Entre tú y yo, ella.

Embarazo

Steve dejó caer los cubiertos sobre el plato haciendo un sonido estridente. Su mirada y la de Sharon se mantenían fijas. El silencio inundaba el lugar.
- Creo que será mejor que charlen en otra parte- comentó Wanda al ver que nadie se movía y a la vez viendo como Sam la juzgaba por ese comentario con sus ojos pues ya no se enteraría del chisme.
Los ojos de Nat picaban, era evidente para los que sabían que intentaba no llorar.
Steve se levantó inmediatamente después del comentario de Wanda, tomó a Sharon por el brazo y la sacó del lugar.
Nat trató de fingir tranquilidad- bueno no sean metiches- dijo como si bromeara la rusa.

- No sabía que el Cap y la agente trece tuvieran  algo- le comentó Bruce a Nat.
- Te dije que te habías perdido de mucho.- dijo como si no le importara lo que acababa de suceder.
Los ojos de la bruja escarlata al igual que los de Tony, Clint y Bucky vagaban de vez en cuando hacía la peliroja que seguía fingiendo tranquilidad.
La cena terminó, todo se dispersaron a dónde mejor le pareciera.
- Pobre Nat- dijo Wanda a Bucky mientras éste la acompañaba a su piso.
- Sí, Wanda hay algo que debo contarte pero debes prometer que no le dirás a nadie no importa la circunstancia no debes  hablar. ¿Está bien?
- Claro, te lo juro. ¿De que se trata?
- Pues...

- ¿De que estás hablando, como que estás embarazada?
- Me refiero exactamente a eso, estoy embarazada Rogers.
Ella le entregó un sobre dónde se encontraban los análisis de sangre que lo confirmaban.
- ¿Pero...
- Mira , solo quería contartelo, no espero nada de tí, ni siquiera que te hagas  cargo. Sé que no querías esto.
- No, espera yo no...
- Mira yo solo quería que lo supieras ¿Bien? Ahora me voy a mi piso tengo muchas cosas en que pensar.
Sharon se marchó dejando al capitán estupefacto.
Steve se tomó un tiempo para analizar lo que estaba pasando y luego se marchó a su habitación.

Pasaron alrededor de dos horas y la puerta de la habitación del rubio fue tocada.
- Soy yo.
- Ahora no Tony.
- Vamos viejo, debes hablar con alguien.
Steve le abrió la puerta.
- ¡Felicidades papá!

Fue cuando Steve le cerró la puerta en la cara.
- No, no, es broma - dijo Tony abriendo la puerta.
- ¿Crees que esto causa gracia?
- No, perdón. Es que... Por Dios Steve, que mala suerte tienes.
- ¿Me lo dices o me lo preguntas?
¿Que voy a hacer ahora Tony?
- Pues... ¿Que quieres hacer?
Es decir, quieres al niño ¿No?
- porsupuesto pero...
- No quieres a la madre.
El rubio asintió con la cabeza.
- Pues solo diselo. Dile que te harás cargo del niño y ya.
- ¿Como si fuera tan fácil?
- En realidad si lo es.
-¿Y como crees que lo tomará?
- Lo que debe importarte es como la arañita va a tomar esto. Parecía bastante irritada aunque lo disimuló muy bien .
- ¿Crees que me perdone esto?
- No lo sé, sólo sé que Bruce va a estar ahí si tú no estás, piensa en ello.
- ¿Y crees que no lo hago?
Desde que Banner llegó tengo los nervios de punta. Todavía Nat...
-¿Qué?
- Ella todavía lo quiere.
- Steve Banner es parte del equipo, lo conoces, no mataría ni una mosca, digo... Cuando no es verde, claro está. Osea lo que digo es que hables con él como hombres. Pregúntale si sigue interesado en ella.
- Ah sí  ¿y que hago si se pone verde?
- Corre.
Steve bufó
- No , enserio debes hablar con él y sobre todo con ella pero espera hasta mañana ,hoy de seguro no es buena idea, no saldrías vivo.
- Tony...
Steve cerró la puerta para que nadie los escuchara.
- Sí dormí con Nat pero no fue cuando Banner nos vió si no después.
-¿Y?
- Que después de tenerla entre mis brazos descubrí que es la mujer perfecta, es con la que quiero estar toda mi vida, la amo Tony y estoy... Estoy asustado, no quiero perderla. Y ahora... Todo esto...
Sabes que ella no puede...
- ¿Entonces leíste su expediente?- pensé que eso iba encontra de tu ética.
- Y es una completa falta de ética pero tuve demasiada curiosidad, no pude evitarlo.
- Te entiendo, he leído el expediente de todos.
- Estoy seguro de ello y por eso estoy hablándolo contigo. Hoy tuve una conversación muy seria con Nat y ella piensa o más bien, En algún momento la hice sentir que no era digna de estar conmigo. Además de que estoy seguro que esto del embarazo de Sharon la afectará mucho, ya que ella no puede procrear y eso no es importante para mí ni  necesario pero creo que de alguna forma ella se sentirá...
- Sí pero no nos preocupemos por eso ahora, lo primordial es que vas a hacer con ese embarazo y que la araña te perdone.
Consúltalo con la almohada y por favor no dejes de hablar con ella.
¡Buenas noches!
Tony abandonó la habitación.