Crónicas de una Heteroflexible

CAPÍTULO 11

Ya eran pasadas de las 12:30 de la madrugada, me estaba quedando dormida pero estaba angustiada, Lucero ni un whatsapp me había enviado ¿Qué había pasado? ¿Y si su mamá tuvo un infarto? ¿Y sí a su papá le había pasado algo? ¿Y su hermana? ¿Qué podía ser tan grave para que Lucero me dejara así de buenas a primeras? Me estaba llenando la cabeza de dudas, quería una noticia ya, la verdad no me importaba si era buena o mala, quería solamente saber que le había sucedido.

Me dieron las 2:00 am, no me decidía ¿Le llamo? ¿Qué le digo? Aún no somos nada, bueno… pero haber hecho el amor ¿Cuenta como algo más serio, no? ¿Sí?  Ojalá…

Le llamé 23 veces, no es que las haya contado y que me desesperará y que no pudiera dormir hasta las 4:40am, para nada a mí no me pasa eso.

Desperté a las 10:40am, tenía que hacer el horario de la Universidad a las 12:00pm, me había levantado justo a tiempo, y no tenía ni una llamada de Lucero, okay... Comencé a preocuparme un poco más, ¿Qué carajo habría pasado?, baje y le conté a mi mamá sobre cómo nos había ido mientras desayunábamos.

-          ¿Y entonces el rio de Allende esta bonito? – Decía mi mamá-

-          La verdad sí, esta super hermoso y luego Lucero y yo nos metimos a jugar… me sentía como niña chiquita…

-          ¿Lucero y tú? ¿Y las otras niñitas?

-          Ellas acaban de comer, por eso no se metieron hasta mas tarde…

-          No quiero tragedias Samay, ¿okay?

-          ¿Qué insinúas? – le retaba a decirme que pensaba que era lesbiana-

-          Pues que no te emociones con Lucerito, si podrá ser toda una niña bien que nos trae regalos y toda la cosa pero las apariencias engañan, solo ándate con cuidado y no te emociones…

-          Ay mamá, ¿Piensas que soy Lesbiana?

-          Pienso que estás en la edad en la que quieres experimentar y es normal y por eso te dejo, pero cuídate tu corazón… me tarde un chingo en hacerlo como para que unas tetas te lo rompan en menos de lo que canta un gallo…

-          Mamá, tranquila… yo y Lucero no somos nada más que amigas y me ofende un poco que pienses que soy de esas que namas andan picando pa’ ver que encuentran…

-          No eres de esas, por eso te digo que te cuides y que no la friegues estás muy bonita para esa muchacha, Nose te hubieras conseguido mínimo una de San Peter o de Chile o algo lejos..

-          comencé a reír- ¿Osea que aceptarías una relación Lesbiana en tu casa?

-          No es que la acepte, Samay… lo que pasa es que eres mi hija y el amor de una madre es incondicional…

-          ¿Qué piensa papá de eso?

-          A tú papá se le hace sexy que salgas con una mujer, dice que eso es una fantasía de los hombres..

-          Ambas reímos como locas-

-          ¿De verdaaaaad mamá? – aún reíamos-

-          Sí, está mal del cacahuate ese hombre…

-          Igual tranquilos, no hay nada entre esa morrita y yo, tranquilos…

-          Haré como que te creo y luego cuando vengas a llorar te diré te lo dije y me sentiré más satisfecha…

-          Ya mamá, no pasará nada.