8. Contrariedad

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Al llegar al lugar especial de Mew, Jae y K estaban esperando afuera de la casa.

Gulf bajó adolorido del auto y siguió hasta adentro a Mew, quién estaba muy enojado. Jae y K simplemente les siguieron el paso, sin dirigir la palabra a Gulf.

Una vez adentro, Gulf tomó asiento en el sofá de la sala de estar, los amigos de Mew imitaron la acción y se sentaron. Mew llegó con maletín de primeros auxilios y se arrodilló frente a Gulf para poder ver mejor su rostro y poder curar el golpe.

—¿Siguieron a Lenni? —Mew rompió el silencio.

—Si —respondió Jae.

—¿A qué hora? —Mew miró su reloj mientras abría la botella de alcohol para mojar un algodón posteriormente y limpiar el labio de Gulf.

—Dentro de dos horas.

Gulf no entendía a que se refería Mew y sus amigos, parecían hablar de algo que solo ellos podían comprender.

—Preparen el auto.

—Gulf, tómalo con calma —habló K—. Mercy suele perder los estribos cuando está enojado. Se le pasará en un rato más —K se levantó del sofá y dio una palmada en el hombro de Gulf—. Los dejaremos solos, así pueden hablar un poco.

—Iremos a preparar el auto —dijo Jae levantándose enseguida de K—. No seas muy duro con Gulf, él no sabe nada sobre Lenni.

Mew solo asintió y continuó aplicando ungüento en la herida del castaño.

—Ya terminé —guardó las cosas de nuevo en el botiquín mientras se ponía de pie.

—¿Por qué preparan el auto? —preguntó Gulf con nervios.

—No necesitas saberlo.

—Espera, siento mucho haberles dado problemas, pero necesito saber qué es lo que hice mal. Solo intenté correr contra alguien, fue una decisión mía.

—La cosa no es que hayas corrido, si no el con quien lo hiciste. Era Lenni, él es uno de los peores corredores con los que te puedas encontrar, hace trampa y es muy agresivo. No nos llevamos bien con él.

—¿Por qué pidió correr conmigo entonces? —Gulf entendía un poco más la molestia de Mew.

—Solo quería molestarte, Gulf.

—Ya entiendo, pero estaba siendo sincero con lo que te dije anteriormente.

—Ya te dije que no, Gulf. Tú no perteneces aquí, tú no eres como nosotros —Mew estaba siendo muy serio y duro con sus palabras—. Nosotros tenemos un pasado y una vida compleja, somos personas ocupadas, no solo corremos si es lo que piensas.

—Solo quiero intentar algo diferente una vez en mi vida, sentí tanta excitación cuando corrí mi auto. Jamás pensé que sería capaz de pisar el acelerador como lo hice en ese momento.

—Gulf, basta. No discutiré más —Mew se puso de pie y salió por la puerta principal.

Gulf observó a Mew salir y pensó algunos segundos en si seguirlo o simplemente quedarse dentro de la casa hasta que él regresara con alguna indicación. Optó por lo segundo, se quedó dentro.

El castaño paseó un rato por la sala de estar, era muy observador con cada detalle de la casa especial de Mew. Miró toda la decoración moderna que resaltaba entre esas paredes monótonas blancas. Todo se veía costoso, definitivamente Gulf vivía bien y con lujos, recordó que Mew era el dueño de la empresa de autos modificados, se preguntaba en cómo había llegado a ese punto.

No era consciente del tiempo que había pasado paseando y observando el piso de abajo, así que subió las escaleras para ahora curiosear. Se encontró con la primera habitación, quizás estaba siendo muy entrometido, pero no quería desaprovechar la oportunidad de conocer más sobre Mew, así que abrió la puerta y se introdujo. La verdad no había mucho que ver, parecía un cuarto para visitas. Cuando su curiosidad fue saciada se dirigió a la siguiente habitación, abrió la puerta y se encontró con algo que nunca imaginó, era una sala de diseño, en las paredes había ortografías de autos y bocetos a lápiz. Mew era muy bueno dibujando.

Knock Knock - mewgulfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora