LOVER OF MINE | Luke Hemmings

xxvii

—Que dolor de culo Dios —se quejó Bea cerrando la puerta de nuestro apartamento.

—Y ahora acostumbrarse a este horario —si, como podrán ver no estamos en el mejor humor de todos.

—¿Mañana vas a la uni?

—Si —suspiré —Tengo que poner en orden algunas cosas de la matrícula, también tengo que ir a visitar a mis papás.

—¿Organizaron algo para mañana?

—Como si no los conocieras —me reí —Estás invitada lógicamente.

—¿Veras a Ronnie?

—Lo más probable es que esté ahí —encogí de hombros —No he hablado con ella en dos meses, es la primera vez que pasamos tanto tiempo sin dirigirnos la palabra.

—Mañana seguro lo arreglan, ustedes no son de pelear.

—Lo sé, solo espero que no se ponga necia con Mateo.

—¿No aprueba que estes con Luke? —ouch, escuchar su nombre me daban ganas de llorar.

—No es eso, seguro le encantará Luke, es solo que sabes cómo es, se encariñó con Mateo y piensa que solo terminamos por una tontería.

—Si tan solo lo conociera como yo lo conozco —gruñó —No lo nombremos mucho, que no quiero que aparezca por esa puerta.

—No te preocupes, tengo el presentimiento de que no molestará más, por las fotos de Instagram se ve que está feliz con la nueva chica.

—Pobre, las personas deberían venir con un minuto de trailer para saber en lo que te estás metiendo, él es todo un personaje.

—Con un trailer no basta, a él hay que hacerle una película —nos reímos las dos.

—¿Qué hora es en Australia?

—Son las 9 de la mañana, recuerda 8 horas más.

—Le escribiré a Ashton que llegamos bien.

Hice lo mismo con Luke aunque probablemente estuviese dormido aún, evidentemente no tenía nada de sueño así que decidí darme una larga ducha a ver si me entraba un poco el sueño, no había pegado ojo en ese avión.

Me bañé y me puse uno de los pocos pijamas que no había empacado para llevarme a Australia, mañana lidiaría con la maleta, ahorita mismo sólo quiero echarme en mi cama a dormir y a llorar, a ver qué pasa primero, secarme o dormirme.

(...)

—¡Gorda! —me apachurró mi mamá nada más entrar —Te extrañé tanto.

—Yo más mami —le correspondí el abrazo y entré a la casa.

—Bea mi niña —hizo lo mismo con mi mejor amiga —Pero miren que bronceadas están Dios, cuéntenmelo todo ¿cómo les fue?

Nos sentamos en el sofá de la sala para hablar un poco acerca del viaje, al poco tiempo llegó mi papá que nos saludó de la misma manera a las dos.

—Suena increíble, un día tenemos que ir mi vida —le dijo mi mamá a mi papá.

—Me parece una excelente idea.

—¿Y el lindo australiano? ¿De eso no vas a decir nada? —me molestó mi mamá subiendo una ceja.

Me puse colorada rápidamente —¿Te dejo ir tres meses a Australia y me llegas con otro novio Bea? —se rió esta vez mi papá.

—¡No es mi novio! Y Bea también tiene uno.

—Pero serás chismosa.

—¡Cuéntenmelo todo! A ver el tuyo Bea, el de Abi es espectacular.