Alyssa
—Andrew es tan imbécil como atractivo. —Dijo Rusty mientras se tiraba sobre mi cama. — Deberías hacerte un cambio, cariño.
Lo observé extrañada mientras me acostaba boca arriba para poder observarle mejor. Rusty había sido la única persona que había podido venir a visitarme después de que mis padres me castigaran, sí, estoy castigada desde hace una semana. Pues resulta que mis padres se dieron cuenta de mi salida clandestina y ambos se encontraban esperándome en el salón principal. Para mi suerte, claramente no sabían que había estado con Andrew y mi excusa había sido que me había ido con Bethany de fiesta.
Mis padres no habían permitido que ella me viniese a visitar, Bethany no estaba enterada de mi pequeña mentirilla por lo cual le había dicho que no viniera a mi casa por un tiempo. Pero si me lo preguntan, no estoy arrepentida de nada con respecto a mis padres, pues ellos tenían la cual de mi comportamiento. Tenía que ser libre, ellos no me dejaban ser libre.
Con respecto a Andrew, no había hablado con él desde aquella noche. En las prácticas habíamos cruzado un par de palabras pero nada más. Internamente lo agradecía, pero me era difícil no pensar en él a cada segundo. No podía parar de pensar en la manera en la cual me había despreciado, el solo hecho de pensarlo me ponía paranoica. Ahora tan solo quería paz interior y dejar de lado todo aquello que me acordase a él.
— ¿De qué hablas? —Le dije mientras fruncía el ceño. —No voy a buscarle, puede irse a la mierda si quiere pero no le buscaré.
—No estoy hablando de que le busques. —Rusty se levantó y fue directo al espejo, se miró en él y acomodó su cabello. — Hablo de que hagas que él te busque a ti.
—No puedo forzar a un hombre a que sienta algo que en realidad no siente. Puede que yo sea caprichosa, malhumorada, y algo malcriada pero jamás intentaré agradar a alguien.
Rusty rodó los ojos, irritado.
— ¿Qué no acabas de decirme que le gustas?
—Sí, eso fue lo que dijo. —Me cabreaba cada vez que lo recordaba. — Pero luego revolvió todo. Según Andrew no soy la chica para él.
—Tal vez está mintiendo. —Rusty me miró perplejo. — ¡Eso es lo que sucede! Tal vez quiere escapar de algo.
— ¿De qué querría escapar él? —Me sentí, de pronto...Algo inquieta.
—De ti, cariño. —Rusty Me observó como si fuese una imbécil, pero la realidad era que no entendía que era lo que quería decirme. —Tiene miedo a enamorarse de ti, ¿Es que no lo ves? Soy amigo de Bethany desde que andábamos en pañales, por lo tanto conozco más a fondo a Andrew. Claramente no podemos negar que Andrew esta como quiere, pero es también una persona sencilla, le gustan las cosas sencillas Aly. Él nunca esperó encontrarse con una chica como tú; Eres bella e inteligente pero él quiere algo de lo que tú careces.
—No me digas eso, Rusty. —Dije enojada. — ¿De qué carezco? ¿Qué me hace diferente a lo que él quiere?
—Te falta humildad, querida. —Finalizó. Yo por mi parte sentí perderme por un momento, mi cabeza dio vueltas por unos segundos ante la confusión, eso hasta que el celular de Rusty comenzó a sonar. —Es Bethany. —Me dijo en un susurro mientras contestaba el teléfono.
Rusty terminó la conversación y yo aún me sentía en una clase de transe del cual no podía salir. Las palabras de mí querido amigo se habían quedado clavadas en mí, llenándome de confusión.
—Aly, ¿Estás ahí? —Escuché a lo lejos mientras yo permanecía con la mirada fija en una esquina de la habitación. — ¡Acaso no me estas prestando atención! —Me sobresalté al escuchar la chillona voz de Rusty una vez más.
ESTÁS LEYENDO
Del Egoísmo Al Amor I ©
Teen Fiction¿Era simple deseo carnal o aquello que sentía iba más allá de lo que yo podría llegar a imaginar? Mi identidad, mi respetuosa imagen y, sobre todo, mi elegancia me había caracterizado y me habían llevado por el camino más prestigioso del mundo de lo...