En esa difícil batalla, en la que los miraculous estuvieron en manos de Chloe, de que el maestro Fu perdiera la memoria y Marinette fuera nombrada nueva guardiana, las cosas tomaron un sentido diferente para ella, puesto que más responsabilidades caían sobre los hombros de la pobre chica de 14 años.
Después de esa tarde en la que convivió con sus amigos, llegó a su casa y subió a su habitación, algo cansada y triste. Se recostó sobre el sofá y Tikki voló frente a ella, necesitaba hablar con su portadora y no podía esperar.
- Marinette, ¿estás bien?, necesitas descansar. Este fue un dia muy emocionante-
-Lo sé Tikki, estoy cansada por todo lo que pasó, y me siento un poco triste a pesar de que Chat Noir y yo ganamos esa batalla.
- ¿Por qué la tristeza Marinette? -
-Porque prácticamente me tengo que hacer cargo sola de los miraculous, no es que no me guste mi trabajo como Ladybug, al contrario, me encanta ayudar a las personas, pero el ser la nueva guardiana, me tiene pensativa, no sé si sea capaz de cuidar de la caja, de ayudar a los kwamis si lo necesitan y sobre todo no estoy segura de saber si tomaré las decisiones correctas-. Dijo la chica volteándose a otro lado, mientras Tikki la observaba y sonreía dulcemente.
-Marinette, el maestro Fu sabía que era probable que él entregara la caja, él confiaba mucho en ti y en tus decisiones, aunque no estuviera muy convencido. Como cuando escogiste a Alya para portar el miraculous del zorro, o cuando decidiste llevarte todos los miraculous para enfrentar a la cazadora de kwamis, él no estaba muy seguro de tus acciones, pero demostraste ser una gran Ladybug, has salvado a París muchas veces, y estoy segura de que podrás con esta responsabilidad, para mí no ha habido mejor ladybug que tú en toda la historia-. Dijo la kwami acercándose a la mejilla de su portadora.
Wayzz, el kwami de la tortuga, escuchaba esta conversación y un poco temeroso, se acercó a la guardiana.
-Marinette- le habló temeroso.
- ¿Qué pasa Wayzz? - preguntó Marinette un poco extrañada.
- Marinette, sé que tienes temor de ser la guardiana, pero tengo fe en que siempre sabes que hacer, aunque la situación no sea la mejor, siempre sabes como actuar y eso es algo muy valioso. Desde que el maestro Fu te escogió como Ladybug, supo que tu corazón era limpio y bueno. Además, has demostrado tus capacidades como portadora como nunca nadie lo ha hecho anteriormente.
- ¿Mis capacidades como portadora? – preguntó algo extrañada la chica.
- Como Tikki mencionó anteriormente. El día que la cazadora de kwamis atacó y usaste al mismo tiempo todos los miraculous de la caja, mostraste una gran resistencia, aunque te sentías un poco débil, además hiciste algo que jamás se había visto: ¡fusionaste los miraculous obteniendo poderes combinados! Supiste como arreglar esa situación prácticamente sola, no ha habido portadora más lista e inteligente que tú Marinette, todos los kwamis confiamos en ti y te ayudaremos en todo lo que necesites- Wayzz le señaló la caja de los miraculous – Sabemos que puedes hacerlo Marinette-.
Marinette sonrió un poco, de algún modo, las palabras de Wayzz y Tikki le ayudaron a confiar un poco más en ella. Le dio a Wayzz una galleta de limón y a Tikki una de frambuesa. Se levantó del sofá y observó la caja de los miraculous, ésta tenía una forma diferente a la del maestro Fu, no sabía como funcionaba y veía la caja un poco extrañada.
-Usa tus instintos para abrirla Marinette- Mencionó Tikki y Wayzz observaba algo curioso.
- Ummm... bueno... si toco aquí y aquí...- la chica presionó algunas motas negras de la caja, como si se tratara de una combinación especial y ésta se abrió dejando ver las otras joyas de los miraculous, las observaba con mucha curiosidad ya que no sabía cómo funcionaban los demás poderes y de algún modo si era la nueva guardiana, tendría que descubrirlo, pero no en ese momento.
- ¡Marinette! ¡Es hora de dormir! – Gritó una voz desde el piso de abajo
Marinette se dispuso a cerrar la caja y se despidió de Wayzz entrando éste a la caja con los demás kwamis. La azabache se puso su pijama y subió con Tikki hasta su cama. Respecto a ser la nueva guardiana, se sentía un poco más tranquila pero aún había algo que la hacía tener una mirada triste: Adrien Agreste.
-Marinette, ¿estás pensando en Adrien? - Preguntó Tikki algo preocupada.
