LA VERDAD DE MI PASADO

capítulo 32

Una campaña de ocupación nunca es predecible, pueden variar muchos factores y alterar un plan hasta dejarlo en el olvido. Si el ejército enemigo ha hecho una inversión considerable en su armamento, sus tropas están organizadas y su población local está de acuerdo con sus gobernantes pueden formar una trilogía importante. A esto le añadimos un toque de motivación y el enemigo puede volverse muy peligroso. La tecnología del planeta era avanzada y sus inversiones la convirtieron en un arma valiosa, estaban listos para todo, para vencer o caer en el intento. Vegeta y sus compañeros comprendieron esta verdad apenas aterrizaron y vieron replegarse a las tropas, fingían una retirada cuando en realidad era un señuelo para invitarlos a acercarse. Napa había ido sin meditar directo contra sus enemigos para estrellarse contra un muro de armas, lo atacaron con todo lo que tenían obligándolo a retroceder, ahí fue asaltado por una bien organizada tropa de soldados que si bien no lo derrotaron, al acabarse sus municiones fueron inmediatamente reemplazados por otra tropa. Su objetivo era claro: agotar la energía del guerrero hasta que podrían acabar con él. Era un buen plan en teoría. Raditz hizo su aparición y las fuerzas sin municiones no fueron a ninguna parte, sufrieron su exterminio inmediato, ambos saiyajin podrían haber acabado con los demás soldados si estos no hubieran recibido el apoyo oportuno de naves de batalla que los cubrieron durante la retirada. Ambos soldados de Freezer dudaron en como continuar, el ataque directo resulto un completo fracaso, los pocos soldados muertos eran un insulto a sus habilidades. Por el rastreador se comunicaron con Vegeta que les tenía noticias de su avance efectivo en las líneas de defensa y en la aniquilación de un considerable número de civiles, además de la destrucción de un buen número de sus suministros. Con cierta vergüenza disimulada sus compañeros indicaron su situación y recibieron una reprimenda, luego sus órdenes cambiaron: debían cambiar el lugar de ataque y esperar a los escuadrones que sin duda iban a intentar socorrer a su población civil, pero solo cuando estos volvieran con sus heridos debían ser atacados y eliminados inmediatamente. Así más y más tropas saldrían de sus zonas seguras para intentar ayudar a los heridos perdiéndose personal militar y medico. Tanto Napa como Raditz sonrieron con maldad, ese plan era digno de su príncipe, esto iba a generar tal coraje en sus contrarios que iban a salir sin medir las consecuencias, saldrían como conejos directo a una trampa, podían ser soldados organizados pero su torpe sentimentalismo los iba a perder. Hasta podía generar una brecha en sus defensas que les permitiera destruir varias zonas seguras. Más animados por sus órdenes se retiraron a cumplirlas a la brevedad.

Hasta ahí el plan del príncipe marchó como debía, después se fue directamente a la basura, al llegar a la nave percibió la trampa de los explosivos a metros, su vasta experiencia le hizo ser cauto y pudo retirar cada cartucho sin activarlo. Pero luego estaba la desaparición de la mujer, sin éxito la busco perjudicando a su misión, el rastreador solo le indicaba donde había un asentamiento con un gran número de personas y tuvo que ir por un lugar tras otro hasta dar con ella. Y como había pensado les devolvió cada explosivo para hacerlo estallar en sus caras. Pero una vez más fue atacado de manera organizada y limpia y el hecho de tener que cuidar de la esclava solo dificultó sus acciones. Una vez que pudo descansar y dejar a la hembra en un sitio seguro meditó sobre la situación, su avance en un inicio ordenado se convirtió en una cadena de destrucción tan caótica que debió alertar a sectores enteros de su localización actual, cosa que nunca debió haber ocurrido, ahora iban a intentar acorralarlos atacándolos y replegándose sin temor a dañar a sus habitantes por estar estos ya muertos. Este despliegue tan deficiente tenía un solo culpable, el príncipe en persona y ahora debía lidiar con las consecuencias, el control del planeta se había previsto en tres días, pero a este paso ese plazo bien podía duplicarse. Debía formular un nuevo plan con sus compañeros y ellos andaban por ahí destruyendo sin planificar nada. Decidió dejarlos proceder según sus voluntades, al fin y al cabo tal vez lograran avanzar algo, tal y como iban las cosas la situación no podía empeorar, su reporte sería entregado con retraso y tendría que estar a merced de la lagartija de Freezer y sus horribles lugartenientes.