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Capítulo 30

"La violencia no es la mejor arma contra el odio, ni la venganza el mejor bálsamo para las heridas."

-Charlotte Brontë.

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Corremos a través del enjambre de estudiantes que se precipitan por salir de la cafetería. Ambas chicas sostienen mis manos presas del pánico, y no es que yo no lo tenga, pero la adrenalina del momento y el propósito de sacarnos con urgencia de este lugar hace que mi miedo se opaque por instantes.

Llegamos al aparcamiento del campus y así como lo había indicado Nam, una Van platinada espera por nosotras.
A pocos metros de ella uno de los cristales tintados deja paso a la cabeza de Seong Woo, quien con el frenético movimiento de sus manos, nos incita a correr con mayor rapidez.

Casi a solo un paso de ella, la puerta se abre y prácticamente nos lanzamos al interior. No sé con exactitud de qué huimos, o qué es lo que esa persona desea y es capaz de hacer por conseguirlo...pero la tensión y la preocupación por parte de nuestros guías es palpable. Algo se salió de control y no estamos en posición de refutar sus métodos de protección.

—¿Están todas bien?—pregunta Yoongi observándonos por el retrovisor mientras coloca el auto en marcha.

—Eso creo...¿Qué ha pasado?—cuestiona Alice mientras sostiene su pecho en un intento por regular su agitada respiración.

—¿Está bien Hye Kyung?

Yoongi suspira y oprime el volante entre sus dedos, claramente se encuentra demasiado tenso por todo esto...y no es para menos. Cuando le expliqué a las chicas lo que había sucedido, fue inevitable que se preocuparan en demasía.

—Por ahora está estable. El disparo no llegó a ser mortal...

—¿O sea que la intención del agresor no era asesinarla?

—Creemos que ha sido un aviso, ya sabe de ustedes y conoce que intentamos protegerlas. Así que sus intenciones claramente pudieron haber sido advertirnos de que no dudaría en intervenir a toda costa...—comenta Seung Woo preocupado.

—Eso es horrible...—no puedo creer que le hayan disparado a un inocente solo para advertirle al resto de que conoce sus planes.

¿En serio existe alguien capaz de algo así?

—Evita la avenida central, no sabemos si nos siguen.—Seung Woo le susurra a Yoongi, el cual asiente y se desvía tomando rumbo hacia una calle apartada cuyos recovecos nunca había visto.

Al escucharlo decir esas palabras, mi cuerpo se tensa y mi piel comienza a hormiguear a causa de los nervios.
Por como las chicas miran con horror hacia el exterior, imagino que esa indicación surtió el mismo efecto en ellas. Todos los autos a nuestro alrededor parecen seguirnos, y a la vez ninguno lo hace, una clara consecuencia de la paranoia del momento.

—¿Cómo nos encontró?

—No estamos seguros, en un principio solo conocía el paradero de Liz, ni siquiera sabemos cómo. Así que nuestra suposición es que las haya visto juntas en algún momento...

—¿Cómo podría saberlo? Cubrimos nuestros lunares...—dice Keira sin apartar su vista de la ventanilla del auto.

—Creemos que es alguien que las conoce, alguien cercano que ha podido verlos.—responde Seung Woo.

A mi mente llegan un sinfín de posibilidades, pero ninguna encaja con tanta exactitud como la figura de Daniel. Todo parece apuntar a él. La noche en la que encontramos a Akari estaba en la residencia, sus mensajes amenazantes, sus constantes demandas para que acepte el acuerdo...