Nuestro segundo hogar

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El viento lo obliga a arrastrarse en el suelo, gira un par de veces quedando boca abajo. Kai lo mira con seriedad, sin embargo, el peliazul se levanta con dificultad e invoca un nuevo monstruo.

-No vas a rendirte ¿verdad?- agregó el castaño.

-No pienso hacerlo- respondió con dureza mientras con una mano se limpia la sangre de la comisura de sus labios.

Reiji ataca y lanza a Haru lejos, haciendo que se golpeé la espalda en el muro, el menor no puede manejar bien el deck de Yuya, el mayor acomoda sus anteojos.

-Tu entusiasmo es evidente- agregó- pero hay algo que te detiene.

Haru se incorpora.

-El deck responde los sentimientos de su dueño, los monstruos del duelo son más que simples cartas, son más que un simple juego, son parte de nuestra vida, nuestra otra mitad del alma. Sólo te enfocas en vencerme, y no tomas en cuenta los sentimientos del corazón de las cartas- explicó Reiji- el antiguo dueño ha muerto, el deck debe saber que su nuevo dueño eres tú, de lo contrario, los dragones no te obedecerán.

Haru observa el deck.

-¿Quién eres? ¿A qué le tienes miedo? ¿A quién proteges?- preguntó el mayor- ¡Batalla!

Ordena a su monstruo que ataque. Disminuyó los puntos de vida, está al límite, pero la mente de Haru está en otra parte.

"¿Quién soy? ¿A qué le tengo miedo? ¿A quién quiero proteger?" pensó distraído.

Yuto detiene el ataque, espera que Nicole se incorpore.

-Cuando descubras quién eres...- dijo- no tendré compasión contigo.

La castaña levanta la mirada- ¿quieres decir que no estás dando todo de ti?- preguntó con hostilidad.

-Hay algo que te detiene- respondió tranquilo- puedes seguir luchando, pero hay algo que te falta.

-¿Saber quien soy?

-¿Quién eres? ¿A quién quieres proteger?

Eso la tomó desprevenida, Yuto trata de decirle algo, pero ¿qué? Esas preguntas deberían tener respuestas congruentes, pero algo le dice que ella no las tiene, al menos no en este momento.

Yugi logró salvarse, pero Shun no está contento.

-¿Crees que con ese nivel vas a  vencer a Leo Akaba? No te confíes demasiado- dijo.

-¿Qué?- no entendió lo que el mayor trata de decirle.

-¿Por qué estás luchando? ¿Por venganza? ¿Por qué aceptaste ser uno de los legados de Yuya Sakaki? ¿Eres el rey de los juegos?

Eso lo sorprendió, lo tomó con la guardia baja, ahora que lo menciona, no se había preguntado eso ¿en verdad se considera el rey de los juegos? Ese título siempre le pertenecía a Atem, ya que siempre ganaba en los duelos, él nunca a tenido un duelo serio con nadie más, siempre jugaba con sus amigos, pero es porque nunca había una amenaza, siempre se refugiaba en Atem. No. Eso no puede ser, entonces ¿quién es él realmente? ¿De verdad podría ser un legado de Yuya? ¿De verdad se merece ese título el haber aceptado la misión que Atem le ha otorgado?

Aichi observa a Kai, sin darse cuenta, ignoró por completo el paisaje donde se encontraban, algo cambió. El ambiente se siente diferente. Es como si su pasado ya no tuviera sentido alguno, todas las peleas que tuvo en su otra vida, las veces que salvó su dimensión, son recuerdos vagos, cómo si hubiera dejado ir todo a su paso, soltó por completo todo su rencor y ahora...

"¿A quién quiero proteger?" pensó Nicole.

"¿A qué le tengo miedo?" secundó Haru.

La maldición del dragón (Temática Yaoi (chicoxchico))Donde viven las historias. Descúbrelo ahora