37

19 3 0
                                    



                                                                                            𝙻𝚊𝚞𝚛𝚊

Tres días con sus respectivas noches llevamos ya y por lo que he escuchado aún nos quedan dos días para llegar. Estoy agotada, pero no se como tengo fuerzas en las piernas para continuar me rasco la frente mientras intento mantener la mente ocupada.

No puedo dar un paso más, me paro y busco un sitio cómodo para poder sentarme.

AILA: ¿Qué haces ahí parada?.

-Descansar, mis piernas no pueden dar ni un paso más.

AILA: Todos estamos igual pero hay que seguir.

-Seguir vosotros.

AILA: Levanta.

Niego y entonces él tío gordo se sienta también a mi lado, parece que no soy la única que está cansada; mi amiga pone los ojos en blanco y le saco la lengua divertida.

-De acuerdo, pero mañana nada más salga el sol seguiremos.

Todavía no la he perdonado del todo, de mi cabello me quito el diente de león, que tanto me recuerda a mi querido...DIGO Ubbe.


                                                                    *

Por tercera vez caigo de culo al barro con mi espada en la mano izquierda, miro molesta a mi oponente que sigue riéndose de mi. Miro mi espada y me aferro fuerte a ella me vuelvo a levantar del barro sin ninguna ayuda; no me importa que me haya manchado ya que luego me limpió y listo.

-Venga ataca.

ubbe: Quieres que siga pateando tú culo.

Te voy a mostrar quien patea el culo a quien, aprovecho que le ha dado ese ataque de risa y voy moviéndome buscando su punto más débil para atacarle. Lo encontré justo en sus rodillas, miro la espada pero se da cuenta y chocamos las espadas, vamos bailando con nuestras espadas esperando el momento adecuado.

Veo su espada muy cerca de mi cara y me agacho esquivando el golpe, cada vez que intenta pincharme con su espada esquivo las estocadas.

-Eres muy lento.

Parece que eso le molesto ya que las estocadas iban más rápidas y me está constando esquivarle, me tropecé con una rama mal colocada en el suelo y caigo de espaldas haciendo que mi espada se me cayera.

Esta algo lejos le veo acercándose, voy a gatas hasta ella, pero justo cuando la iba a coger me patea el culo y se pone encima de mi. Veo que tira su espada, intento arañarle la cara con mis uñas pero me coge fuerte de las muñecas y no me puedo mover.

Entonces siento como algo cae por mi frente y por la cara que pone no debe de ser nada bueno, se levanta y me coge en brazos. Quería tocarme la frente pero él no me dejo, parece que me hizo un pequeño corte en la frente y ahora se me cae sangre.

ubbe: Ya llegamos.

Me dice para intentar calmarme, me lleva en brazos hasta donde vivo con madre, cuando nos ve corre hacia nosotros para saber lo que ha ocurrido. 


Él joven se encuentra a mi lado cogiéndome de la mano, no quiere separarse de mi ya que se siente muy culpable. Entonces la madre de Ubbe aparece junto con dos guardias, parece que las noticias vuelan, Ubbe sigue cogiéndome de la mano, mientras madre me cura la herida de la frente.

Amor vikingoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora