ＦＥＲＡＬ ＢＯＹ [Ｋ.Ｔ] - EN EDICIÓN

Capítulo 48

El sonido de las aves y una brisa fría me permitio despertar de lo qué, al parecer, fue una fea pesadilla.

– Ay –

Aunque, quizás no fue todo un sueño.

Cuando abrí los ojos y me senté en la cama, me di cuenta de qué tenía una buena cantidad de vendas esparcidas por mi cuerpo, mucho dolor en zonas qué no sabía que tenia musculos y un par de recuerdos borrosos.

– Hasta qué despiertas, bello durmiente – alcé mi vista, al escuchar una voz. Era la de Jimin, quién me sonrió de oreja a oreja al descubrir qué estaba despierto – ¿Cómo estás Taehyung?

– Muy adolorido ¿Qué fue lo que pasó? – pregunté mirando el lugar – ¿Dónde estoy?

– Estamos en casa de los Jung – dijo él, entrando en la habitación – Perdiste la conciencia por el sobre esfuerzo de hace dos noches.

– ¿Y ____? ¿¡Y él bebé!? ¿¡Dónde están!? No siento su presencia aquí – Jimin dio un suspiro – ¿Todo salió bien?

– Sí, todo salió bien y ellos están bien, de echo ____ me llamo hace poco para preguntar por ti – dijo Jimin mientras sonreía, levemente –

– Quiero verla – intenté levantarme de la cama, pero Jimin me detuvo – Quiero verla Jimin.

– Lo sé, conserva la calma y escuchame Taehyung – dijo obligandome a volver a la cama – Él señor Jeon, no quiere verte cerca de ___ y dejó muy en claro qué no podías acercarte a la casa.

– Necesito ver a mi hijo. Él no me puede negar ése derecho – le dije a Jimin – Iré a su casa, sin importar que pase.

– Jungkook, está intentando persuadirlo por ti – me dijo Jimin, intentando hacer que conservara la calma – Así qué... por ahora, debes recuperarte y reponer tus energías.

– No, no necesito hacerlo. Quiero ir a su casa ahora mismo para ver a mi bebé – hice a un lado las sábanas – Y si no me quieres acompañar, no me importa.

Jimin, soltó un bufido y asintió.

– Bien cabeza hueca, te traeré algo de ropa limpia – lo miré feo tras su tonto insulto – Ve a darte un baño. Tienes olor a perro sucio.

– Insultas a mis ancestros – me crucé de brazos - No me llames perro.

– ¡Jimin! ¡Ven! –

Pegué un salto al escuchar el grito de alguien qué parecía ser Jiwoo. 

– ¿¡Qué paso ahora, Jiwoo!? –

– ¡Es Yeontan! –

Jimin salió de la habitación con rapidez al escuchar ésas palabras y yo, lo seguí.
Después de todo había dejado al perrito a su suerte, para ir en busca de ____, un par de días antes.