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Tres meses después

Elena estaba explorando el palacio junto a su amiga, ambas se veían asombradas por este magnífico palacio. Llegaron hasta el calabozo, donde observó a la mujer que solía tener el poder en sus manos. Lamentó la condición en la que se encontraba ahora.

"¿Sultana? " le habló, la mujer la miró confundida.

"¿Quién eres?" cuestionó.

"Me llamo Elena y soy la favorita del sultán" observó la diminuta sonrisa de su mayor.

"Creí que su favorita era Zeynep" dijo, "Pero su amor siempre a sido Ayşe" aclaró, "¿Donde quedas tú?"

"Sultana, yo no pienso convertirme en madre de un príncipe" le dijo, "Yo solo quiero volver a casa con mi familia"

"Yo te puedo ayudar, claro que tendrías que ayudarme a mi"

"¿Que tengo que hacer?"

"Quiero que vayas a los aposentos de la madre sultana" observó el miedo en la chica, "debajo del colchón de la cama hay un libro y unas cartas. Entregaselas a Sumbül y dile que eso tiene que llegar a Hürrem" le sonrió.

"¿Con eso volveré a casa?" la mujer asintió.

"Cuando salga de este lugar, tu podrás volver a casa" dejo de mirarla, "Ve con la médica y dile que te entregue el frasco azul, eso impedirá que te embaraces. Por lo mientras seguirás tu vida aquí" miró los muros.

Las mujeres salieron de los calabozos, Elena estaba dispuesta a hacer lo que sea por volver a casa. Al menos eso pensaba hasta que lo escucho. Entraron al harem con su bonita sonrisa.

"Toma un vaso" le sonrió otra mujer, "Te encantará"

"¿A que se debe esto?" dijo su amiga tomando el vaso.

"¿Aún no lo saben?" miró a las dos, ambas negaron. "La señorita Mihrünnisa está embarazada"

"¿Quien es Mihrünnisa?"

"Es la hija del comandante en jefe de las tropas navales. Su majestad se caso con ella cuando inició su sultanato"

"Me alegra por su majestad, tendrá otro hijo" sonrió amablemente.

"Pero no sólo ella está embarazada" las miró, "La Sultanas Ayşe y Zeynep también lo están"

"¿Qué? Vaya, el sultan si que no pierde el tiempo" las tres mujeres rieron.

"¡Atención. Su majestad, sultán Mustafa!" gritó Sumbül.

Todas se formaron e inclinaron ante el monarca. El estaba frente a los aposentos de la madre sultana, su hermana lo acompañaba.

"Se que se preguntarán, ahora que mi madre no estará más en el palacio ¿quién estará a cargo del harem?" miró a su hermana, "Déjenme satisfacer su curiosidad. Mi hermana, la Sultana Raziye es quien estará a cargo de la dirección del harem" le entregó el sello.

Todas volvieron a inclinarse, había tensión ya que todo el harem estaba de parte de la Sultana Aasiyah. Todo el palacio aún servía a la Sultana pero para sobrevivir en este palacio todos tomaron la decisión de fingir estar de lado de Raziye.

....

Elena y su amiga fueron encomendadas a limpiar los aposentos de la madre sultana. Cuando todos salieron solo habían quedado Elena y su amiga (la cual no recuerdo si le puse un nombre jaja) ellas estaban acomodando la cama. Se encontraban solas por lo que buscaron lo que se les encomendó. Se miraron y entre las mamtas que tenían, escondieron el libro y las cartas.

"Debemos ir con Sumbül" dijo su amiga, Elena asintió.

"Esconde bien eso, no podemos tener errores"  escucharon la puerta abrirse.

"Es una muy mala señal sultana" Turhan entraba tras la Sultana Raziye.

"¿Porque dices eso?" se detuvo a mirar a las chicas con sus mantas.

"Es un muy mal augurio que las tres mujeres del sultán estén embarazadas" suspiro, "Aasiyah Sultan siempre dijo que cuando eso sucedía significaba que la muerte rondaria el palacio, llevándose una vida del mismo"

"¿Solo porque lo dijo Alev, vamos a creerlo?"

"Mi sultana, esa mujer nunca se equivoca, recuerde que todo lo que sale de su boca se cumple" la miró preocupada, "El sultán va a morir pronto y si el no muere, entonces usted morirá" dijo las mismas palabras que Alev dijo anteriormente.

"Alláh no estuvo de su lado esta vez, eso quiere decir que ya no es más una santa"

"Ella nunca se denominó como Santa, su santidad antes de morir la nombró profetiza de Alláh. Un profeta es aquel que sabe lo que sucederá y que todo lo que sale de su boca se cumple" se puso frente a Raziye, "Ella predijo la muerte del sultán Süleyman y la de su hijo Mehmed"

"Veremos si esta vez lo hace" sonrió.

Las dos chicas salieron despues de oír, habían terminado su trabajo y ahora se dirijan donde Sumbül. Lo entontraron en la fuente.

"Sumbül agha" lo llamaron.

"¿Que quieren?" las miro cansado.

"Alev Sultan quiere que envíes esto a la Sultana Hürrem"

"Me están vigilando" susurro.

"Ella estaba convencida de que sabrías que hacer"  entonces comprendió que ya tenía el encuentro arreglado.

"Muy bien, iré a dejarlo" recordó.

El acompañó a ambas sultanas el día de su reconciliación al mercado, Alev Sultan había llevado a ambos hacia Alibey, ahí tenía una sala de consejo.

Flashback

"Si algo sale mal, este lugar será nuestro punto de contacto. No llama la atención por lo que podrán contactarme o recibir mis noticias." los miró.

"Si llegasen a seguirlos, tendrán que ingeniárselas. No pueden dejar que descubran donde están los príncipes" no quitó su mirada de Hürrem, "Pase lo que pase, yo sobrevivire y volveremos a estar juntas, lo prometo."

"Todo saldrá bien, ya lo verás"

Fin

Sabía que era arriesgado pero se aventuró. Envío a través de un comerciante una carta donde decía que debían verse en la casa de Alibey.
El quería ver la bonita sonrisa de su sultana al saber que la mujer que amaba estaba viva y que había enviado algo que seguro ayudaría.

 Ottoman EmpireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora