#Yomequedoencasa
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★*★Unos suaves labios rozaban la piel de mi cuello estremeciéndome por completo ante el deseo, su mano acariciaba la silueta de mi cintura acelerando mi respiración, me voltee lentamente buscando su rostro y envolví mis brazos alrededor de su cuello para acercarlo más a mi cuerpo, aceptando que siguiera tocándome, el cabello de Evans era suave entre mis dedos, su piel era cálida contra la mía. Mis manos descendieron por sus hombros y acariciaron una extraña superficie que parecía adherida a la piel de su espalda, me eché hacia atrás cuando él comenzó a cernirse sobre mí, y de repente unas enormes alas negras se extendieron desde su espalda...
Eres perfecta Eclipse.
Abrí los ojos sintiendo mi corazón acelerado, me senté en la cama y pasé una mano por mi frente, tenía una ligera capa de sudor, miré a mí alrededor, estaba sola en mi habitación. ¿Qué mierdas pasaba conmigo? ¿En serio había tenido un sueño húmedo con Evans? ¿Y qué rayos con las alas? Esto era el colmo, mi propia mente me traicionaba.
Tú eres perfecta Eclipse.
Joder, apenas tenía 14 años y ya andaba de calenturienta.
Sentía mi garganta reseca, tenía demasiada sed y estaba extrañamente molesta probablemente porque me desperté en la mejor parte del sueño. Solté un suspiro y bajé las escaleras media adormilada por algo de agua. Todas las luces estaban apagadas, quería decir que ya Hura se había acostado a dormir, cuando miré la hora en el microondas me di cuenta que eran las 10 pm, mi madre no llegaba hasta las once.
Tomé un poco de agua y miré a través de la ventana de la cocina la camioneta negra que suponía era de Evans todavía estacionada afuera de la casa, ¿acaso se había quedado a dormir? ¿Seguía en la casa?
— ¿No puedes dormir?
Esa voz me sobresaltó y el vaso de vidrio cayó de mis manos rompiéndose en miles de pedazos contra el suelo, cerré los ojos y aspiré profundo, sobraba decir que yo era un desastre.
—Mierda —susurré volteándome, observé a Evans apoyado descuidadamente de la encimera, mis ojos bajaron a su torso desnudo donde mantenía sus musculosos brazos cruzados sobre su pecho.
¡¿Por qué coños no tenía camisa?! ¡¿Quería darme un infarto?!
Sentí acalorarme y mis mejillas cosquillear, lo que usualmente me ocurría cuando me sonrojaba, reaccioné obligándome a quitar la mirada de su escultural cuerpo de dios griego y me agaché rápidamente a comenzar a recoger los pedazos de vidrio, mi madre iba a matarme por romper sus costosos vasos de estampado de animales.
—No, no pude dormir —murmuré sin atreverme a mirarlo sintiéndome de repente nerviosa—. No sabía que ibas a quedarte a dormir aquí...
Relájate, Eclipse, joder.
—Hura me estaba ayudando a sacar unas cuentas del bar y terminamos muy tarde, no veo muy bien de noche, así que preferí quedarme.
¿Uh? ¿Tanta confianza tenía con mi hermano? Si hubiera sabido que se iba a quedar me hubiera puesto un pijama decente y no solo el enorme camisón de Peppa que tenía puesto en este momento.
Boté los trozos de vidrio en la papelera y un pedazo se me incrustó en mi pulgar, ahogué un gemido y lo saqué rápidamente observando una gota de sangre comenzar a escurrirse de mi piel.
—Cálmate, ¿te pongo nerviosa? —dijo Evans comenzando a caminar hacia mí, yo intenté actuar normal pero sentía que mi corazón estaba frenético y mis movimientos se volvían aún más torpes.
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Deseo... que seas mío. (Libro 1 Y 2) [Completo]
Teen Fiction(Libro 1 y 2 completos) El problema era Evans Damon, él iba en el último año del instituto, era jugador de futbol, y mi crush imposible, él no sabía de mi existencia hasta que le eché la comida encima frente a todos en el comedor. Pensé que me odiar...