BLACK ROSE🌹©

21- ÉXTASIS

Poso mis dedos por la tinta que cubre el cuerpo desnudo de Damon, es como si fuera un diario, cada dibujo muestra una parte de él, pero solo él sabe lo que significa.

Damon no me quita la vista de encima cuando toco la calavera de su abdomen curiosa. El azul de sus ojos me penetran de una forma increíble, es la primera vez que veo paz tras ellos.

No puedo evitar estar nerviosa, cada palabra y cada gesto que me regala hace que pierda el sentido, estoy tan bien por primera vez conmigo misma que no creo que sea verdad. Antes de él he tenido pareja, salía con mis amigas, los estudios.. Pero nada me hacía sentir como Damon lo hace. Tal vez la oscuridad que hay en él se ha fundido con la mía.

La pasión y la lujuria que nos rodea está creando un sentimiento mayor y por primera vez, creo que estoy hablando del amor.

¿Quiero a Damon? Me da miedo aceptarlo, pero creo que eso es lo que se remueve en mi interior cada vez que lo veo frente a mis ojos.

Estoy dispuesta a todo con él.

No puedo evitar admirar cada detalle de él y la forma en que un mechón mojado cae en su frente, desde su perfecta cara a su cuerpo, que me deja sin palabras. Parece un dios.

Me acerco a Damon y llevo mi lengua a la suya, este me coge de la nuca y me pega más de lo que estoy a él. Noto la dureza de su miembro junto a mi muslo y no puedo evitar soltar un gemido. Deseo esto tanto como él, pero soy nueva en esto y no puedo evitar sentir nervios.

Su respiración se agita, las mejillas me arden como si fuesen brasas, estoy pérdida en él.

-Joder, Rose.- habla para unirse de nuevo a mí.

Me encanta la forma en que maldice, se que se contiene conmigo y que le cuesta, sinceramente, me hace sentir muy bien saber que yo soy capaz de crear eso en él. Damon ha hecho que esté más segura de mí misma, jamás olvidaré el día en que me desnudé por primera vez delante de él, en mi habitación. Se dio cuenta de que era virgen y trató de no hacerme sentir mal. Cuando me miré en el espejo con él detrás mía me sentí la mujer mas segura del mundo, y todo gracias a él.

Sin darme cuenta, Damon me tiende la mano y salimos del jacuzzi. Me enreda en una toalla y el hace lo mismo. Me voy a volver loca si sigo mirándolo de la manera que lo hago.

Damon apaga las luces de la habitación, dejando encendidas unas velas que quedan bastante bien en la oscuridad de la estancia, luego de esto se acerca a mí y se deshace de mi toalla. De nuevo desnuda ante él.

Me coge a pulso y enreda mis piernas en sus caderas mientras nos encaminamos hacía la enorme cama.

Me posa en ella y tira de las sabanas para taparnos, Damon se pone sobre mí y muerde mi cuello desnudo, haciendo que arquee la espalda.

Baja por mi cuerpo besándolo lentamente hasta que llega a mi clítoris, no duda ni un segundo en hundir su lengua en mi intimidad mientras con una mano masajea mis pechos. Juro que voy a morir con su lengua, no puedo evitar gemir su nombre cuando mete dos dedos en mi interior.

Estoy en un éxtasis infinito, el placer que me causa es indescriptible, siento que ya mismo voy a deshacerme bajo sus movimientos.

Y así hago, esta vez gimo más alto y noto como Damon gruñe cuando lo hago, está peor que yo, lo sé.

-Córrete para mí Rose..- Su voz áspera hace que mi cuerpo se estremezca.

Saca sus dedos y se los lleva a la boca relamiéndolos.

Dios, va a volverme loca..

Vuelve de nuevo a arriba, pero lo giro colocándolo debajo casi a la velocidad de la luz, la mirada malévola que me dedica hace que tenga más ganas aún de lo que voy a hacer.