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JongHo estaba jugando con sus piezas de LEGO, tratando de construir un robot, o eso intentaba. Escuchaba la discusión de los niños mayores, pues tres de ellos culpaban a San de hacer trampa, mientras el castaño solo repetía una y otra vez que no había sido así. Sin embargo, así era.
—¡Abriste los ojos!— Le recriminó WooYoung, cruzándose de brazos después. No importaba cuantas veces le dijeran que lo descubrieron, San no cedía.
—¡No lo hice!
Habían estado jugando al escondite, y quien buscara tendría los ojos cerrados. Hasta el momento San fue quien menos tardo en encontrar a los demás en su cuarto, yendo directamente a por todos sin siquiera buscar en otras partes.
—Yo te vi San, abriste los ojos un momento.— Le dijo Yeosang, quien en ese momento pensó que se lo había imaginado, pero ahora estaba claro.
—¡No es cierto!
—¡Yaa!, ¡Silencio!— Chillo JongHo llamando su atención, estaba molesto por tanto ruido. Les miró mal una vez y llamó su atención, para luego aventar uno de sus bloques hacia ellos.
YeoSang lo esquivó, al hacerlo golpeó a MinGi en el brazo.—¡Jonggie!— El pequeño pelinegro le mostro su lengua, y luego continuó jugando como si nada hubiese ocurrido.— ¡Le voy a decir a HongJoong Hyung y a SeongHwa Hyung!
JongHo le ignoró, por lo que MinGi se dio la vuelta y se encaminó a la puerta para ir a acusar a su hermano menor.
Antes de que saliera, WooYoung le dijo.— Y diles que San hace trampa.
—¡Que no!
El niño de seis años salio del cuarto donde llevaban horas jugando después de desayunar. Escuchó como la riña continuaba, Donde WooYoung y YeoSang intentaban hacer que San aceptara que hizo trampa.
MinGi fue hacía donde escucho las voces de los mayores sin prestar atención a lo que decían, pero lo hizo cuando estuvo fuera de la cocina, apunto de entrar.
—¡¿Por qué no me escuchas?!—La voz enojada de SeongHwa le hizo quedarse quieto, con la mano estirada en la puerta para empujarla. Mejor bajo su brazo, y se quedó mirando a la puerta entre abierta con miedo.
—Siempre haces lo mismo, me dices algo y luego cambias de idea, ¡Detesto eso!— También se oía muy molesto HongJoong, y MinGi sintió miedo.
Pocas veces había visto a los mayores realmente molestos, era más frecuente cuando se la pasaba peleando con Yeosang y San. Obviamente verlos enojados era algo que le intimidaban bastante. Sin embargo, eso no era lo que le asustaba realmente.
—Deja de ser tan testarudo HongJoong.
—¡¿Testarudo?!
Lo que me daba miedo era que esa discusión se parecía a las que sus padres solían tener antes de que su madre se fuera. Para ese entonces MinGi no les prestaba atención a lo que se gritaban, pero si el simple hecho de oír sus voces elevadas de tono le hacían sentir muy asustado. Jamás había escuchado a sus hyungs pelear, por lo que oírles hacerlo le llevo a pensar que acabarían igual que sus padres, separados y abandonados.
