Capítulo 28 Derek.

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El camino en el que llevaba los ojos vendados duro más o menos una hora. Intenté localizarme mediante el olfato pero debían de llevar las ventanas cerradas ya que solo conseguí percibir el olor de sus cuerpos sudorosos y el de mi propia sangre.

Al llegar abrieron la puerta y recibí una patada en la espalda que me ayudó a bajar del coche y a caer de morros contra el suelo.

-Bienvenido a casa –Dijo uno de ellos (creo que el jefazo) tirando de mi hacia arriba por las esposas que mantenían mis manos unidas.

-Que bien –Dije sarcástico.

-Ahora te llevaremos a la suite presidencial donde permanecerás cómodamente.

-¿Te han dicho alguna vez que tienes la gracia justo en el lugar donde cago? –Pregunté aburrido de tanta estpidez.

-Eres un tipo muy borde.

Seguimos caminando hasta que escuché el sonido de una puerta abrirse. Me quitaron la venda de los ojos y me fije en el sitio por si podía reconocerlo. Solo era una casa oscura y fría. Ahora estábamos en el salón que únicamente tenía una televisión pequeña y unas sillas. Estos tipos no deben saber qué es un sofá. Había dos puertas y ellos me guiaron a una de ellas, la abrieron, solo tenía una cama y paredes repletas de humedad.

Me metieron de un empujón.

-¿Y Shelby? –Pregunté en cuanto cerraron la puerta en mis narices y me percaté de que estaba solo acompañado de “El jefazo”

-Se me olvidó comentártelo –Dijo sonriendo como un imbecil- Ella no está aquí.

Gruñí.

-Tranquilo. Vendrá ¡Claro que lo hará! –Exclamó- Tu eres el cebó. –Sacó el móvil y me lo puso frente a la cara, sacó una fotografía y salió de la habitación dejándome solo, frustrado y furioso.

Tiré todo lo que pude hasta que me deshice de las esposas pero eso no fue suficiente ya que aún me sentía a punto de explotar. Di una patada a la cama que estaba en el centro de la sala estampándola contra la pared.

¿Por qué había sido tan imbécil? Por ella.

Me quedé hundido en la miseria sentado en esa estúpida cama. Podría escapar. Estaba seguro, pero preferí quedarme porque sabía que la traerían y me negaba a dejarla sola con esa panda de animales.

Agradecimientos: giiselaa9, Amelia_Smeet, XxDaarkknessxX, Jani_caguaidesune

Grenade (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora