𝐋𝐮𝐫𝐤 ━ Tommy Lee

42. Baby Mine.

Capítulo 42.

"My love, my life"

—¡Te estuve esperando! —le habló Dionne emocionada a la pelinegra—. Pasa, chica.

Aubrey entró con su bolso y esperó a que Dionne cerrara la puerta.

—Debo admitir que me pareció extraño que hayas querido venir así de la nada —le confesó la morena—. Sin embargo, estoy feliz de tenerte aquí en mi casa.

—Gracias —sonrió Aubrey—. Perdona si fue algo desprevenido, en casa sucedió algo un tanto extraño y pues, mi papá tenía que arreglar unos asuntos.

—No te preocupes, eres bienvenida cuando sea —le sonrió a la muchacha.

Dionne la guió a su habitación para que pudiera instalarse en ella. Aubrey dormiría en un colchón que Dionne le había prestado, al igual que unas mantas y unas almohadas. Era un tanto tarde, ya que la chica había llegado antes de las nueve de la noche. Ambas veían una película mientras comían helado.

La pelinegra a pesar de estar viendo la pantalla del televisor, estaba pensativa. No dejaba de preguntarse qué habría pasado y por qué los demás estaban metidos en problemas. Últimamente todo estaba muy bien en la casa, Mick solía estar todo el tiempo con Emi, Vince pasaba con Sharise, Nikki pasaba escribiendo canciones y Tommy pasaba metido con ella en el cuarto, ya sea; hablando o mirando algún programa de televisión.
Aubrey a la vez tenía otra cosa en mente, había algo que la estaba preocupando muchísimo desde hace un par de días y no había podido hablarlo con nadie.

En cuanto las muchachas terminaron de ver la película, Dionne fue al baño a lavar sus dientes y a hacer sus necesidades, en cuanto regresó encontró a Aubrey un poco nerviosa.

—¿Qué tienes? —Dionne se sentó en su cama.

—Estoy preocupada, Dionne —susurró muy por lo bajo—. N-no sé qué hacer.

—¿Qué pasa, amiga? —preguntó Dionne en un tono de voz suave tratando de demostrarle que podía contar con ella.

—Me da un poco de pena —le dijo sin dejar de jugar con los dedos de sus manos.

—No deberías de tenerla —dijo pasando la mano por la espalda de su amiga.

—Dionne —susurró—. No me ha bajado, no sé si estaré atrasada o si se trata de algo más —la pelinegra bajó la cabeza. Dionne la miró sorprendida—. Además tengo dolores abdominales, pensé que se trataba de los dolores menstruales, pero no creo que sea eso. Siento tensión en el pecho, créeme sé que no se trata de ansiedad.

—Oh vaya, no creí que fueras a decir eso.

—Tuve que comprar una prueba y la traje conmigo —susurró nerviosa—. Pero...

—¿No sabes cómo se hace? —cuestionó. La pelinegra asintió—. ¿Quieres hacerlo ya?

—Sí —le dijo su amiga por lo bajo.

Dionne la tomó de la mano y la ayudó a levantarse del colchón.
Aubrey tomó el dispositivo que estaba adentro de su bolso para después encerrarse con Dionne en el baño.

—Pásamelo —le pidió Dionne a lo que ella seguidamente hizo—. ¿Ves esta tira? —le mostró una pequeña tirita blanca que tenía la prueba de embarazo. Ella asintió—. Esta tira es la que tiene que recibir un poco de orina para saber si estás embarazada. Lo que debes hacer es, orinar y dejar que a la tira del dispositivo le caiga un poco de orina, lo dejas encima de la tapa del inodoro cuando termines y esperamos unos cinco minutos, se supone que tiene que cambiar de color y luego saldrán dos rayitas que son las líneas de control y te indicarán si estás o no embarazada.