39- OBSTÁCULOS

391 40 3
                                    

-¿Qué quieres decir?-

Mis ojos seguro están abiertos como platos, la frase de Damon me ha dejado estática en el sitio, apenas puedo sostenerle la mirada porque estoy aterrada.. ¿Qué es lo que sabe? Me aterra pensar que sabe todo de principio a fin, porque es algo que quería dejar para mi.. No se lo contaría a nadie. Ni a él.

-De algún modo siempre me pregunté qué es de tus padres, aunque la verdad, no me importaba.. Pero al ir a casa de tus tíos y no ver una solo foto de tus padres.. me pareció raro, así que en la cocina saqué todo lo que pude a Marie, hasta que llegaste tú. Sé que los cabrones de tus padres te abandonaron, que te acogieron Marie y Richard porque eras una niña problemática y nadie quería adoptarte, que a día de hoy sigues sin saber quienes son tus padres y muchas cosas más que me ocultaste. No somos tan diferentes.- Sus ojos se tornan abatidos, y me pregunto por qué en todo este tiempo no me lo había mencionado, ¿Tal vez quería dejarlo estar y no abrir aún más la herida de mi pasado?

No lo sé, pero no quiero recordar, no quiero hablar de esto y mostrar una debilidad que me consume cada día, aunque no lo parezca... tengo miles de batallas y esta es una de ellas.

-¡No eres nadie para interrogar de esa forma a Marie!.. ¡Y menos para saber algo de lo que yo nunca te he hablado, si no lo hice era por algo!- Le señalo con el dedo acusador mientras me levanto desquiciada del sofá. No quiero hablar de esto, no, no, no.

-¿No soy nadie? Soy tu novio Rose, ¿Acaso no puedo preocuparme por ti?- Se levanta y me mira de nuevo, confundido por mi reacción.

-No Damon, no te equivoques.. Tu y yo no somos nada, dejamos de serlo hace bastante tiempo.- Suelto sin más, este rueda los ojos y siento como se tensa ante mis palabras, va a abrir la boca, pero no dejo que lo haga.

-No debes meterme donde no te llaman, si te oculte eso fue por algo y no tienes el derecho de indagar.- La pintura de los ojos me empiezan a picar. Estoy muy agobiada.

-¿Entonces hacer eso en que te diferencia de mi? Por ocultarte cosas he sido un mentiroso, entonces somos iguales.-Dice bastante serio.

-¡No somos iguales! ¡Tu eres un asesino, yo no!- Grito sin importarme las horas que sean, tengo ganas de gritar, tirar cosas y todo lo que se me viene a la cabeza.

-Si, lo soy, pero yo en eso no te mentí, siempre lo he sido y tu siempre lo has sabido... En cambio, ¿Tú me dices que no tengo derecho a indagar sobre ti, y tú lo haces conmigo todo el tiempo? Tú sabes más de mí que yo de ti, esa es la única verdad.- Sus palabras se han clavado en mi pecho.

Es cierto, joder. Pero no, no quiero que sepa eso, no quiero que sepa nada de mi pasado, no tengo palabras para contestarle porque no llevaría razón.

-¿Y la Galería de Washington?¿ Me oías hablar por horas de aquel maldito caso que llevaba en comisaria y tu aguantabas la compostura como si nada? Me siento una idiota al ver que tenia mi enemigo al lado.- Suelto dándole la vuelta a la tortilla.

-¿Enemigo? Yo no soy tu puto enemigo Rose, soy tu... Mira, no te dije nada porque no van a encontrar nada, lo oculté, al igual que tu. No hay más.-

Veo como rodea el sofá y se encamina hasta la cocina, abre el grifo y se refresca la nuca con la mano mojada. Está muy nervioso, es evidente que odia no tener el control de la situación y alterarse no es lo adecuado.

-Tu y yo no podemos estar juntos, tenemos vidas diferentes.. Y en este caso están enfrentadas, tu tienes las manos manchadas de sangre, y yo una placa que demuestra que soy lo contrario a aquello que haces.-Me llevo las manos al brazo apenada, estas palabras las he pensado mucho, pero no reaccionaba de la misma forma.. Decirlas en alto han cavado un agujero en mí.

BLACK ROSE🌹©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora