, su hermoso cabello negro y sus ojos que cada vez parecían más profundos, llevaba unos jeans rasgados, una sudadera rosada y unos muy bonitos sneakers. Junto a ella venia otra chica bastante atractiva a decir verdad, una chica que a plena vista con su baja estatura, un vestido, un cárdigan negro y tacones parecía superficial, pero odio opinar sobre la gente a simple vista...

   —¡Ben! ¿Cómo estás? ¿Podemos sentarnos aquí? el lugar está muy lleno —Dijo Jasmine sonriendo.

   —Oh Jasmine, claro no hay problema —Le devolví la sonrisa.

   —Gracias, por cierto, ella es Anne, una de mis compañeras de piso.

   Le extendí mi mano a Anne a modo de presentación y con una sonrisa le dije mucho gusto a lo que ella respondió con otra sonrisa.

   Ellas habían ordenado un desayuno tradicional, dos piezas de pan, un café negro y algo de mantequilla, mientras que yo por mi parte ya estaba terminando de comer y solo estaba organizando algunas tareas que debería entregar.

   —Oye Ben, iré a comprar algunas cosas para la comida, ¿algo que quieras en especial? —Simon se acercó y me preguntó.

   —Ehmmm, si ¿Puedes comprar algunas variedades de té? en los supermercados suele haber algunos paquetes con diferentes muestras, pruébalos y compra unas cinco o seis variedades —Le dije extendiéndole un billete de cincuenta libras.

   —Perfecto, los ingleses y su manía por el Té, a ver si algún día me acostumbro —Dijo Simon tomando el billete.

   Tras el comentario de Simon, Jasmine se me quedó viendo, sonreía, pero a la vez en su rostro había una expresión de desconcierto y confusión.

   Me veía y en su expresión solo lograba leer una pregunta "¿Lo conoces?" sin que Ella me preguntara simplemente respondí.

   —Es mi compañero de piso, fue algo inesperado, pero... No tenía donde quedarse y yo tenía una habitación extra —Dije dirigiéndole la mirada a Jasmine quien cambio su expresión de desconcierto por una hermosa sonrisa.

   —Oh, entiendo, es genial...

   Anne por su parte solo permanecia en silencio y continuaba devorando sus piezas de pan, <<Vaya apetito>> dije dentro de mi.

   —Oye Anne, ¿Qué tal si hablas un poco con Ben? —Dijo Jasmine a quien miró con Rabia por interrumpir su comida.

   —Pues... Bueno... Ya Que —Dijo encogiendo los hombros mientras fruncía el ceño—. Soy Anne D'Prock, vengo de Manchester, mis padres son divorciados y estudio economía.

   La verdad es que dentro de mi pensaba, vaya chica, muy pocos son los que se aventuran a estudiar economía por odiar los números, yo por ejemplo, preferí las ciencias sociales porque son solo letras, hechos y conocimientos políticos.

   —Oye pues que genial, ¿Y a que te piensas dedicar?

   —La verdad solo estudio economía por mi padre, si no lo hago me deshereda, pienso usar mi herencia algún dia para abrir algún negocio y esas cosas.

   —Oh... Genial —Mentí, la verdad habia arruinado todo lo que habría llegado a pensar de ella... Alguien que espera una herencia para intentar ser alguien no merece la pena, yo no esperaba una herencia, sin embargo vagaba por casa de mis padres para evitar hacerle daño a alguien—. Oigan debo irme —Dije levantándome de la mesa.

   Me despedí de Jasmine y Anne con un beso en la mejilla, no podía seguir escuchando la historia de alguien que esperaba una herencia para ganarse la vida...

   No era mi forma de pensar favorita, tampoco me gustaba criticar a la gente, así que simplemente decidí salir de la cafetería haciéndole un gesto a Simon con la mano y salí.

   Pasaron horas y yo aún estaba sentado en el pasto, podría estar observando a la gente caminar, sin embargo había algo que pasaba por mi mente, y era algo que Simon llevaba días recordándome, la luna, esta noche habría luna llena y debía correr a las colinas.

   Seguía mirando a la gente pasar y caminar mientras estaba sentado en el pasto, a lo lejos logre percibir que Simon se acercaba con las compras, y más allá, estaba ella, Jasmine iba caminando junto a su amiga Anne, iban algo apresuradas asi que imagine que iban a alguna clase extra o algo.

   Tras seguir viendo a Jasmine caminar me sentía cada vez más extraño, era hermosa, era perfecta hasta en su caminar.

   —Oye viejo, ¿Sucede algo? —Nuevamente Simon me sacaba de mis pensamientos.

   —Ehmmm, no, solo estaba pensando. Oye debo hablar contigo, hoy ire a cenar con mis padres, volveré mañana por la mañana —Dije tratando de disimular.

   —Oye, pues genial, yo me quedare en casa terminando de arreglar algunas cosas de mi habitación.

   —Si, suena bien, yo me voy ahora antes de que se vayan los buses del mediodía, nos vemos mañana.

   —Nos vemos —Dijo Simon estrechándome la mano.

   Por la mañana antes de salir de casa, ya habría empacado algo de ropa así que solo debía salir, llegar a las montañas y simplemente esperar la luna llena y volver al día siguiente como si nada fuese pasado.

   Camine por las mojadas aceras que rodeaban la universidad, hacia algo de frio y estaba lloviznando un poco, había poco tráfico y pasaban pocos autos por la vía. En dicha acera solo pasábamos un grupo de chicas que iban detrás de mí y yo.

   Seguí caminando sin siquiera prestarles atención, ellas tomaron un camino por la derecha mientras que yo debía seguir caminando recto hasta llegar a la base de las colinas.

   Seguí mi camino hasta que llegue a las colinas, busque un sitio para dejar mi mochila, un sitio oculto pero que yo pudiese encontrar con facilidad. La escondí y seguí caminando hasta llegar a una parte bastante boscosa, donde podría ocultarme.

   Mientras pasaban las horas yo solo miraba al cielo, buscando la luna, esa luna llena que haría que la bestia emergiera de mí y al día siguiente todo volvería a la normalidad.

   Volví a ver la luna y allí estaba... Había llegado el momento y comencé a sentir el dolor de mis extremidades extendiéndose, de mi columna encorvándose y el dolor de sentir como las facciones de mi rostro cambiaban poco a poco a la vez que iba perdiendo el control de mis acciones y el conocimiento.

   Desperténuevamente, de costumbre estaba totalmente desnudo, pero había algo extraño enmi... miré mi cuerpo. Estaba cubierto de sangre...

AMOR DE LUNA LLENADonde viven las historias. Descúbrelo ahora