Say Something {Jimin & Jungkook}

Capítulo 22: Fiesta

        La fiesta pareciá genial. Estaba lleno de chicos de último año. Gente popular y genial, con mucha plata y muy divertidos. La fiesta era en la mansión del número 16 y su hermana mayor había invitado mucha gente igual, asi que la casa explotaba de personas. La verdad no importaba porque era enorme. Mucha gente bailaba en el patio y otra disfrutaba de la música en el living y la cocina, tomando alcohol y riendo con sus amigos. Jimin se topó con varias parejas besandose apasionadamente.

        Al llegar al patio un fuerte olor a marihuana llegó a la nariz de Jimin. Miró hacia la pileta y muchos estaban en el agua, con ropa y todo. No parecía que hubiese muchas personas concientes, pero había. Pidió un trago de frutas con alcohol y lo tomó mientras caminaba por el lugar. Una chica se le acercó y lo invitó a bailar, pero antes de que Jimin dijera que no, ya lo estaba llevando a la pista. 

        Primero no supo como moverse, pero a medida que iba ganando confianza mostraba mas pasos de baile y antes de que se diera cuenta estaba bailando hip hop en el medio de un grupo de gente. Le encantaba la antención, no podía negarlo.

        Salió de la ronda para descansar con una mirada feliz y una sonrisa. Tomó un trago más antes de encontrarse con Eunjung.

        -¡Hola, Jimin! ¡Felicitaciones! -lo abrazó- ¿Estás tomando alcohol? No sabía que bebías, cuidate con cuanto tomas si nunca lo hiciste.
        -Gracias Eunjung, pero estaré bien.
        -Ya me tengo que ir, alguien me espera arriba.-

        Jimin levantó una ceja y ella le dedicó una risita estúpida, pero nada inocente. Jimin le sonrió.

        -Bien, usa protección.
        -No te preocupes, no la necesitaré.

        Se fué arriba antes de que Jimin le replicara que es necesario. No entendía a que se refería pero tampoco subiría a interrimpir y preguntarle. Siguió con su recorrido por el lugar, ya que no tenía mucho que hacer. Cada tanto alguien lo paraba, lo felicitaba por el partido o el baile, se quedaba hablando unos minutos y luego se iba.

        Vió a Suga. No parecía muy entretenido. Estaba hablando con algunas personas mientras tomaba un trago y al rato se fue.

        Después de unos tragos más se empezó a sentir mareado. Cada trago que tomaba era más fuerte y su estómago no estaba acostumbrado. Todo se veía borroso pero sin embargo el seguía de pie. No se enteró cuándo fue a la pista de baile, pero estaba bailando de nuevo con unas chicas que le hablaban, pero el no les prestaba mucha atención.

        Luego de eso despertó en su cama. No sabía ni cómo ni cuándo había llegado. Su cabeza explotaba del dolor por culpa de todo el alcohol que había tomado. Bajó las escaleras con cuidado y se encontró a su madre cruzada de brazos en la sala.

        -Alcohol. Jimin, alcohol. ¿Cómo se te ocurre hacer algo así? No eres mayor de edad, no puedes tomar aún y menos la cantidad que tomaste.
        -Ma, deja de gritar, me estalla la cabeza...
        -¡Lógicamente!

        Apretó los ojos. Sentía que cada palabra era un alfiler que se clavaba en su cráneo.

        -Sientate y toma café. 

        Jimin pasó toda la tarde escuchando los retos de su madre y tomando café hasta que se hartó de él. Al rededor de las 7 de la tarde, Eunjung fue de visita y subieron a su cuarto.

        -¿Te retó mucho? 
        -No tienes idea.
        -¿Vomitaste?
        -Si, un poco. ¿Cómo llegué aquí y cuándo?
        -Tienes una ángel guardiana que se llama Eunjung y te trajo hasta aquí cuando acabó la fiesta. Era muy gracioso verte borracho, no dejabas de decir incoherencias. Tengo un video. 
        -¿Me grabaste?
        -Yo no. Tus amigos. De hecho, hay un video de todos juntos cantando Hakuna Matata. Así que no te preocupes, no se reían de tí, sino contigo.

        Jimin sonrió era lindo reírse con alguien incluso si hacía el ridículo y no lo recordaba.

        -No hice nada malo, ¿no?
        -Nope. Tranquilo.
        -Oye y tu...
        -¿Yo qué?
        -Recuerdo lo que me dijiste de que no necesitarías...tu sabes.
        -¡Oh, eso! Creí que te había dicho cuando la gente creía que estabamos juntos. La verdad es que no me gustan los hombres.
        -¿Ah no?       
        -Uh uh.

        Jimin quedó bastante shockeado ante la confesión de su amiga, pero la aceptaba. De hecho, pensó que era un problema menos con Chloe.

       "¡CHLOE! ¡La cita!" Todo cayó a la cabeza de Jimin de golpe. Pero no la podía llamar. Estaba trabajando y luego cenaría con su hermano y eso es tiempo sagrado para ella. Apretó los ojos rezando para que todo sea simple el día siguiente y que no lo odie tanto.

        -Bien, ya me tengo que ir.
        -Gracias por traerme y por venir a visitarme.
        -Oh es un placer. Ya te veo hasta como un hermano menor.
        -Hey, ¿por qué menor?
        -¿Repetí un año? ¿Soy mayor que tu? Wow Jimin, hay muchas cosas que no sabes de mi. Otro día hablamos, ¿Si?

        Jimin asintió y ella se despidió de Jimin con un beso en la frente antes de irse caminando por la puerta. Jimin suspiró y pensó en todo lo que podría pasar al día siguiente. Ninguna posibilidad era linda.