1.-El niño en el iceberg

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Narra Katara

El pasar tiempo con mi hermano Sokka no es de mis cosas favoritas pero en nuestra canoa vamos buscando peces para llevar a nuestra tribu, mientras el veía su "musculoso" reflejo en el agua en vez de atrapar peces, yo soy más lista y usando mi agua control logro atrapar uno.

—Sokka ¡Mira!—Mi agua control no es muy avanzado pero aun así puedo tener a este pez en una burbuja de agua sobre la canoa.

Shh Katara, los vas a espantar—Dice susurrando sin quitar la vista de su reflejo en el agua—Ya puedo oler la comida.

Pero Sokka ¡Atrapé uno!—O eso creía hasta que el muy tarado pincha la burbuja de agua con su lanza dejando salir a mi pez sin querer, terminando empapado por el agua.

¡¿Porque cada vez que juegas con tu agua mágica termino empapado?!—Su voz refleja su enojo habitual, y obviamente tengo que contradecirle.

No es magia, se llama agua control y..—Soy interrumpida por su bocota.

Si, si, un antiguo arte de nuestra cultura bla bla bla—Toma aliento mientras se rasca la cabeza pensante, casi como si fuera un ser pensante—Solo quiero decir que si tuviera poderes raros no estaría molestando a nadie.

¿Me estas diciendo rara? No soy yo la que esta sacando músculos cada vez que veo mi reflejo en el agua—Dicho y hecho deja de hacerlo avergonzado pero no le da tiempo de responder, nuestra canoa golpea un trozo de hielo y de pronto estamos metidos en problemas pues una corriente nos lleva a más trozos de hielo.

¡A la izquierda! ¡A la izquierda!—Se que Sokka hace lo que puede pero no es suficiente.

Nuestra canoa queda entre dos trozos de hielo y se rompe, saltamos y por pura suerte caemos en uno de los trozos que destrozó nuestra canoa.

Estamos los dos en un trozo de hielo discutiendo como es habitual, Sokka puede ser muy machista a veces, alega que debió dejarme en el pueblo pues con mujeres a cargo problema seguro y simplemente no aguanto, empiezo a gritarle sus verdades a todo pulmón, puedo sentir el poder del agua a mi al rededor pero nunca imagine que tuviera la fuerza de romper un iceberg detrás mío lo cual provoco un derrumbe y las olas nos alejaron, cuando el agua se tranquilizo una luz celeste empezó a brotar del agua y apareció un iceberg enorme, la luz celeste venia de dentro y se podía ver a un chico con tatuajes de flecha, una chica junto a el y un enorme animal atrás dentro.

Sokka y yo nos vimos asombrados, cuando volteo de nuevo el chico abre los ojos y eso me es suficiente para saber que tengo que sacarlos de ahi.

Esta vivo ¡Hay que ayudarlo!—Tomo la lanza de mi hermano y corro al iceberg, escucho a Sokka quejándose atrás de que no deberíamos pero no le hago caso.

Después de algunos golpes el iceberg empieza a romperse y una enorme luz celeste aparece en el cielo, una vez roto el iceberg sale el chico el cual se desmaya y cae en mis brazos, sus tatuajes son impresionantes y su ropa me hace saber que no es de aquí.

Abre lentamente los ojos.
—Necesito preguntarte algo—Su voz es suave, se nota su cansancio

Dime—Contesto suave.

Por favor acércate—Le hago caso y mi inclino un poco más—¡¿Quieres andar en trineo conmigo?!—Su voz se animo de un segundo a otro

Seguro—Digo sin una gota de seguridad en mi cuerpo, el chico se levanta muy rápido y me da el pendiente de que se caiga, Sokka empieza a interrogarlo con preguntas bastante obvias, pues ¿Que hace un chico con tatuajes en un iceberg? Pero el chico no contesta ninguna y empieza a ver a todos lados buscando algo.

La amiga de Aang Donde viven las historias. Descúbrelo ahora