—¿Puedo pasar?
—¿Qué quieres?
—Disculparme, lo que dije hace un momento fue sin pensar, no quería hacerte sentir mal.
—¿Quién dijo que me hiciste sentir mal? ¿Crees que todo lo que sale de tu boca me importa?
—Gulf, lo siento, quise decir que no eres el tipo de Pavel, eso es todo.
—Da igual.
—¿Bajarás a cenar? Pedirán pizza.
—Tengo que hacerlo.
[...]
Los amigos de Mew seguían en la casa, algunas veces se emborrachaban y terminaban durmiendo en la sala, y esta vez no era la excepción. Todos se encontraban tirados en los lujosos sofás con cervezas en mano, Gulf se limitó a tomar solo refresco, no estaba acostumbrado a beber, el sabor del alcohol le resultaba desagradable. Había cajas de pizza y envoltorios de frituras por doquier. Todos ya estaban muy ebrios como para levantarse, así que Gulf optó por ayudar a limpiar un poco, si se iba a quedar ahí, por lo menos debía ser productivo.
Mew estaba acostado en el sofá más grande, su camisa tenía algunos botones desabrochados que dejaban una pequeña vista a sus tatuajes. Gulf jamás pensó que su vecino tuviera tanta tolerancia al alcohol, le contó diez cervezas para ser exactos, era una locura. Sin recalcar que bebió algunos shot de whisky.
Recorrió silenciosamente la sala y comenzó a limpiar, era la 1 a.m. y para su mala suerte tenía mucha energía. Una vez juntó toda la basura en una bolsa, salió fuera de la casa para vaciarlas al contenedor.
A Gulf le agradaba ese lugar, el hecho de que solo existiera esa gran casa y un taller en ese desierto lugar, le transmitía tranquilidad. Una vez dejó la bolsa de basura en su lugar, decidió ir a recorrer los alrededores de la casa, pero se detuvo al ver un auto estacionarse unos cuantos metros lejos del lugar.
Su piel se erizó, tenía algo de miedo, ¿quién iría a la casa de Mew en plena madrugada? Pensó un momento en volver adentro y llamar a los demás, pero cuando vio un rostro conocido acercarse se tranquilizó. Era Jae.
—Hey, Gulf, ¿qué haces afuera? —preguntó el chico mientras se acercaba.
—Hola, uhm... yo debería preguntar eso, ¿qué te trae aquí a esta hora?
—Vengo por los chicos —respondió en seco.
—Ellos están dormidos.
—¿Qué? No me digas que esos idiotas se pusieron a beber.
—Así fue, están todos inconscientes justo ahora.
—No puedo creer que esos tontos lo olvidaran —dijo molesto—. ¿Qué hay de Mew?
—Él también está dormido.
—¡Agh, esos tontos! ¿Cómo se les pudo olvidar?
—¿Pasó algo importante?
—Nada que te incumba —Gulf lo miró confundido, entonces Jae tuvo una buena idea—. Ahora que lo pienso... quizás tú puedas venir.
—¿Eh? ¿A dónde?
—A decir verdad hoy es el evento Running man's, todos los años participamos y este no era la excepción, pero ahora que veo que se les olvidó, tú podrías acompañarme y así no iré solo.
Gulf frunció su ceño, no le parecía buena idea meterse en algo donde no encajaba, pero por otro lado le avergonzaba el hecho de que Jae fuera solo a ese evento debido a que sus amigos lo dejaron plantado, ¿ir o no ir? Jae notó su semblante dudoso por lo que volvió a insistir.
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Knock Knock - mewgulf
Action[Esta historia contiene errores ortográficos] ❝Lo supe cuando te acercaste a mí, con ese olor a tabaco y gasolina. Estabas listo para enviciarme.❞ ¿Qué harías si descubres el secreto de tu vecino? Sencillo, subirte a su gran Audi R8 de neumáticos re...