-Cariño, en cuanto lleguen las vacaciones, podríamos ir a Hollywood, o a Nueva York...-dijo Aichi del otro lado de la línea, mientras Shouma lo escuchaba.
"Deposite otro centavo para tener más minutos de llamada".
-Mamá ¿y tú celular?- preguntó el niño al escuchar la grabadora del teléfono público.
-Oye, no te reías. No perdí mi cargador, se fue corriendo- dijo en modo de broma- a veces aborrezco la tecnología.
Shouma rió entre dientes- te extraño, mamá.
-Yo también. A ti y a tu padre. Dime: ¿tuviste la oportunidad de verlo?
-No. El tío Mokuba dice que estará con Kaiba en el espacio una par de meses más, ya que el juego necesita más pruebas para llevarlo a la venta.
-Entiendo. Pero cuéntame ¿cómo te fue tu primer día? ¿Has hecho amigos?
Shouma torció la boca, temía que tocara es tema.
-¿Son buenos contigo?
-Bueno...han sido muy amables.
Eso no lo convenció.
-Oh,oh...¿pasó algo?
-Eso...eso no importa.
-Claro que importa- insistió.
-Tengo mucha tarea- dijo tratando de cambiar el tema, o de lo contrario, terminar con eso- hablamos luego.
-Te quiero mucho, hijo.
-Yo también- colgó.
Al fin pudo respirar tranquilo, su madre se preocupa mucho por él, no es para menos, Aichi le preocupa que Shouma sufra lo mismo qué él, y por eso le encargó a Nicole y a Haru que lo mantuvieran vigilado. Por ahora Shouma se ha mostrado tranquilo, ocultando su inconformidad. Kaiba insistía que tenía que estudiar en la secundaria Domino, ya que es una escuela muy prestigiosa. Le importa un comino que sea buena o mala, el ambiente de ahí no le gusta para nada, hasta parece que su ánimo ha cambiado drásticamente.
No es cómo lo imaginaba.
Cuando regresó de la escuela, un guardia de la empresa donde trabaja Haru lo recogió y lo llevó al lugar dónde trabaja él. Eso lo animó un poco después de un largo día de trabajo, y no faltaba la típica pregunta de cómo le fue. Cosa que tuvo que fingir una sonrisa y mentir que todo fue a pedir de boca, y se fue a jugar con dos pequeñas criaturas muy peculiares, una era de color blanca y otra morada que brincaron hacia él cómo saludo. Siempre fue así, Haru tenía que estar al tanto mientras sus compañeros lo entretenían.
Más tarde, cenaron juntos, pues Nicole le tocaba la cena y llegaba dos horas después, así que compró para la cena en la ciudad donde trabaja. Y esa fue la rutina de sus vidas.
-¿Eh? ¿Tu maestro es Shun Kurosaki?- preguntó la castaña mayor sorprendida.
-Sí- asintió Shouma.
-No esperaba que fuera a trabajar como maestro.
-Es algo serio.
-No lo culpo- agregó Haru.
-¿Eh?
-No es nada.
Shouma siempre ha tenido la sensación de que algo ocultan sus tíos, pero cada que les pregunta, siempre desvían el tema a propósito. Se pregunta, si algún día le dirán lo que quiere saber.
Ya estando en su habitación, termina de acomodar sus libros en la mochila y por un descuido, tira su deck al suelo, las cartas se dispersan por sus pies.
ESTÁS LEYENDO
La maldición del dragón (Temática Yaoi (chicoxchico))
FanfictionPortada hecha por: AlisonOropeza20 (Te lo agradezco mucho, de verdad me encantó ;) ) Una voz susurra en sus sueños, recuerdos que fueron olvidados contra su voluntad, un lazo que aún está latente, una vez más, la historia se vuelve a repetir, y el d...