One Shots | Tom Holland

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Personaje: Tom Holland.
Título: Cuando una puerta se cierra, otra se abre
Advertencia: Una parte hot.
Nota: Me está gustando mucho esta historia y veo que a ustedes también, capaz dure un poco más... Besos❤️
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Sentía escalofríos al sentir las manos de Tom viajar por mi cuerpo desnudo y mojado. Mis piernas estaban al lado de su cintura por lo que nuestros cuerpos  estaban pegados y contra el suelo. El frío que tenía con sus propios toques desapareció, nos calentamos en segundos.
Mis labios estaban sobre los suyos moviéndose sin control, mis manos sobre su cabello masajeándolo con dulzura.
De un momento a otro Tom tomó mi cintura y logró ser él el que ahora estaba arriba de mi, se quitó la camisa en un movimiento al igual que sus pantalones dejándome apreciar su musculoso cuerpo. Apretó su pelvis contra la mía logrando quitarme varios gemidos y haciéndome sentir como su miembro despertaba entre la fina tela de sus bóxers.

-Deberíamos ir a mi habitación-habló él entre besos con su voz más ronca de lo normal.

Asentí y Tom me tomó de la cintura cargándome encima de él. Mientras el caminaba fuera del baño yo saboreaba su cuello y escuchaba caliente como suspiraba ante ello.

Esta noche sería bastante buena.

(10:00am)

El ruido de un despertador me hizo abrir los ojos. Bostecé mientras me estiraba entre las suaves sábanas. Miré a mi lado notando que no estaba sola y las imágenes de la noche anterior me hicieron sonreír.
Nunca me había sentido tan bien.
Me acosté hacia un costado para poder admirar su rostro mientras dormía.

-Que hermoso eres-susurré sabiendo que no me escucharía.

Mi mano fue hasta sus rulos despeinados para luego bajar a su mejilla y acariciarla. Estaba embobada, no podía dejar de verlo. Mientras seguía acariciandolo la imagen de John vino a mi cabeza y me sentí mal. ¿Acaso estuvo mal acostarme con otro el mismo día que rompí con mi pareja de tres años?
Suspiré y volví a mirar el techo, sé que él me engañó por meses pero eso no significa que mis sentimientos por él hayan desaparecido del todo. Al igual que Tom, ayer cortó con su novia pero no creo que la haya olvidado de un día para otro.
Traté de esfumar esos pensamientos, tampoco es como Tom y yo fuéramos a ser pareja. Tan solo fue un polvo.

-Buenos días.

Miré a mi lado con una sonrisa, despertó.

-Buenos días-respondí.

Tom abrió sus brazos y yo me acerqué para encerrarme en ellos. Depositó un beso en mi cabeza y comenzó a acariciar mis brazos.

-¿Dormiste bien?-me preguntó.

-Muy bien, ¿y tu?

-Después de lo de anoche, imposible dormir mal.

Yo reí y negué con la cabeza. Recuerdo que cuando John y yo teníamos relaciones apenas terminábamos él se iba a acostar sin ni siquiera decir nada. En cambio, con Tom fue tan distinto. Después de eso nos quedamos en su cama charlando y riendo, me hizo sentir tan querida que sentía que no lo merecía.

-Oye-Tom habló-Yo realmente no quiero que pienses que me aproveché de la situación, Créeme que no te traje a casa con esas intenciones. Entiendo qué tal vez no fue el mejor momento y debí esperar a que por lo menos pudieras superar a tu ex.

Me senté en la cama y lo miré a los ojos.

-Lo sé, sé que no eres ese tipo de chico. También pensé en lo de John pero realmente no me arrepiento de lo de anoche, fue la mejor decisión que haya tomado-confesé.

-Igual yo-respondió con una sonrisa-¿Quieres comer? Hago unos ricos hotcakes.

(11:00)

-Recuerda, la llave para ésta puerta es esta. Y esta es para abrir la puerta trasera.

Sujeté las llaves y las analicé mentalmente para no olvidarme cuales eran.

-¿Estás seguro que quieres que me quede? No quiero molestar, puedo ir a un hotel-volví a sugerir.

-De verdad, no me molesta. Además me gusta tenerte aquí-respondió sujetándome por los hombros-Volveré del trabajo a las 4, ¿Okey?

-Okey.

Tom besó mi mejilla y tomó sus cosas para irse.
Yo me quedé sentada en su comedor, pensando que podría hacer mientras tanto.
Caminé por los pasillos admirando lo hermosa que es su casa y noté el polvo que tenía. Era entendible, Tom vive solo y trabaja mucho. Además, si yo también viviera en una casa así de grande no la limpiaría, tardaría demasiado.
Y eso me dio una idea.

(4:30pm)

-¡Terminé!-grité tirándome al sillón.

Limpié la casa de punta a punta, jamás había limpiado tanto. Pero realmente estaba feliz con el resultado, todo se veía impecable y hasta podría decir que con mejor olor.
Caminé arrastrando los pies por el pasillo, después de esto merecía un baño caliente. Además, con lo qué pasó ayer no llegué a bañarme por completo. Decidí usar el jacuzzi. Abrí el agua y dejé que se llenara. Mientras tanto fui hasta la habitación y prendí mi celular. Al hacerlo mi celular explotaba de llamadas perdidas y mensajes, la mayoría eran de John. Pero hubo uno que me llamó la atención.

Megan🖤:

-Hola Sofi.

-Escucha, ya sabemos qué pasó con John.

-Solo quiero, más bien queremos, saber si estás bien.

-Estamos preocupados por ti.

Solté un largo suspiro. Megan era una de mis mas íntimas amigas, aunque también es la novia de el mejor amigo de John.

                            -Hola Megan❤️.
                  
-Estoy bien , lamento haberlos preocupado.

-Prometo que nos juntaremos a hablar.

A los segundos respondió.

-¿Dónde estás? ¿Quieres quedarte en mi casa?

Comencé a dudar, ¿Debería decirle dónde estoy? Bueno, creo que no hay problema con eso. Al fin y al cabo, ella no es la amiga de John.

-Me estoy quedando en lo de un amigo, vive en Hallway Street. No tienes porque preocuparte.

               -Porfavor no le digas a John.

-Está bien, Hallway Street es una calle segura.

-Tranquila, no le diré nada.

-Nomas cuídate, y llámame si necesitas algo, Te amo.

Cerré la conversación y abrí Spotify para dejar sonar mi playlist. Me metí en el jacuzzi y apoyé mi cabeza en la pared para cerrar los ojos y poder despejarme.
Pude quitar de mi mente a John y concentrarme en la música la cual tarareaba por lo bajo.
Podía acostumbrarme a esto.

-¿Sofi? ¡Ya llegué!