4. Danger

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- No lo estaba espiando -Temari salió a la vista de su profesor con las piernas como gelatinas, se irguió y caminó hacia él con la cabeza en alto, cada paso que daba era más vacilante y nervioso que el otro, nunca habia sentido algo igual, una mezcla de magnetismo y repulsión, de curiosidad por saber qué escondía tras esos ojos inexpresivos y de miedo, quería acercarse y a la vez correr lejos de él, era toda una mezcla de sentimientos contradictorios.

- Estaba buscando algún libro para mi entretenimiento, señor Nara, no era mi intención encontrarlo aquí -Los ojos de la rubia eran fríos y escrutadores, quería saber qué era lo extraño de él, tenía algo que lo hacía diferente a los demás.

- Bien, pues la dejo, ya encontré lo que buscaba -Shikamaru observó su muñeca y sonrió, estaba seguro de que era ella, encontrar a su víctima fue fácil, bueno, ella la encontró a él.

Él salió dejándola confundida, no sabía cómo juzgarlo, tal vez estaba siendo paranoica y no ocurría nada malo con él, pero no podía evitar sentir algo extraño en su aura, en la forma en la que sus ojos brillaban de una manera maliciosa pero a la vez reconfortante. Era la primera vez que no sabía como juzgar a alguien después de la primera presentación, ella era muy perceptiva y siempre hacia lo correcto a la hora de saber de qué lado iba la persona.

Tomó un libro de mitología persa, maya y egipcia, tal vez la mantendría ocupada.

...

Tenten inhaló el aire fresco del campus, la lluvia había cesado y dejado un maravilloso arcoiris con olor a hierba mojada, no le gustaba mucho el aire libre, pero cualquier cosa era mejor que estar atrapada en el maldito bullicio de la cafetería.

Lo que quería ahora era fumarse algo. Caminó por el sendero de piedras que rodeaban el colegio, probablemente ya todos habían entrado a sus clases, pero le daba igual, no estaba de humor, tenía demasiado sueño. Caminó hasta el final del sendero, hasta la parte trasera del colegio, estaba cubierto de árboles altos y varios escondites, era el lugar indicado para las parejas que querían pasar un buen rato, los rebeldes o simplemente para los que querían estar tranquilos; su nariz se arrugó al sentir el olor a tabaco ¿Enserio? Y ella que se moría por una calada, y lo sabía, no era muy buena esa costumbre pero estaba dispuesta a descubrir quién tenía los cigarros y pedirle uno, necesitaba algo de relajación. Y si lo preguntaban ¿Cómo alguien como ella podía fumar? Pues cuando entras en crisis emocional cerca de los años 80' y tus amigos no son muy recomendables es muy fácil.

Dirigió sus ojos hasta un rincón lleno de arbustos, justo tras las paredes de la institución, caminó hasta allí y se detuvo para observar al chico con el cigarro en sus manos, llevaba unos jeans rasgados y una sudadera gris que cubría su cabeza, esta dejaba salir algunas hebras de cabello largo, era de color marrón, el chico tenía unos ojos grises muy parecidos a los de Hinata, miraba el suelo con interés y el cigarro en sus manos, tenía manos grandes y barbilla cuadrada, nariz pequeña y labios en forma de corazón, era un chico apuesto. Demasiado.

- Está prohibido fumar ¿Lo sabes, no? -habló ella adentrándose al pequeño rincón, el chico levantó la cabeza y la miró con el ceño levemente fruncido, bufó por lo bajo, no tenía ganas de soportar a una metiche.

- ¿Parece que me importa? -preguntó, Tenten sonrió, ese chico no era igual a los gallinas de sus compañeros, él rompía las reglas. Y a ella le encantaba hacer eso.

- Por lo menos dame una calada, me muero por uno de esos -Y le robó el cigarro, sus manos tuvieron un pequeño roce, pero la morena pudo sentir el temblor en su cuerpo combinado con una extraña corriente, frunció el ceño pero llevó el objeto a sus labios y le dio una larga calada.

- Hmp -Él había sentido lo mismo ¿Pero quién era ella? Solo una estúpida niña mortal, no entendía qué pudo haber ocasionado tal sacudida en su cuerpo.

Red Moon //Sasusaku, Naruhina, Saiino, Nejiten, Shikatema//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora