Sin reglas ni principios 2

31. Sinners ~ Parte 2.

Le escuché llamarme nuevamente y aprovechando el retraso que el agua causaba en su velocidad, finalmente llegué a la puerta más cercana, abriéndola de golpe y entrando rápidamente en búsqueda de la salida. 

La oleada de calor golpeo mi rostro tan pronto como me adentré lo suficiente y aunque se trataba de una temperatura apenas por encima de la nuestra, la humedad se adhirió a mi piel acompañada de la esencia floral que había percibido al llegar a la piscina. 

—Mierda— murmuré, dándome la vuelta dispuesta a salir de lo que había resultado una habitación de quizá unos cuatro metros cuadrados, con algunos niveles en los laterales para sentarse y tenues luces azuladas que se fundían en el vapor de agua. 

Antes de que pudiera si quiera dar mi primer paso hacia la puerta, Ryan la abrió de golpe, entrando y obstruyendome el paso. 

— No te irás de aquí hasta que escuches lo que tengo que decir —me advirtió, cerrando tras de si y asegurándose de colocar el seguro.

— Tu y yo no tenemos nada de qué hablar. No ahora — afirmé, apenas logrando decir palabra luego de que un nudo se formara en mi garganta — Yo tengo las cosas bastante claras, creo que eres tu quien debe aclarar las cosas consigo. 

— ¡Maldita sea, deja de hablar y escúchame!— gruñó, estrellando su mano contra la pared junto a él y provocando que un par de gotas condensadas cayeran al suelo. 

Me encogí ligeramente ante su grito, observando la manera en que en aquel momento, su expresión era casi desesperada. 

— Yo también tengo miedo— comenzó, su mirada directa sobre mi, atravesándome con cada segundo que pasaba — tu no eres la única que está asustada en este momento. Me siento aterrado de lo que siento cuando estoy contigo, me siento aterrado porque me consume y no tengo nada para sustentarlo, no puedo explicarlo porque en mi cabeza solo llevas unas semanas, pero lo que siento parece llevar una eternidad de haber empezado. 

»Es verdad que tengo miedo y he estado conteniendo mis recuerdos porque no se cómo contener mis sentimientos. No sé como contener la respuesta de mi cuerpo a tu tacto o de mi cabeza al escuchar tu voz. No sé como vaya a reaccionar si de repente lo recuerdo todo, porque si aun ahora me siento morir cuando no te tengo a mi lado, no quiero saber como fue no tenerte por dos años enteros. No se si pueda con el sentimiento si se acompaña de experiencias, de recuerdos, si se intensifica con todo lo que pasamos juntos— hizo una pausa soltando una risa irónica y dando un par de pasos en mi dirección — Soy un desastre. Maldita sea, ni siquiera puedo creer que esté diciendo esto —soltó al aire, su mirada en el techo por unos segundos antes de que en un solo impulso terminara frente a mi — Dices que perdiste todo lo que amabas, pero no fue así.

» No es así porque yo estoy aquí. Porque aun después del miedo que siento, aun después de lo terriblemente idiota que puedo ser al bloquear los pocos impulsos de mi memoria, estoy aquí, intentando hacerte entender que aunque creas que perdiste a todos quienes amabas, no has perdido a quienes te aman. Intentando hacerte entender que al final todos volvemos a los lugares que consideramos nuestro hogar, a los lugares a los que pertenecemos, y la vida parece aventarme una y otra vez hacia ti.

Se detuvo de nuevo, dando un paso y logrando que mi espalda chocara contra la pared de mármol, haciéndome notar que había estado retrocediendo conforme se acercaba.

Posicionó su mano a un costado de mi cabeza, inclinándose en mi dirección —: Estoy intentando hacerte entender que nadie va a reemplazarte, porque aun cuando no existías en mi memoria, jamás logré llenar el vacío que dejaste con tu partida — avanzó un paso más, apoyando su rodilla en la pared entre mis piernas y cerrando totalmente el espacio entre nosotros, a tal punto que mi cuerpo pudo sentir la presión de su entrepierna — Maldita sea, es verdad que he estado conteniendo los recuerdos— hizo una pausa, su respiración pesada chocando contra mi boca— pero eso no es nada en comparación a lo mucho que me estoy conteniendo ahora, Sin.