28.-Ojos castaños

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Muy bien, ya iban para la media noche; para dos six de cerveza; cuatro cajas de pizza, muchas bolsas de papistas y una botella de vino a la mitad y ellos seguían riendo de cosas que les había pasado. Algunas divertidas que hacían reír a todos y otras que irritaban a más de uno. Así que, para evitar pleitos y discusiones, había comenzado a jugar verdad, reto o shoot. Ese estúpido juego de niños de secundaria los tenía divertidos desde hace más de una hora.

Entre bailes extraños en medio de la sala, preguntas subidas de tono y uno que otro trago para evitar pelear, era que llevan su noche. Riendo a cada rato por cualquier cosa.

-Estoy demasiado borracho ahora... - Dijo JungKook que se encontraba de pie en medio de la sala. Su reto era sencillo, un baile sexy frente a todos, pero con una peluca, ¿Qué?, sí ya estaban borracho, iban aprovechar hacer bien el ridículo. - Si me caigo ustedes me atrapan. Ahora sí, ¡música maestro!

Comenzó moviendo sus caderas de un lado a otro mientras su mano se movía por su cuello y pecho. Una que otra vez a sus piernas. Sin tener la mirada en ningún lado era que se movía.
Sintiendo el ritmo de la melodía entrar por sus oídos y recorrerle el cuerpo.

Bajo su cuerpo con las piernas abiertas, sintiendo como su pantalón se le apretaba más a sus muslos y trasero, para luego volver a subir muy despacio. Mordiendo uno de sus dedos dándole un toque muy coqueto y sensual.

TaeHyung lo sabía. JungKook estaba siendo coqueto involuntariamente. Pues los grados de alcohol en su cuerpo le permitían ser sexy y jodidamente provocativo. Cruzó las piernas para evitar que sus amigos vieran la pequeña erección en su pantalón y sonrió al ver como el menor se tambaleaba. YuGyeom lo sujeto de los hombros mientras JungKook reía como loco.

-Te dije que estaba muy borracho. - sonrió. - ¿puedo usar tu baño?, creo que voy a devolver la pizza.

TaeHyung se levantó de su cómodo lugar y le ofreció a su sobrino ser él quien lo llevara. YuGyeom no se negó pues sabía que JungKook estaba lo suficientemente borracho como para darse cuenta de quien lo ayudaba. El mayor lo sujeto de la cintura y lo llevó al baño entre tropiezos y risas escandalosas. Cuando lograron llegar, JungKook lo empujó para dejarse caer en el baño y regresar todo lo que había comido en el día. Sintiendo vergüenza de que lo vieran, pero ignorándolo de todos modos porque en ese momento no podía hacer más que vomitar y sentir sus lágrimas resbalar rebeldes.
Nunca antes había llegado a ese extremo en una borrachera. Siempre era el que llegaba más sobrio a su casa y míralo ahora, regresando hasta su desayuno y todo por anda de chistoso.

-No me veas... - dijo con la cabeza dentro del escusado. Pues sentía como TaeHyung lo miraba mientras le daba suaves caricias en la espalda. - esto es asqueroso.

-No pasa nada, JungKook...

El menor se hincó cuando terminó y tallo sus labios sintiendo asco de su propio estómago. Levanto la mirada y vio como TaeHyung le sonreía. Como sus ojitos castaños brillaban de alegría y como no veía ni una sola gota de asco en ellos.

-Vete, por favor. Quiero estar solo.

TaeHyung no muy convencido asintió. Salió del baño, pero quedándose fuera en espera del menor. Su menor.

Fastidioso YuGyeom 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora