Red Moon //Sasusaku, Naruhina, Saiino, Nejiten, Shikatema//

7. Dates and something more

- ¿Quieres que estudiemos ahora? -Sakura no estaba muy convencida, para empezar no se creía ese cuento de que la maestra le había dado ejercicios para que se pusiera al corriente, Sasuke era uno de los mejores alumnos de la clase y asumía que todas las respuestas correctas ya lo habían puesto más que al corriente.

- Si es que no estas ocupada -Su voz se oía tan gélida como siempre, con algo de molestia también, pero él necesitaba la ayuda de ella, no ella la de él. Aunque, si lo pensaba, era una buena excusa para salir de la casa y en ese momento estaba más que aburrida.

- Bien, te veo en una hora en el café cerca de la escuela, lleva tus libros -Y colgó, lo mejor sería ser directa con alguien como él. Sasuke le parecía cada vez más extraño e intrigante, aveces le sonreía, otras la miraba totalmente indiferente y hasta aveces con curiosidad. Era un hombre muy extraño.

Se incorporó con pereza y tomó un baño, lo mejor seria ir presentable a su cit... reunión de estudios. Se sacó toda la ropa, preparó la tina y se dejó masajear por el agua caliente, hacía que todos sus músculos se relajaran y se preparaba mentalmente para lo que vendría. Una lucha de ingenio y un poco de coqueteo, siempre era así, aunque ella ya le había dejado en claro que no era para nada fácil; y había algo en el Uchiha que le ponía los pelos de punta.

Salió rodeada por una toalla color rosa y escogió sin mucho cuidado su atuendo. Un vestido negro de mangas acampanadas y sandalias bajas. Listo. Secó su cabello y no se puso una gota de maquillaje. No era esa clase se chicas, aunque no había olvidado el perfume con olor a jazmines.

Tomó su bolso y se despidió de las chicas.

- ¿A dónde crees que vas, jovencita? -Sakura la miró rodando los ojos- Lo que ha pasado con Ino ha sido muy delicado, no puedes ir por ahí con toda libertad.

- Tengo que ayudar a un compañero, no puedo dejarlo plantado porque estas paranoica -Tsunade apretó los labios disgustada.

- Sakura, es peligroso, además...

- Nos vemos -Y salio dejándola con la palabra en la boca.

- Hmp -Gruñó- Está niña terminará matándome en algún momento.

(...)

- Sasuke, no puedes irte en este momento -El azabache sonrió de forma sarcástica, como si él fuera a hacer lo que Madara le ordenara.

- ¿Te parece que me importa lo que pienses? -Lo retó- Yo no soy otro de tus peones, Madara. Tal vez tengas mucho poder allá abajo pero aquí no eres más que una mosca en un estanque, podemos acabar contigo sin usar todo nuestro potencial.

El Uchiha mayor gruñó y tomó a Sasuke de la camiseta e hizo que lo viera, Sasuke ni siquiera se inmutó a el movimiento.

- Escucha, niño -Escupió- No puedes salir en el estado en el que te encuentras, ¿Crees que no estoy enterado de que tu última comida fue hace un mes? Podrías lanzarte sobre ella y acabarías con todo en un segundo. Ella te vencerá, Sasuke, estás tan débil en este momento, necesitas alimentarte.

Sasuke mantuvo su rostro relajado, tomó a Madara de la camisa y lo arrojó contra el espejo de la sala, los cristales rotos le devolvieron la mirada, una amarilla y fría, con las escamas marrones y las garras negras que se alargaban en sus dedos. Sonrió. Solo un espejo como aquel, lleno de magia, podía reflejar como era realmente. Frente al resto sería sólo ese repugnante mortal.

Volvió a arreglar su camiseta y tomó la chaqueta antes de salir al cálido exterior.

(...)

- Así que en realidad somos doce, no cinco como siempre creí -Dijo Temari para sí misma- Bueno, era obvio, no podían ser solo cinco signos. Me pregunto en donde estarán las demás.