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¡Enfermedad!

Una sultana detuvo su viaje al sentir dolor, ella habia estado ocultando una enfermedad. No quería que nadie lo supiera por miedo a lo que se dijera y aunque no quería abandonar el palacio imperial se vio obligada por esta repentina enfermedad, lo que ella quería era estar con su amada esposa quien estaba gravemente herida y al no saber si su enfermedad era contagiosa decidió irse con Bayezid para ser atendida.

"Sultana sigo pensando en que debió descansar antes de venir, a tenido muchas pesadillas" miró el rostro de dolor de la mujer, "¿Le duele mucho?"

"Alláh mediante por la mañana estaré mejor, solo es un pequeño dolor Sümbul" apenas sonrió.

"Hay una médica que nos acompaña, la llamaré"

"No es necesario, estare bien por la mañana" repitió.

Siguieron su camino, sin embargo el dolor no cedía por lo que se vieron obligados a parar en la mañana. Hürrem bajo del carruaje quejándose aún más.

"¿Está bien? ¿Quiere que llame a la doctora?"

"Llamala ahora, no soporto el dolor" tocaba su hombro derecho.

Los guardias rápidamente montaron una carpa para que la sultana pudiese descansar un momento mientras la doctora se preparaba para atender sus dolores.  La mujer entró, miró el hombro de la sultana con mucha preocupación y miedo.

"¿Tiene algún otro dolor, sultana?" cuestionó

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"¿Tiene algún otro dolor, sultana?" cuestionó.

"No, solo tengo este y ya me esta atando" dijo sin mirar a la médica.

"¿Es algo malo?" preguntó Sümbul.

"Debemos cauterizar de inmediato" dijo.

Procedió a cauterizar y al terminar solo se despidió. A unos metros de la carpa Sümbul se acercó a la médica.

"Dígame la verdad, ¿que tiene nuestra sultana?"

"La sultana está muy mal Sümbul, tiene una enfermedad que ninguna otra persona se ha recuperado nunca" dijo, "Le queda muy poco tiempo Sümbul"

"Le queda muy poco tiempo"

Esas palabras resonaron en su cabeza al oírlas, ¿poco tiempo? Eso sólo significaba que la sultana no viviría mucho tiempo, la muerte se estaba acercado a su preciada sultana.

"Deben cuidarla, traten de que sea feliz todo el tiempo que le queda y... Lo lamento Sümbul agha, se que es muy importante para usted" la médica se retiro.

Hürrem observaba desde la carpa, se imagino de lo que hablaban cuando vio la cara de preocupación y de tristeza en Sümbul y la médica. Suspiro apenas, por primera vez le tenía miedo a la justicia de Alláh. Su destino era la muerte.  Quizás esa la manera de pagar todo lo que cometió, quería visitar a Ibrahim en su tumba pero ella no sabía dónde lo enterraron.

A partir de este capítulo, los demás serán cortos ¿porque? Bueno quiero alargar un poco el amor de Hülev.
Nos leemos después.

 Ottoman EmpireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora