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aziye caminaba con una gran sonrisa hacia el harem, su espera al fin había terminado. La gran corona en su cabeza demostraba a todos los criados que la vean pasar que su poder le había sido devuelto.

"¡Atención, la sultana Raziye!" gritó Gülagh.

Todas hicieron fila y se miraron entre sí, no sabían que estaba pasando ahora. Primero Gülfem se había convertido en sultana y la directora del harem, Mihrimah Sultán había sido conferida a sus obligaciones como esposa del gran visir y los demás príncipes estaban en sus provincias, Cemre tenía prohibida la entrada al palacio.

Raziye llegó hasta la habitación de la sultana, entró e hizo revencia. Si quería mantenerse en el palacio y obtener más poder debía mantener su fidelidad y comportamiento como lo había indicado su tía Fátima.

"Te regresé el título de Sultana, perdone tus errores Raziye así que esta vez espero que de verdad hagas las cosas bien y como quiero que se hagan" le decía la imponente mujer frente a ella.

"Se que hice mucho mal anteriormente madre pero te juro que esta vez no haré nada sin consultarlo contigo antes" beso la mano de la mujer.

"¿Ahora me llamarás madre?" se burló, "Dejate de estupideces Raziye, hace mucho tiempo que deje de considerarte mi hija y tú madre" informó, "Un error, un solo error que cometas y voy a matarte con mis propias manos" amenazó.

Raziye no dijo nada, tenía mucho que decir pero mantuvo la calma no quería parecer imprudente ahora mismo, lo importante era destruir a Hürrem y sus hijos para así poder poner al hijo de Mustafa en el trono y así regir en el nombre de su sobrino, hacer las cosas como debieron ser desde el principio.

"Le prometo que no cometerse ningún error que ponga en peligro mi vida" dijo.

"Tu soberbia siempre a sido un problema, crees que por ser hija del Sultán Süleyman nadie puede tocarte" se acercó hasta ella, "Escucha bien niña, yo no tengo distinción a la hora de ejecutar a alguien, visir, pasa, sultana o príncipes, todos son iguales cuando ordenó su muerte" le sonrió, "Espero que comprendas bien mis palabras ya que las demostré cuando asesine a tu hermano"

"Dejemos que Mustafa descanse, sultana" dijo apenas, "Los muertos ya no tienen porque ser nombrados"

"Lo mencionó para que recuerdes y tengas presente lo que sucede cuando me traicionan" se alejo, "Ahora vete"

La joven abandono los aposentos con un muy mal sabor de boca, esa conversación le había traído muy malos recuerdos. Su tía ya la esperaba fuera de los aposentos, al mirar su rostro corrió a preguntar.

"¿Estas bien? ¿Te dijo algo malo?"  cuestionó preocupada.

"No sultana, solo me sentí mal por un momento" mintió.

"Debería revisarte la médica, Gülagh traae a la doctora" comenzó a caminar con Raziye del brazo.

...

Bülbül entró a los aposentos con la carta que por alguna razón la sultana evitaba leer, comprendía que aún le dolía esa desconfianza que Hürrem le tuvo en algún momento pero cuando leyó la carta creyó que era urgente que mirará la carta de inmediato.

"Bülbül quiero comer perdices fritas hoy" sonrió.

"Sultana, hay algo de lo que tenemos que hablar" dijo.

"¿Qué sucede Bülbül? ¿Te paso algo malo?" el hombre negó, "¿Entonces?"

"Se trata de la sultana Hürrem" comentó.

"Crei que ese tema había quedado claro, no quiero saber nada de esa muj....

" La Sultana está muy enferma, puede que tenga muy poco tiempo de vida" lo dijo fuerte y rápido.

"¿Qué dijiste?" la sultana trataba de procesar todo lo dicho con anterioridad.

"La carta que le envió la sultana fue escrita por Sümbul, sultana" se acercó y le dio el papel, "Menciona que la sultana ha enfermado de gravedad también dijo que el diagnóstico sobre su vida no es nada bueno, mencionó que no tiene mucho tiempo de vida y que por favor dejará ser feliz a la sultana con usted por el tiempo que le resta" contó.

"¿Hace cuanto sabes esto?" decía mientras leía la carta.

"Desde el día que la sultana Gülfem se volvió directora del harem" dijo.

"Eso hace ya seis meses, ¿porque esperaste tanto tiempo?" lo miró confundida.

"Usted dijo que no quería saber nada de ella, que asesinaria a cualquiera que mencionara si quiera su nombre" dijo, "Pero cuando me encontré la carta mientras leía algunos registro me di cuenta de la gravedad de todo esto"

"Muy bien" se levantó, "Envía un carruaje por ella hasta la provincia de Bayezid, quiero que llegue en muy buen estado" ordenó, "Balibey irá también, nosotros nos encargaremos de tener todo listo para su llegada al palacio"

"¿Va a perdonarlá?" La miró esperando una respuesta.

"Es una mujer otomana, madre de algunos príncipes de la dinastía" evadió la repuesta, "Mi trabajo es cuidar y mantener a la sagrada dinastía con bien" fue todo lo que dijo antes de arrojar la carta al fuego.

"Comprendo" dijo su agha.

"Haz lo que te he ordenado" se volvió a él.

"¿Qué haremos con la sultana Gülfem?" cuestionó.

"Encargate de lo que que he ordenado hoy, mañana podremos ponernos a pensar que lo haremos con ella y la dirección del harem" fue todo lo que dijo.

"Si sultana" se alejo, "Solo aclare su corazón, piense bien lo que usted quiere antes de que todo sea demasiado tarde"

"Sal ahora"

"Recuerde que una vez perdido lo mas valioso no podrá ni habrá forma de recuperarlo" y salió.

Holaaaa florecitas. Hace ya bastante tiempo que no escribía pero tampoco veo sus comentarios. Bueno fuera de eso estoy pensando si seguir con la historia o dejarla como esta y heredarla a alguien más.

COMENTE SI QUIEREN QUE SIGA CON LA HISTORIA O LA ENTREGUE A ALGUIEN MÁS.

Nos leemos mañana.

 Ottoman EmpireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora