BLACK ROSE🌹©

55- LÍVIDO

12:00 de la mañana.

El agua recorre mi cuerpo desnudo mientras cierro los ojos dejándome llevar por mis pensamientos.

Me muerdo los labios mientras deslizo la mano por mi cuerpo hasta llegar al sitio exacto, imaginándome que es Damon quien me toca.

Veo sus ojos azules como el hielo volverse oscuros a medida que hunde sus dedos en mi, se relame los labios gustoso de ver mis reacciones. Aumenta la velocidad, y el calor recorre mi cuerpo, siento que me falta el aire con él.

-Damon..- Intento decir.

- Me encanta verte así... Corriéndote en mis dedos..-

Gimo y tapa mi boca con sus labios. Juro que me desvanezco en sus brazos mientras lo aprieto con fuerza. Se aleja de mi y me mira con ojos de hiena, preparado para dar caza a su presa.

Se quita el bóxer y viene de nuevo a mi encuentro, quitando la hebra rubia que tapa uno de mis pezones. Desnuda ante él debería sentirme indefensa, pero pasa al contrario, me siento deseada, idolatrada por el mismo dios al que yo venero día y noche.

Atrapa la zona rosada y la muerde haciendo que arqueé la espalda al instante.

-¡Joder!- Suelto desesperada.

-¿Qué quieres Rose?- Le encanta ese juego donde le inflo el ego.

-Te quiero a ti..- Digo entrecortada por mi respiración.

-¿Dónde?- Sigue.

-Dentro de mi, te quiero dentro de mi.-

Suelto un gritito cuando me invade con su tamaño.

Joder, esto es delicioso. Es la mejor sensación del mundo.

Lleva mis manos encima de mi cabeza y muerde mi cuello con fiereza, está hambriento, y yo estoy encantada de ser quien lo vuelva loco. Las estocadas cada vez son mas fuertes, mis pechos suben y bajan con el frenesí de sus movimientos. El aire es más denso y yo no paro de correrme en su majestuosidad.

-¡No pares!- Gimo de nuevo.

Sale de mi de forma violenta y me gira, quedando a cuatro patas con unas de las vistas que mas le enloquecen y vuelve a hundirse en mi sin reparos mientras agarra con fuerza mi cintura.

Que rico..

Lo aparto de un empujón y lo agarro con fuerza estrellándolo contra la cama. Ahora soy yo la que lo monta, subo y bajo sumergida en el éxtasis que nos envuelve, cuando se trata de nosotros no existe cordura ni tenemos piedad con el otro. Nos devoramos, y si eso significa morir, moriremos entre el fuego que nos rodea.

Me fijo en como aprieta sus manos en mis muslos dejando marcas en el tacto, en su abdomen tan bien trabajado y en como el pelo mojado descansa en su frente.

El orgasmo llega de nuevo, haciendo que suelte todo lo que tenía en mi interior.

Abro los ojos, el agua me sigue empapando y es ahora cuando me doy cuenta que está saliendo fría. Mis mejillas arden y la imágenes vuelven una y otra vez. Saco los dedos de mi interior, estoy empapada de mis jugos.

Lo necesito conmigo..

Abrocho las botas y me fijo una última vez en el espejo frente mi cama, cerciorándome de que tengo la coleta en perfecto estado. Vestida con un pantalón negro militar y unos tirantes negros me encamino a la zona de entrenamiento.

A lo lejos puedo ver a Jughead exprimir a mis compañeros como limones, ya estoy temiendo la tormenta que me va a caer encima. Miro mi reloj digital, son las una y las pruebas empezaban a las siete de la mañana.