Amor vikingo

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                                                                                                 AILA

-¿Hvithserk?.

Un año y medio o casi dos sin ver aquella cara, ojos marrones, escuchar su voz. Tenerle tan cerca parece una ilusión, un sueño hecho realidad, no me creo que vuelva a estar en la misma habitción que él.

No lleva su larga melena recogida en aquel peinado donde se hace varias trenzas, ahora lo lleva suelto. Ninguno de los dos vimos como mi padre hace mutis, dejándonos solos.

Hvithserk: Por fin, podemos estar juntos.

-Amor.

Los dos seguimos mirándonos a los ojos, llevamos mucho tiempo separados y ahora que han cumplido con sus misiones correspondientes, ya no tienen ningún obstáculo, para que sigan estando separados.

Bjorm: Madre, ¿ qué haces?.

Lagertha:Estaba limpiando mis armas y la espada de Edmund.

Bjorm:Sabes que en tú estado no deberías hacer ese tipo de tareas.

Lagertha:Lo se, estaba aburrida.

Bjorm:Alguna vez, ¿piensas en Ivar?.

Lagertha:Todas las noches antes de irme a dormir.

Bjorm:Os he encontrado un escondite a los niños, Torvi y a ti.

Lagertha:No voy a huir.

Bjorm:¿ Cómo?.

Lagertha:Ivar me da miedo, aún embarazada puedo acabar con él.

Bjorm:¿Y también acabaras con su ejercito?.

Lagertha:Sí.

Bjorm:¿Y con Laura?. ¿Asesinaras a la hija de Edmund?.

                                                                                                   LAURA

Aila me dijo que nos veremos en el río, he llegado yo primero. Ubbe vendrá, mi amiga habrá conseguido convencerle, me siento en una piedra gigantesca. No se que decirle a pasado mucho tiempo, desde la última vez que nos vimos.

¿Qué le puedo decir después de tanto tiempo?.

Escucho algo que se está acercando, debe ser él, me incorporo y me pongo en modo defensivo. Al verle salir de entre unos arbustos, me quedo completamente paralizada.

-Hola.

Ubbe:Hola Laura.

Ha cambiado mucho, en sus ojos ya no veo esa inocencia. Ninguno abre la boca, sigo en el mismo sitio donde me habia colocado y entonces me doy cuenta de que está ocultando algo.

¿Qué tiene detrás de su espalda?.

Ocurre a cámara lenta, va sacando su mano derecha que tenía en la espalda y veo un pequeño ramo de flores.

-Son...

Ubbe-Dientes de león.

No me lo podía creer, me las entrega y al cogerlas veo que sea sonrojado.

-Gracias.

Miro el ramo que acaba de regalarme, son hermosas, no me lo esperaba lo más minímo.

Arturo-Madre, ¿has visto a Laura?.

Juncal-No, desde está mañana. ¿Porqué quieres verla?.

Arturo-Necesito hablar con ella, es urgente.

La mujer se levanta y se dirige a su hijo, se asegura de que la puerta está bien cerrada.

Arturo-¿Qué haces?.

Juncal-Tengo que pedirte un favor.

Arturo-¿De que se trata?.

Juncal-Quiero que te alejes de esa chica.

Ubbe-Aila me a dicho que quieres hablar conmigo.

-Así es.

Ubbe-Te veo más delgada, ¿ cómo sobreviviste a Ivar?.

-Es una historia muy larga.

Ubbe-Tenemos toda la noche y soy muy buena escuchando.

-De acuerdo...

                                                                                               Hvithserk

Vuelvo a besar sus hombros, la parte de atrás de su cuello, siento como su piel se pone de piel de gallina. Me coloco encima de ella, reparto besos desde su cuello, voy bajando por su larga espalda, hasta que llego a su caquete derecho de su delicioso culo.

Disfruto escuchando sus gemidos, sigo besando su culo. Beso cada parte de su cuerpo, no puedo despegarme de ella, ni aunque quisiera.

Aila-Hvithserk...

-No quiero hablar.

Este último año a sido un completo infierno, tuve que interpretar el papel de un hombre dolido, que acaba de perder al amor de su vida. Soportar al asesino de mi hermano, él cual contrato a varios hombres para matar a ella y a su mejor amiga.

Fueron tiempos muy duros, hubo un tiempo que no dejaba de pensar en que cabia la posibilidad de que uno de los hombres de Ivar las habían encontrado y asesinado.

Pero ese pensamientos se esfumo de mi cabaza, recibi una carta de Floki. En donde me estuvo hablando de ellas, fue glorioso saber de ellas y me dio fuerzas para seguir con nuestro plan.

                                                                     Ivar

Firmo la carta, empiezo a enrollar el pergamino, junto mis dedos y pego las manos en la frente. Es imposible que ninguno de mis hombres hayan localizado a Hvithserk, ¿dónde demonios te has metido?.

Quiero tirar todo lo que se encuentra encima de mi mesa, pero no voy a perder la compostura. Ayer me llego un aviso y resulta que han encontrado pruebas de un campamento, muy cerca de la costa.

Estoy seguro de que él se encuentra en ese campamento, mis hombres entrenan día y noche. Estoy preparando un lugar seguro para mi querida esposa y él bebe que lleva en su interior.

Freidis-¿Esposo?.

-Te creía descansando en la cama.

Freidis-No podía dormir.

-Ahora voy a la cama, estoy terminando una cosa.

Freidis-¿Necesitas ayuda?.

-No, vuelve al cuarto. Voy enseguida

-¿Sigues ayudandola?.

Ubbe-Ahora todos estamos en el mismo barco.

-Habla por ti, yo trabajo sola.

Ubbe-¿Y Aila?.

-Ya sabes a lo que me refiero.

Ubbe-Nunca la podre perdonar por lo de mi madre, pero todos le queremos ver muerto.

-No es Ivar mi presa.

Ubbe-Veo que sigues con la promesa.

-No soy una desertora, como otros.

Ubbe-Intente explicartelo.

-Haz lo que quieras, yo debo seguir con mi destino.

Ubbe-Matar a Lagertha, no te la devolvera.

Le golpeo la mejilla derecha con todas mis fuerzas, tiro las flores y las piso llorando.

Ubbe-Laura...

-La asesinare y quién intente impedirlo, estará muerto.