La primera toma de contacto con la prensa fue bastante cómoda. Al principio todas las preguntas fueron, en su mayoría, contestadas por Tínet o por Noemi, pero ahora quedaba lo más importante. Las mini entrevistas individuales con algunos medios de comunicación.
- Hola Hugo. - me saludó el primer periodista. - enhorabuena por ese tercer puesto, ¿Te lo esperabas?
-Para nada, pero estoy muy contento.- dije sonriendo para calmar mis nervios - Gracias.
- Acaban de anunciar que el próximo domingo habrá una última gala para recordar las mejores actuaciones de esta edición. ¿Sabes ya que canciones vas a cantar?
Tínet había anunciado la gala especial hacia escasos minutos para sorpresa de todos. Nadie sabía exactamente qué iba a suceder el próximo domingo.
- Acabamos de eterarnos de la gala. Así que no tengo ni idea de como va a funcionar. - expliqué encogiéndome de hombros.
- En el caso de que te dieran la opción de elegir, ¿Qué canciones cantarías el próximo domingo?
- Me encantaría volver a cantar genius o imposible. - dije sin pensarlo demasiado. Estaba muy orgulloso de esas actuaciones, aunque la última todavía no había sido capaz de verla.
- ¿Y si pudieras cantar un dúo? - insistió el periodista. Sabia el titular que estaba buscando y no me importaba dárselo.
- Cantaría cualquiera de mis dos dúos con Anaju. - confesé sonriendo.
Ví enseguida como el chico sonrió satisfecho, él tenía su titular.
***
No puedo negar que me sorprendió la imagen que me encontré nada más regresar a la habitación del hotel.Anaju seguía en la misma posición en la que la había dejado esta mañana. Ella seguía durmiendo en una pequeña esquina de la enorme cama, aunque ya no era necesario que dejara espacio para nadie. Una fina sábana blanca era lo único que cubría su cuerpo y aquella imagen me transportó a todo lo que había sucedido entre esas sábanas hacía tan sólo un par de horas.
Sin pensarlo demasiado saqué el móvil de mi bolsillo y tomé una fotografía. Ella, dormida entre sábanas blancas era una imagen que no quería que se borrará nunca de mi mente. Esa fotografía me ayudaría a recordar cuando de nuevo pasáramos noches separados.
Me deshice de la ropa para ponerme cómodo, cambiando mis ajustados vaqueros por unos pantalones de chándal. Iba a tumbarme a su lado cuando mi teléfono empezó a sonar.
- Mama. - contesté lo más rápido posible para no despertar a la mujer que seguía dormida en mi habitación.
- Bueno, por lo menos veo que te acuerdas de que existo. - contestó fingiendo estar enfadada, sabía que no lo estaba. - felicidades cariño.
- Gracias mamá. Todavía no puedo creerlo, esto es muy fuerte eh. - hablé emocionado, sin poder creer todo lo ocurrido.
- Te lo mereces mi amor. - por su tono de voz sabía que mi madre se estaba emocionando. - ¿Vas a volver con nosotros a Cordoba? - preguntó.
- Si creo que si. - dije contemplando a Anaju. - No tenemos que venir hasta el sábado para ensayar. - agregué recordando el horario que Noemi nos había dado.
Teníamos libertad hasta el sábado por la mañana, entonces debíamos acudir a las instalaciones de getmusic para enseyar la gala final.
- Perfecto saldremos sobre las 7.- informó y observé mi reloj viendo que todavía eran las 3 y tenía algo de tiempo.
En mi campo de visión volvió a entrar ella. Sus ojos empezaban a abrirse poco a poco logrando que sonriera automática. Verla despertar era de las cosas más dulces del mundo, parecía una niña pequeña. Anaju todavía no me había visto, quizás por eso se estaba desesperezando sin pudor.