Fearless

9

BNET

Me levante algo perezoso por la mañana, había estado parte de la noche pensando en cierta persona cuando debería estar pensando en otra, por ejemplo en mi actual novia. Me encamine hacia el baño algo confundido y desanimado y me di una ducha rápida.

Me había levantado muy tarde y prácticamente tendríamos la comida en poco tiempo por lo que me vestí listo para salir después hacia casa de Ginés.

- Javier la comida está lista -alzó la voz mi madre-
- Voy mamá -respondí y termine de secar mi pelo, aunque lo tenía todavía mojado-

Salí y estaban todos sentados. Mi hermana tenía una cara de resaca que ni ella se la creía, sin embargo Aria parecía que estaba fresca, y sin conocerla apenas supe que seguramente no habría bebido.

La comida estaba pasando tranquila y tranquilo estaba yo cada vez que escuchaba hablar a Aria, lo hacía con una delicadeza que pocas veces escuche ¿que mierda estás pensando Javier?. No obstante, mi hermana arruino todo.

-¿Sabéis que ayer Aria ligo? -dijo levantando sus cejas y me atragante con el agua-
-¿Estás bien Javi? -me dijo Belén y sentí unos ojos azules sobre mí-
- Si -dije duramente-
- ¿Y como es eso Aria? -dijo mi madre con una sonrisa haciendo que esta se sonrojara-
- No bueno.. es un amigo -dijo rápidamente y me dio una rápida mirada-
- Le dio su número -canturreo mi hermana, la adoraba pero era molesta ahora mismo-
- Si pero no... -Aria estaba avergonzada y yo molesto, no se porque sinceramente-
- Mama -dije cambiando de tema- la semana que viene se quedará Nuria ¿recuerdas?
- Oh ¡sii claro! -dijo secándose las manos- se llevara muy bien con Aria.
- ¿Quien es? -dijo inocentemente Aria-
- Mi novia -dije cortante-
- Oh -una pequeña sonrisa incómoda salió de sus labios- seguro que me llevare bien con ella.
- Si es muy buena niña -dijo Belén- ¿oye llamamos a tu amigo para que lo veas?
- Si no tienes nada que hacer podemos llamarlo -dijo ella ilusionada y sentí por un momento una gran molestia apoderarse de mi-
- He quedado con Ginés -me levante con el plato- permiso.

Salí seguidamente de casa al recoger mi parte y lo primero que hice fue encenderme un cigarro, estoy hasta los cojones de que esta niña esté en mi casa. Está haciendo que empiece a sentir cosas que sentía al principio con Nuria, o que ni siquiera sabía cómo expresar la sensación rara que tenía en mi estómago al tenerla delante, no sé si alguna vez he llegado a sentirlo.

