25.-El dia del Avatar

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Narra Ann

—¡¿Porque metes tu mano en mi boca?!—Al escuchar a Sokka decir algo así tan temprano no pude evitar levantarme a ver quien demonios le metió la mano en la boca y el porque.

Simple curiosidad.

Pero al voltear veo que solo es Momo no respetando su espacio personal, por alguna razón me desanimó, pensé que seria algo mas interesante, era una gran frase daba para mucho más.

Estaba apunto de regresar a dormir cuando siento pisadas acercarse, termino bien despierta al ver que nos rodean soldados de la nación del fuego en rinocerontes lagarto, bueno no se si soldados, estos tipos se ven con más personalidad que los típicos soldados.

4 en total tirando bombas y demás obviamente salimos volando después de que tomamos nuestras cosas, excepto por el dormido de Sokka el cual se olvido de tomar su boomerang hasta que ya estábamos volando.

—¡Mi boomerang!—Grita dolido.

—¡No hay tiempo!—Le grita su hermana.

—¡Ah pero para sus cosas si!—Me hice bolita en una esquina con mi planeador al escucharlo, pobre Sokka, debió ser mas rápido o mínimo estar menos dormido para tomar su mítico boomerang.

—Exacto—Le contesta Katara triunfal, yo solo digo que si perdiera su collar las cosas serían muy diferentes, mejor me guardo el comentario.

Al cabo de un rato encontramos en las afueras de un pueblo un lugar para abastecernos, por la huida solo tomamos nuestras armas y objetos de valor, me sorprende que Sokka no tomara nada de comida.

—Lo siento por tu boomerang—Se lamenta muy propio el cabeza flecha.

—Siento que perdí una parte de mi—Quisiera decir que Sokka esta siendo dramático, al ser maestra aire debo de no formar lazos con cosas materiales porque así no sere libre y mi elemento es el de la libertad, pero ahora no se como me sentiría si me quitaran el "ave" de madera que me regalo Sokka, o mi planeador claro.

—Te conseguiremos otro, líder Sokka—Le prometo para subirle los ánimos, pero no funciona pues nos suelta una gran charla de como nos sentiríamos nosotros sin nuestra flecha, peinado o arma.

—Aquí tienes chico cola de caballo—Agradecida con aquel hombre que nos atendió de cortarle la cuerda a Sokka.

—Solía ser el chico del boomerang—Dice como todo un mártir y no contengo el quejido que sale de mi.

El odiaba ser solo el chico del boomerang, supongo que es peor solo ser el chico.

Su hermana va y paga, el señor muy amable nos desea feliz día del ¿Avatar?

—¿Día del Avatar?—Oh no Aang, que no se te suba a la cabeza.

—¡Si! ¿Acaso no vienen por eso?—Comenta el hombre mientras se aleja camino al pueblo.

Nos observamos entre todos y tomamos la decisión silenciosa de ir.

Al llegar todo es muy festivo, toda la gente esta reunida en el centro, al ir vemos una Kyoshi y Roku gigantes hechos de madera y paja supongo.

—Es fabuloso que haya un gran festival en mi honor, pero me basta con ser apreciado—Suelta muy humilde el Avatar.

—Catelosico (mi yo norteña no pudo no decir esto, perdón) Te encanta esta atención—Aang me da un codazo y voltea a ver disimuladamente a Katara, va que hacerse el humilde para impresionar una chica es una forma de ligar. Le ruedo los ojos y volteo a ver al líder Sokka, tiene los ojos brillantes de la emoción, ya se le olvido su boomerang.

La amiga de Aang Donde viven las historias. Descúbrelo ahora