Estaba esperando a que Bryan contestara la llamada hasta que un sonido me tuvo concertada durante unos segundos, claramente y si es que el sueño no me estaba engañando había escuchado el sonido de un celular y después unos pasos; La verdad que vivir sola a veces sí daba un poco de miedo.
Me levanté de mi cama y entre la obscuridad de la casa empecé a recorrer los pasillos para asegurarme que todo estuviera bajo control, bajé los escalones y cuando llegué al último escalón me quedé parada entrecerrando mis ojos para ver alrededor de mí, no entiendo cómo esperamos ver algo a obscuras cuando podemos encender la luz, ¿Cierto?Empecé a sentir la presión en el pecho y ese zumbido que suele aturdir en los oídos estaba presente, algo no estaba bien, entre el silencio de la noche se escuchaba el palpitar de mi corazón acelerado por la adrenalina que sentía al estar arriesgándome así nomas, y no sólo eso.. Podía escuchar una respiración que no era la mía.
[...]
Ella estaba presente a lado mío, con la poca luz que entraba por la casa pude asimilar su hermosa y curveada silueta tratando de ver que pasaba. Me encontraba escondido detrás de la pared, en cualquier momento sentía que me descubriría.
Volteó lentamente al lugar donde estaba y se notaba que trataba de definir que había por la manera en la que forzaba su mirada, cuando menos se lo esperó salí del lugar para atraparla por la espalda así tapando su boca para que no pudiese gritar, este calor en mí no se podía apagar fácilmente, estoy cansado de siempre querer demostrar una versión buena de mi, cuando la mayoría del tiempo no estoy bien.Cuando la tomé empecé a subir lo escalones como pudiese con ella en brazos, intentaba gritar y estaba tratando de zafarse pero nunca pudo, en realidad, me dolía hacer esto.. Pero a veces, nuestra contraparte puede más.
Llegando a su habitación la lancé a su cama, ella horrorizada empezó a llorar y a gritar de la desesperación suplicándome que no le hiciera daño, preguntándose quién era la persona que estaba dañándola. Sus gritos penetraban gravemente en mis oídos haciendo que me irritara y me hundiera en coraje, sin pensarlo dos veces le solté un golpe haciendo que quedara inconsciente.
— ¡MALDICIÓN! - grité asustado.
No sabía que hacer en ese momento, tenía lo opción de irme porque nunca supo quién fue la persona, pero me preocupaba demasiado el hecho de que le haya provocado algo muy grave con el golpe es por ello que me he aseguré de que siguiera respirando y revisarla cuidadosamente de que todo estuviera bien.
Acomodé su cuerpo de manera que pudiera estar algo cómoda, entre sus cosas encontré lo perfecto para amarrarla así que solo até sus manos y piernas, cubrí sus ojos y su boca. Claramente me estaba equivocando ¿Debería de irme? Lo que siento por ella es algo tan profundo que no me entiendo, ¿Por qué estoy haciendo esto?Era de madrugada, me encontraba sentado en la orilla de la cama pensando sobre la situación y las consecuencias que tendría por esto, soy una figura pública claro que habrá escándalos por todo internet; La verdad, odiaba eso.
Pensaba en mi familia, en cómo se sentirían decepcionados de mí por enterarse de esto, mamá siempre nos ha dado lo mejor como para pagarle con un hijo que fuese a la cárcel. A mis fans les estaría fallando y es algo que prometí nunca hacer.
Empecé a llorar de la desesperación pasando mis dedos entre mi cabello azul enredado, no es justo la vida para algunos.. Y a mi me tocó esta pesadilla.Me acerqué a ella sutilmente y le quité las cosas con la que la había atado, acomodé su delicado cuerpo entre sus sábanas de manera que ahora pudiera dormir tranquila, rezaba para que estuviese bien mañana.
Guardé las cosas en su lugar tal y como estaban, caminé hacia la entrada de su cuarto volteando por última vez hacia ella antes de retirarme.— Lo lamentó mucho. - susurré.
Seguí mi camino a casa, no podía sacarme de la cabeza las horrorosas imágenes de lo que acaba de suceder, nadie lastima a la persona que quiere, menos físicamente; ¿Por qué carajos he hecho eso? ¿Qué está mal en mi? ¿Por qué no puedo ser normal? Tengo tanto miedo de lo que puedo llegar a hacer porque no tengo control de mí mismo.
Eso y más cosas rodeaban en mis pensamientos en el corto camino a casa, pareciera que fueran horas de pensamientos en segundos, no lograba procesar la situación. Entré silenciosamente y me dirigí al baño para lavarme las manos, enseguida fui a la cocina por un poco de agua. Sentía la garganta seca de los nervios que había sentido, un nudo en la garganta también se encontraba presente, nadie se puede enterar de esto.
Cuando iba de regreso a la sala para dormir encontré en el mueble de a lado los papeles que tenía Yess cuando estábamos hablando, me había comportado algo grosero por no querer leerlos cuando me los estaba dando, me causaba conflicto saber cuál era mi problema.. ¿Es algo que se podía solucionar o no?
Moví mi brazo lentamente temblando hacia aquellos papeles en la carpeta amarilla enorme, los tomé y me senté para leerlo tranquilamente.
Bebí un sorbo de agua para calmar un poco la ansiedad de saber qué ocurría en mi, abrí la carpeta y empecé a leer los documentos cuando por fin llegué a la conclusión dictada por el Doctor.El paciente Bryan Raúl Villanueva Salazar presenta Psicopatía, trastorno de personalidad.
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P S Y C H O P A T H [𝗕𝗿𝘆𝗮𝗻 𝗦𝗞𝗮𝗯𝗲𝗰𝗵𝗲]
RomanceAdvertencia, esta novela tiene contenido y/o lenguaje explícito que puede ser perturbador para algunas personas. Si continúas leyendo, será bajo tu decisión y consentimiento. Derechos reservados ©