- Hermano -me abrazó y me abrió la puerta de su casa- ¿y esa cara? -suspire- pasa.
- Gracias -susurre- ¿tienes porro? -asintió y me tendió uno-
- ¿Qué te pasa?
- Escuchame Ginés -dije nervioso- no sé qué mierda me pasa, es absurdo y te vas a reir.
- ¿Porque debería reírme? Somos amigos -me puso la mano en la espalda- suéltalo.
- ¿Ya conoces a Aria no?
- Claro, tremenda belleza es y será cuando crezca más -dijo-
- No ayudas Zasko -suspire- solo estas poniendome de mala ostia -y era verdad-
- Eh ¿por qué te pones así? -dijo confundido-
- Este es el problema -di una calada fuerte- cada vez que hablan de ella o se la comen con la mirada me molesta, hoy en la comida mi hermana ha dicho que ligó ayer en una fiesta y he tenido una sensación realmente mala tio. No lleva ni dos meses en casa Zasko y me es dificil quitar mi mirada de ella. Me comporto como un mierda con ella por lo mismo y se que es absurdo y en cierta parte me duele tratarla así -suspire de nuevo- vaya mierda.
- Joder hermano... ¿te gusta?
- No -dije rápidamente- es raro, es como si por una parte la viera tan vulnerable por todo lo que ha tenido que sufrir que me causa querer ayudarla,  pero por otra como que siento que hay algo más y no se que es. No se si me da buena vibra su presencia.
- Por lo que me has estado diciendo te da más que buena vibra -se empezó a reír-
- ¿No entiendes?, tengo novia Ginés -dije rendido- y la quiero, Nuria ha sido la primera.
- ¿Me dejas decirte algo? -dijo mirandome y asentí despacio-
- Da igual que sea tu primera o tu cuarta porque si conoces a una persona y si esa persona está para ti y empiezas a sentir cosas por ella no tienes la más mínima culpa hermano. Y adoro a Nuria, lo sabes -asentí cansado- pero nunca me has hablado de ella con el brillo en tus ojos como el que tienes ahora. Nuria ha sido tu mejor amiga desde la infancia Javier... realmente empezasteis a salir porque os gustabais pero siempre ha habido buena relación de amigos... nose si me entiendes.
- No se si quiero entenderlo... llevo casi tres años con ella y estoy seguro que cuando venga de nuevo se me quitaran estas tonterías de la cabeza.
- Bueno... solo te he dicho lo que pienso pero no te rayes por eso porque puedes terminar muy quemado. Y ten cuidado con lo que haces Javier, creo que Aria es buena chica y ya ha sufrido demasiado.

Lo sabía, sabía que su vida no había sido nada fácil y que ya no tenía a sus padres con ella. Lo que menos quería era darle más vueltas, lo que tenía que hacer era evitarla más de lo que la evitaba ya.

ARIA

Al final llamamos a David pero estaba ocupado cuidando de su hermano pequeño. Nos invitó incluso a su casa pero nos daba algo de vergüenza al ser la primera vez por lo que quedamos en vernos otro día.

Lo que hicimos fue pasar la tarde en el centro comercial y comprar algunas cosas que nos faltaban. Llegamos a casa y estaba María en el sofá leyendo.

-Hola niñas -dijo levantando la vista- ¿que tal lo habéis pasado?
-Holaaaa -dijo Belen-
-Hola -dije con una pequeña sonrisa- muy bien María.
-Mamá una pregunta -dijo Belén sentándose también- ¿te acuerdas que me dejaste ir a la internacional de este año? -¿que era la internacional?-
- Si, me acuerdo -dijo la madre-
- Pues ¿sigue en pie?¿podría venir Aria? -dijo haciendo puchero-
- ¿Eso que es? -dije algo perdida-
- ¿No lo conoces? -dijo sorprendida Belén-
- No... -dije-
- Hoy toca maratón de batallas en vez de películas, sólo entonces entenderás.
- Eso tenéis que hablarlo con Javier -dijo la madre- yo te di permiso y dejaría a Aria pero solo si hay alguna persona que se hace cargo, no es tan fácil Belen.

Después de estar un rato más con la madre hablando fuimos a cambiarnos y nos llevamos la cena a la habitación porque Belén quería enseñarme no se que de las batallas. Al principio entendí poco pero cuando iba viendo más videos estaba alucinando, era increíble la facilidad de estos chicos y chicas para hacer eso.

Lo que no me esperaba fue ver la internacional del año pasado y ver a Javier como ganador. Miles de mariposas estaban revoloteando en mi estómago al verlo, estaba muy guapo y se caracterizaba por el tono serio y sombrío que tiene.

Mis mejillas se pusieron de nuevo rojas pero intente ocultarlo. Soy pésima y más pésima soy al pensar que podemos tener algo porque nunca llegaría a pasar, no cuando tiene novia y cuando soy una intrusa en esta casa para el.

Ni siquiera me reconocía, no reconocía esa infancia que llegamos en cierta parte a compartir, aunque no lo culpaba ... yo tampoco lo hacía hasta entonces.