-Si... sé que él está ahora con Kagami, estoy casi segura que los vi besarse mientras estábamos en el puente- dijo Marinette triste y con los ojos un poco llorosos. – Sé que Adrien me considera alguien muy importante y a pesar de lo que sienta, siempre estaré para él cuando me necesite, será difícil verlo hablar, reír y saber que ya no tengo oportunidad con él. - Tikki la abrazó y comenzó a acariciarla, intentando darle consuelo aunque por dentro sabía que tanto ella como Adrien estaban del mismo modo, tristes porque de algún modo habían renunciado a la persona que amaban. Marinette se quedó profundamente dormida, y Tikki la observaba dulce y susurrando un pequeño "Tú puedes con eso y más Marinette". Tikki se dispuso a tomar su lugar y a dormir junto a su portadora, deseando que ella estuviera bien muy pronto.
En una mansión en París, cierto rubio gatuno se recostaba en su cama después de un intenso día de peleas y otras emociones encontradas provocadas por Kagami. Meditaba sobre todo en como serían las cosas ahora con Ladybug, ahora que ella era la nueva guardiana y que él estaba "enamorado" de otra chica. Llamó a su kwami para escuchar su opinión sobre la nueva responsabilidad de su compañera.
-Oye Plagg, tú... ¿Crees que Ladybug pueda con toda esta responsabilidad?
El kwami observó algo extrañado por la pregunta de su portador mientras acariciaba un trozo de camembert como era su costumbre. Notó que la pregunta que el chico le hacía era con algo de desconfianza, como si no confiara del todo en ladybug.
-A ver chico- Plagg dejó su queso un momento y se acercó a la cama con su portador. - ¿qué pasa Adrien? ¿Acaso no confías en ella? –
-No es eso Plagg, sólo pienso que puede que sea algo difícil para ella todo esto. No estoy diciendo que ella no es capaz de hacerlo. – El kwami lo vio fijamente, sabía que Adrien sentía algo por ella, aunque estaba con Kagami y que esa pregunta de si podía con la responsabilidad de ser la nueva guardiana, no era por su capacidad sino por preocupación. Plagg se acercó a él y le tocó el hombro, Adrien lo miró y sonrió de lado.
-Adrien, escucha- dijo Plagg. -Tú sabes que yo conozco la identidad secreta de Ladybug y Tikki conoce la tuya, por seguridad no podemos decir nada de sus identidades y menos ahora que la chica es la nueva guardiana. Pero te puedo asegurar que bajo esa máscara, hay una chica inteligente, valiente y que daría todo porque París esté bien, ella sabrá que hacer, tiene las capacidades y fue elegida por el maestro Fu con gran detenimiento, que él la haya nombrado guardiana hasta ahora, fue por las circunstancias, Ladybug ha demostrado tener gran poder para dominar los miraculous, es una heroína brillante, tú mismo lo has comprobado, además las galletas que me ha dado, mmmm ¡son deliciosas!- Dijo Plagg algo entusiasmado. -Tu deber como Chat Noir, es estar a su lado y ayudarla en todo lo que puedas, ella te valora Adrien, lo sé-. El kwami se apartó del chico y se fue al escritorio a disfrutar su queso-
El rubio sonrió de lado por las palabras del kwami, sabía que ladybug podría hacer eso y más por los miraculous, seguía pensando en ella con amor, recordaba su sonrisa y sus ideas locas; en ese instante se preguntó quién era la chica debajo de la máscara, y se preguntó quién era el afortunado chico que tenia el corazón de la Catarina, se volteó del lado derecho en su cama, pero algo le molestó en la pierna y al tomarlo vio que era el amuleto que Marinette, lo vio con una sonrisa y pensó en ella, en su torpeza, sus balbuceos y pasó por su cabeza que ellas podían ser la misma, idea que borró de inmediato, pues recordó que en carácter y actitudes no eran iguales. El rubio se dispuso a lavarse los dientes y se acostó. Él amaba a Ladybug, pero sabía que eso era imposible, sólo deseaba que no hubiera akumatizaciones en unos días para no verla, sería difícil para él y aunque no lo sabía, también era complicado para ella.
Adrien sería un nuevo Chat Noir de ahora en adelante, más serio en batallas, más concentrado y menos bromista. Tenia que olvidar sus sentimientos hacia la chica y centrarse en Kagami y tratar de estar bien con ella. Marinette por su parte, tenia que ser una nueva ladybug, era la nueva guardiana y tenia que centrarse en cosas más importantes que en lo que sentía por Adrien. Sin saberlo, todos verían a una nueva Marinette.
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Nuevas Batallas
FanfictionDespués de la Batalla por los miraculous, Marinette es la nueva guardiana. Un gran peso en sus hombros se hace presente, pero tiene a su fiel amigo y compañero que siempre está junto a ella. ¿Cómo irán las cosas entre Adrien y Marinette, ahora que...