Un Sueño Vivido. II © (TERMINADA)

Amnesia

Dos largos meses tuvieron que pasar hasta que, por fin, cesaron las insufribles pesadillas que la agonizaban desde aquella tarde en la que fue al cine. Para colmo, ni siquiera pudo ver la película. Un fuerte dolor de cabeza la sacó del cine en cuanto apareció el protagonista. Sin embargo, una cosa tenía clara, quizá dos: no volvería al cine y mucho menos vería Capitán América, el primer vengador. Más aún después de, no sólo, las pesadillas si no, también, por su madre. De las dos, la madre fue quien más sufrió. No conciliaba el sueño temiendo que su hija volviera al coma, por eso se pasaba las noches en vela.

Así que, al final, fue la hija quien cuidó de la madre.

Pero todo eso acabó, las pesadillas, las noches sin dormir...

Como se acercaban las vacaciones, Beatriz quiso recompensar a su madre regalándola un viaje al destino que esta eligiera.

Y no sólo eso porque Paula también sufrió por su querida amiga, se creía culpable de todo cuando Beatriz sabía bien que eso no era ni mucho menos cierto.

Por ello la invitó al viaje también. Además se había perdido todo un verano y pensaba recuperarlo.

Las vacaciones que tanto necesitaban las tres al fin llegaron un buen día de julio. Como no las sobraba el dinero lo más que pudieron permitirse fue ir a una playa mediterránea. Tres horas en autobús las separaban del mar.

Nada más bajar del vehículo sintieron la cálida brisa y el olor a mar de la costa mediterránea.

Hasta ahí todo bien, los problemas volverían cuando el último día Beatriz tardo más que de costumbre en subir a coger aire cuando estaba buceando.

Notando cómo la faltaba el aire se impulsó hacia la superficie, sin embargo no se movió. El pánico invadió su mente en aquel momento, error fatal.

De no haber sido por Paula lo más seguro es que se hubiera ahogado allí mismo sin remedio.

Su amiga sospechó que Beatriz llevaba demasiado tiempo sumergida, incluso para ella. Paula sabia que aguantaba bastante tiempo pero aquello era demasiado. Preocupada se lanzó al agua sin pensarlo y saco a su amiga de allí justo en el momento en que se quedó inconsciente.

Su madre atenta a la escena se acercó rápidamente a su dormida hija.

Gracias a los dioses volvió en sí segundos después de yacer en la arena.

Pero ahora algo había cambiado, un recuerdo sacudió su mente. En seguida supo que esa imagen provenía de su sueño cuando estuvo en coma.

Unos profundos ojos azules.