Capítulo 4

139 9 2
                                    

Los días transcurrían lentos y estresantes para nuestra querida protagonista de cabellos oscuros. No sólo era de molestar que todos los días saliendo de la escuela, debía estudiar para algo nuevo y para un profesor distinto, sino que, para colmo, al mundo no le bastaba con juntarla aquella vez con el rubio. Ahora prácticamente el mundo entero hablaba de Zac el Alba.

Literal, por cada pasillo que caminaba, había una que otra persona hablando del rubio a viva voz. Elogiando y cantando sus canciones como si nadie estuviera allí.

La pelioscuro no podía evitar irritarse ante esto. Antes de que se hubiese topado con él aquel día, nadie hablaba con respecto al cantante. Pero después de esto ahora era el único tema de conversación entre todo el alumnado de la preparatoria Hatsubo.

Ya no lo soportaba. Que si el concierto, que si su ropa, que su cabello... ¡Ya era molesto! Simplemente todo con respecto a él le molestaba.

_¡Ya callense!_ exclamó enojada llevando hacia atrás sus mechones rebeldes con ambas manos.

Las chicas con las que estaba almorzando pararon su conversación de repente, quedando confundidas y en completo silencio.

_¿Ah? ¿A qué vino eso, Mya chan?_ preguntó confusa Aisumi, que apenas empezaba a comer_. Estás muy tensa.

La muchacha reaccionó.

_¿Eh?... perdón. No quise gritar_ se disculpó ella. Había dicho eso inconscientemente.

_ Estás muy rara..._ habló esta vez, Haruka_. ¿Pasó algo de lo que no nos hemos enterado?

_No es nada. Debo estar exhausta por todo lo que he hecho esta semana.

La respuesta no convenció del todo a las chicas, pero decidieron creerle ya que no muchas veces la pelimorado hablaba de sus cosas.

_¿Y?...¿qué te parece?¿Vamos?

_¿A dónde? _preguntó confusa. Había estado pensando mucho, por lo que no oyó lo que la rubia había propuesto.

_ Al concierto de este sábado. Zac cantará una de sus nuevas canciones allí.

"¡¿Es en serio?!" Pensó ella.

_Sabes que no me gustan ese tipo de eventos, Haruka_ espetó seria_. Hay demasiadas personas gritando y empujandose tal como si fueran animales. No le veo el caso.

_Si. Ya lo sabemos, pero por lo menos piénsalo_ rogó la de cabellos rubios_. Nunca has ido a uno de ellos. Podría gustarte.

_Claro que no..._ volvió a responder de la misma forma_. Aparte, podrían dejar de hablar de eso. Ya el tema me harta_ dijo llevando un bocado de su almuerzo a su boca, dando a entender que ya no iba a seguir hablando sobre eso.

Ambas jóvenes miraron raro el comportamiento de Mya. Aunque bien siempre fuera de esperarse que se negara a ir a un lugar lleno de muchas personas. Era rara la forma en que reaccionaba al oir el nombre del chico.

_Par de tontas, se les llenará de insectos la comida_ comentó Mya cuando notó lo mucho que era observada por sus amigas.

                                            ***

La tarde había caído rápidamente, culminando las clases de educación física de aquel día miércoles. Estaba agotada de tanto correr alrededor de la cancha y de todos los ejercicios que les había hecho hacer el entrenador Otto. Casi que no sentía sus pies a pesar de que pisaba firmemente el suelo del parque.

_No puedo más_ suspiró acercándose a la primera banca que vio frente a sí.

La pelioscuro dejó su mochila a un lado y puso sus manos en sus rodillas para tomar energías. No recordaba la última vez que se había ejercitado tanto hasta el agotamiento.

Una Mirada ||Zac El Alba Y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora